5

2.3K 175 6
                                    

– Buena chica, Fanny, está bien. –Yelena la arrulla suavemente, rascándola detrás de las orejas mientras Fanny lloriquea y la mira antes de resoplar y apoyar la cabeza en sus piernas. Yelena se sienta erguida y mira a su alrededor con curiosidad.

– Natasha me dijo mientras estábamos en Wakanda que tú estabas por ahí fuera ayudando a liberar a las otras chicas del control mental de Dreykov. –dice Bucky lentamente, los ojos casi hiperconcentrados en la forma en que Yelena hace girar el anillo en su dedo, su pie golpea repetidamente el suelo del avión en el que se encuentran actualmente.

No le gusta estar encerrada en un espacio pequeño sin escapatoria del hombre que tiene delante.

Él puede decirle todas las mentiras que quiera, ella todavía ve solo al soldado de invierno cuando lo mira.

Un brazo frío de metal envuelto alrededor de su garganta, exprimiéndole la vida, una voz resonando desde el otro lado de la habitación mientras observa al soldado de invierno apretar su brazo alrededor de su cuello con más fuerza.

– ¡No es suficiente! inténtalo de nuevo, Yelena!

La cicatriz detrás de su oreja palpita dolorosamente.

– Sep, ¿y qué? –dice ella sin rodeos, sin mirarlo mientras él la mira fijamente.

– ¿Tuviste éxito? –pregunta, Yelena levanta una ceja.

– Pues no lo sé, desaparecí y volví cinco años después. De las últimas que buscaba, sus rastros se han enfriado. Las he estado buscando de nuevo. –dice Yelena con firmeza, sacudiéndose levemente cuando el avión tiembla casi violentamente al chocar contra una densa nube en el cielo. Fanny lloriquea y Yelena vuelve a rascar detrás de sus orejas para consolarla una vez más.

Bucky sigue tan estoico como siempre. 

– ¿Ha habido suerte?

– Nop. –dice simplemente, haciendo estallar la 'p' antes de mirarlo. Bucky frunce los labios y está en silencio por unos momentos antes de sonreírle.

– Tal vez tú y yo podamos unirnos, encontrar a esas chicas desaparecidas juntos.

– ¿Por qué? –Yelena gruñe mientras levanta el pie hasta el borde de su asiento y se vuelve a atar los cordones de los zapatos con indiferencia. Bucky cruza los brazos sobre el pecho y Yelena mira brevemente hacia la forma en que su brazo de metal se refleja en la luz del avión que lo golpea.

Le duele el cuello, como si tuviera memoria muscular.

– Supongo que tengo que hacer algo para devolver el bien ante lo que hice en nombre del mal. –dice con firmeza, y Yelena no puede evitar su reacción mientras se burla y deja escapar una carcajada.

– ¿Tú crees? No creo que estén particularmente felices de verte. –le dice inexpresivamente, dándole una sonrisa irónica que hace que la sonrisa en el rostro de Bucky se desvanezca. Se encoge de hombros.

– Ya, supongo que no. Aún así, podría...

– Ya sabes, no tienes por qué hacer eso... –Yelena interrumpe, su pie pisa fuerte en el suelo de metal mientras termina de atarse los cordones y levanta el otro pie hasta el borde del asiento.

– ¿Hacer qué? –Bucky pregunta confundido.

– Cuidar de mí. O lo que sea que estés haciendo por Natasha porque ella mantuvo tu pequeño secreto. Probablemente ni siquiera lo hizo por ti, lo hizo por sí misma para que nadie se enterara de la terrible mierda que nos hicieron en esa sala. Además, puedo manejarme yo misma y a las otras chicas. –le dice, tirando de los cordones para apretar su bota y mirándolo con una ceja levantada.

¿segunda oportunidad? - wandanat / scarletwidowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora