Decisión del Corazón 1/2

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Normalmente me presentaria, pero es obvio que ya me conocen, lo importante es lo que me acaba de pasar, aquello me dejó totalmente frustrado, no, no es una deuda de la diosa inútil, aunque si lo fuera no habría problema, pues ahora que derrotamos al Rey Demonio somos millonarios, en fin, un día que pensé iba a ser tranquilo y simple, sin nada nuevo termino siendo una pesadilla por así decirlo.

Verán todo empezó en la mañana, Megumin y Lalatina fueron a hacer juntas una misión, pues yo estaba sin ganas de hacer una, solo quería relajarme en el sofá todo el día, pero resulta que Aqua también quería flojear, así que se quedó conmigo en la mansión, si no me molestaba yo tampoco la molestaria, pero por alguna extraña razón empezó a decirme que quería hacer una misión ¡¿Por qué demonios no fuiste con las chicas?! le dije enojado, aunque ella simplemente dijo que en ese momento no tenía ganas, se notaba un poco nerviosa pero decidí ignorarlo, acepte después de que me estuvo insistiendo mucho tiempo, quería que se callara y me dejara en paz, pero por una razón que ya conocía estaba siendo más tolerante y amable con Aqua, la razón era pues... desde ese día que me agradeció cuando la dejé venir a la tierra como mi deseo por derrotar al Rey Demonio, desde ese día todas las noches me pongo a pensar en ese momento, simplemente no podía creer que por un momento, mi corazón latió por ella, por esa Diosa Loca, bueno era de esperarse de un virgen como yo, si aún soy virgen, ¡Pues Megumin no cumplió su promesa! ¡Solo me dijo que no estaba lista y todas esa cursilerias! uff, bien donde estaba, oh ya recuerdo, ¡Maldita Diosa de pacotilla! ¡Por tu culpa mi corazón está indeciso!, cuando salimos de la mansión segui notando a Aqua nerviosa, así que decidí hablar con ella, ojalá no hubiera tomado esa decisión...

Kazuma: Oye Aqua, ¿Qué te sucede?, pensé que querías hacer una misión, ¡No me digas que se te fueron las ganas, o te quitare todas tus botellas de alcohol! Hablo enojado Kazuma a una Aqua que se notaba notablemente nerviosa.

Aqua: ¡¿Qué?! No...no...no... es eso Kazuma, solo... quiero hacer un... cambió de planes... Respondió Aqua sonrojada mirando hacia otro lado.

Kazuma: ¿Uh? ¿Cambió de planes? ¿De qué estas hablando? Dijo Kazuma confundido.

Aqua: Pues... quisiera... este... salir contigo, los dos, solos... como hacíamos antes... Dijo nostálgica.

Kazuma: ¡Me lo hubieras dicho Diosa Tonta! No tengo problema en salir a divertirnos, ¿Por qué estabas nerviosa en decirme solo eso?

Aqua: Pues... quiero que esta salida sea más... especial...

Kazuma: ¿Qué? ¿A qué te refieres con "Más especial"? Dijo haciendo énfasis en Más especial.

Aqua: Pues, algo así como, una cita... Dijo más sonrojada que antes.

Kazuma: ¡Que mierda! ¡Que le han hecho a mi Diosa inútil! ¿Ci...Cita? Maldición ¿Por qué estoy nervioso?

Aqua: ¡No te hagas falsas ilusiones! Solo... quisiera que vayas con un traje más formal, y ser más "elegantes", además ya se que eres un pedonini Esto último lo dijo susurrando para que Kazuma no escuche.

Kazuma: ¿Que dijiste al final? Dijo mirando a Aqua de manera sospechosa.

Aqua: ¡Nada, nada, no dije nada! y dime... ¿aceptas?

Kazuma: ¿Que debería hacer ahora? creo que debería aceptar para descubrir de una vez por todas estos sentimientos nuevos que tengo por esta... Diosa, ¡Si esto llega a ser una broma juro que no le comprare alcohol jamás! Vale, vale, acepto, ¡Pero si llega a ser una especie de bro... Fue interrumpido por un repentino abrazo de Aqua.

Aqua: ¡Gracias, Gracias Kazuma! Se le notaba realmente feliz ¡Volvamos a la mansión para preparar todo! Dijo para que por impulso, depositar un pequeño beso en la mejilla del pelicastaño de ojos verdes, que lo dejaría aturdido mentalmente ¡Te espero allá! Se sonrojo mucho al darse cuenta de lo que hizo y solo se fue corriendo de regreso a la mansión.

Mientras que Kazuma solo se quedaría en la misma posición en donde estaba, con su corazón latiendo rápidamente, su respiración agitada, con sus mejillas muy sonrojadas y sin poder articular palabra alguna, solo podía pensar que era un tonto al haberse enamorado de la diosa inútil.

𝐄𝐬𝐞 𝐛𝐞𝐬𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora