Capítulo4.Doblando el callejón

108 14 0
                                        

Narra Chico Bestia :

¡¡¡CORRER!!!
Mi estupenda dieta vegana me ha hecho delgado pero eso no me hace para nada más veloz, al contrario, la verdad es que soy muy lento y me canso fácilmente.

-Garfield, hola, ¿recuerdas algo?¡te puedes transformar en animales!
- Sí, pero, hola, recuerdas que la camiseta es Calvin Klein y la chaqueta es nueva, no queremos terminar con las ropas en arapos y a la pelota, y todo por no querer ponerte las mallas de las transformaciones.
Por cierto, no se asusten, en momentos como estos me pongo a hablar conmigo mismo.

Cb: Hey viejo en serio no era mi intención, bueno si era mi intención pero...

- No te preocupes enano alienígena cuando te atrape se te quitarán los deseos de flirtear con mi novia

¡¡¡Alienígena!!!, seré verde pero de alienígena no tengo un solo pelo.
Lo peor de todo es que parecía divertirse.
Esquivaba lo mejor que podía a las personas; crucé una calle tan rápido que termine rodando por el capó de un taxi; por suerte salí ileso pero estoy seguro de que mañana me dolerá hasta el último hueso.
Y así seguía yo corriendo con el gorila pisandomé los talones; cada vez que podía sacaba ventaja metiéndome en montones de gente, pero él siempre lograba alcanzarme, y lo que nos separaban eran apenas unos metros que disminuía cada vez más, y ya me estaba cansando demasiado, pero gracias a el bendito tofu, comenzó a llenarse todo de personas que iban y venían,como es típico en el Centro de L•A; y yo aproveche esta oportunidad para utilizar mi super poder de bajito para escabullirme.
Después de unos dolorosos intentos, llenos de codazos en las costillas, y fuertes pizotones; logre salir de todo el gentío y me adentré en una calle pararela sin parar de correr, no me gustaría que me alcanzará mi nuevo amigo.

Doble la esquina a todo velocidad sin parar de mirar hacia atrás cuando sentí que impactaba con algo y caí al suelo ensima de ello; habri los ojos y...

***
Narra Raven :

Ya anochecía y decidí salir de la biblioteca ya que mis piernas estaban sufriendo por haber estado tanto tiempo sentada.
Además estoy buscando alguien que pague algo por un diamante de mi planeta que sin ninguna razón aparante mi madre puso en mi equipaje, y por el que estoy segura que me darán algo.
Luego de unos minutos caminando encontré una tienda de antigüedades que me pagaron cien dolares por el diamante; no creo que me sirvan para mucho, pero esto es mucho más que nada. Pensaba en regresar a la biblioteca,  mientras examinaba el dinero recién obtenido cuando sentí que algo me empujó lo que hizo que me callera de espaldas al suelo abrí de golpe los ojos y...
Tenia ensima a un chico verde, contando sus ojos y cabello; que parecía tan sorprendido como yo, pero que no se movía de ensima,
al contrario de esto pestaño mirandome directo a los ojos y yo hice lo mismo, así estubimos por alrededor de cinco incomodos segundos; no me gusta el contacto físico con nada y mucho menos con nadie; llevo más de diez años evitando contacto con cualquier otra forma de vida, y digo evitar, por no decir sin tener ningún tipo contacto; y para terminar él comenzó a reírse y dijo :

Cb: Jaja lo siento viejo

- ¡¿Pero que le pasa?! - pensé y con esto le enceste un rodillazo en el entrepierna para luego teletransportarme a su lado.

-¡Ahhhhhhhhhh!- gritó este mientras se estremecía en el suelo.

-Idiota- dije y comenzé a recoger el dinero del suelo.

El chico se levantó y empezó a sacudirse el polvo de la ropa.

Cb: Hola viejo, disculpa por lo de antes, no miraba por donde iba.

-¡No me digas!- pensé sarcástica pero no lo dije ya que prefiero no intercambiar palabras con gente verde que te tira al suelo, cuando lo único que estas haciendo en contar dinero. Miré al cielo mientras pensaba si debería teletransportarme o no, da igual teletransportarme, en fin de cuentas el es verde, así que debe de estar adaptado a este tipo de cosas, espero que no se ponga a gritar. Ya estaba decidido cuando fui cubierta por una sombra gigante de ¿¡un autobús!?; que se nos viene ensima.
El chico verde estaba al lado mio también se dio cuenta de ello y se había quedado boquieabierto.
Por suerte mis reflejos me permitieron detenerlo a tan sólo unos centímetros de mi nariz utilizando mis poderes de telequinesis; pero eso no impidió que el chico verde lanzará un extraño grito, como si fuese una chica

-¡¡¡Ahhhhhhhhhh mami no quiero morir!!!- gritó cubriéndose con las manos la cara para luego destaparsela y mirar lo que había ocurrido y expresar -¡¡¡Oh genial; tienes poderes!!!- exclamó al parecer sin haber notado antes mi teletransportacion -por cierto desde cuando llueven autobuses del cielo- y junto a este tonto comentario escuchamos unos gritos cerca.

Quedó cortito, pero dije que iba a haber choques, y hubo choques XD

"Dos mundos"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora