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Recuerdo que ese dia Marco me llamo a la hora del almuerzo, hablamos por un buen rato. Me dijo que estaba bien pero que tenia que integrarse un poco más, cosa que no era difícil para el.

A las 6pm empecé a preparar todo para cuando el llegara, quería que el disfrutara.

A eso de las 7pm yo estaba sentada en el sofá de la sala y el entra con una sonrisa en el rostro, se veía tan feliz, su primer dia de trabajo fue muy bueno sin duda.

-¿Que huele tan rico? - pregunto acercándose a darme un beso.

Ay dios sabia tan bien, solo tenía 12 horas sin verlo y ya lo extrañaba.

-Porque no mejor te vas a bañar y luego vienes a cenar.

-¿Me estas alejando?- llevo una mano a su pecho en modo de impresión.

-Nunca lo haría, te quiero a mi lado siempre. Pero ve a bañarte, hay covid y quien sabe si te contagiaste hoy en tu primer dia.

El echa una risa que de seguro se escucho hasta la otra cuadra, llevo una mano a su boca para evitar que se escuche lejos.

-Mi amor, el covid ya tiene cura y nosotros nos pusimos la vacuna, tranquilizate.- dijo para volver a reír.

-Marco uno nunca sabe..... ve a bañarte y luego bajas a cenar , estaré aquí esperándote.

-Esta bien vuelvo en 20min, y esta noche sera grandiosa ya verás- expreso para guiñarme un ojo y subir las escaleras.

Me apresure a ir a la cocina y empecé a servir todo en los respectivos platos para dejarlos en la mesa, luego puse los vasos con refrescos, fui apagar las luces y encendí las velas que había en la mesa.

Todo quedó en silencio, hasta que fue interrumpido por el sonido de la puerta al abrirse. Camine hacia las escaleras y Marco estaba bajandolas, al estar frente a mi me da un beso en la coronilla, sujete su mano y lo lleve hacia el comedor, al ver todo se quedo paralizado y su boca se abrió en forma de O.

-¿Tu hiciste todo esto Grace?-

-Si

-Esto esta...... Dios no se que decir.

-Sabia que vendrías cansado como para salir a cenar conmigo, así que puse en práctica lo que aprendí en mi curso de cocina de hace 6 meses y hice tu comida favorita- me encogi de hombros mirándolo a los ojos.

-Ay muñeca, hubiera salido contigo a cualquier lugar solo por verte sonreír. Pero esto es grandioso, gracias. Luego te compensare, lo prometo- murmuró sujetando la cintura.

-No debes compensarme nada, con tal siempre estes aquí conmigo amándote todo estará bien.

-No me iré. Te lo prometí cuando te pedí que fueras mi novia y te di este anillo - apuntó a mi dedo- Vamos a comer, tengo mucha hambre - dicho eso, me jalo hacia la mesa y nos sentamos a degustar la comida.

Terminamos y luego de muchos halagos de su parte y de hacerme sentir muy importante, beso una de mis manos y dio la vuelta a la mesa para dejarme un largo beso en los labios. Sabia a que me llevaría eso, sujeto mi cintura y me cargó mientras caminaba hacia el cuarto.

Protégeme Mt #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora