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Harry volvió corriendo a casa con los puños apretados y ganas de gritar.

Tampoco sabía si Louis había hecho algo con aquella chica, pero aunque lo hubiera hecho, el no podría reclamar nada. No eran pareja. De todas formas se sentía engañado.

Al llegar llamo al timbre y Gemma le abrió enseguida.

-¿Acabasteis de entrenar?

-Que va, seguimos allí. Solo soy una ilusión optica.-- contestó Harry con un humor cortante, cerrando la puerta fuertemente a sus espaldas.

-¿Pasó algo? -- Preguntó Gemma.

-¿Desde cuando te importa mi vida? Anda, vete por ahí.

Gemma lo agarró del brazo antes de que pudiera subir las escaleras.

-Desde siempre. Sientate.- Lo llevó a la fuerza hasta el sillón.

Harry se resistió por unos segundos. Pero se dejó vencer, sentandose en una esquina del sillón con la cara de un niño pequeño al que no de dejan ir al parque.

-¿Pasó algo?

El rizado se quedó callado.

-Eso significa que sí.

-Gemma...-preguntó Harry- Crees que... ¿Que alguien se puede enamorar en una sola semana?

Su hermana se lo pensó.

-Pues puede ser, supongo. No es muy común. El sentimiento "enamorarse" es un término muy fuerte, y enamorarse en una semana es... talvéz demasiado rápido.--Explicó Gemma.-- De todas formas. ¿Qué tiene que ver eso con tu humor?

En ese exacto momento Louis entró a la casa.

-Pues pregúntale a ese.- dijo Harry al verle, levantandose del sofá y dirigiendose a las escaleras.

Louis se quedó en silencio viendo como subía cada escalón. Miró a Gemma con el mismo silencio de antes y levanto las cejas en gesto de pregunta.

Gemma le respondió levantando los hombros, dando a ver que no tenía idea.

El ojiazul decidió subir las escaleras también.

La puerta de su habitación estaba cerrada. Así que golpeó la puerta antes de entrar.

Harry estaba sentado en el escritorio utilizando el móvil.

-¿Que pasó ricitos?- preguntó Lou.

-No pasa nada.- Harry le dió la espalda.

El ojiazul cogió una silla y la acercó hacia Harry. Se sentó.

-¿Te digeron algo esos chicos?  Los de la pista.

-Si, pero eso me la suda. Quién... ¿Quién era esa chica?

Louis rió.

-No me digas que estás así por eso.

Harry lo miró con desprecio.

-Te lo tomas todo a risa. Y no da risa ¿Vale?

-Y tú te enfadas por todo.-- Lou borró la sonrisa de su cara.

Harry se levantó bruscamente de la silla.

-¿¡OJALÁ PODER CONTROLAR MI IRA VALE!? ¡ODIO ENFADARME POR CUALQUIER MIERDA!-- gritó, con los ojos ya cristalinos.

Lou decidió no decir nada.

-Me pasa desde pequeño. Nadie quería estar conmigo porque sabían que me enfadaría. Por eso me volví tan apegado a ti. ¡NADIE MÁS ME DEJABA ACERCARME!

Louis le dejó unos segundos para relajarse. Se acercó para besarle, pero Harry le colocó la mano en los labios.

Así, con las bocas a pocos centímetros, el rizado negó suavemente con la cabeza el beso. Dejando escapar una de las lágrimas que tenía guardadas.

Louis se separó con la cabeza gacha.

-Te entiendo. Yo también pasé parte de mi infancia totalmente solo. Y por eso empecé a ir a los entrenos con mi padre, pero yo no estaba hecho para correr. Me lo pasaba mejor en la gradas... mírandote.

Harry se sintió raro al ver como esas palabras ya no significaban nada para el. Louis todavía no le había dicho quien era esa chica. Ni porqué le había mentido tán descaradamente pocas horas atrás.

-Pues en esas mismas gradas me mentiste esta tarde.

-¿Qué quieres decir?

-Sabes perfectamente lo que quiero decir. Me dijiste que estabas en la caseta del material. Eres un mentiroso.

Louis lo entendió todo.

-Hazz, te lo prometo. Cuándo llegue el momento lo entenderas todo, pero no puedes estar triste ahora. Queda 1 día para la competición. Mañana es el último día que tenemos, tienes que entenderme. A mi y a tu familia.

Harry recordó de improviso toda la presión que tenía encima con esa competición.

-Tenlo por claro, si no me dices donde estabas en ese momento, no te pienso hablar.

-Ricitos, no somos pareja, tienes que recordarlo.

-Es como si lo fuéramos. Y lo sabes perfectamente.

Louis lo miró, aguantandose las ganas de pedirselo oficialmente.

-No es así. Harry las parejas no se hacen en una semana, ni siquiera nos hemos dicho un "te quiero".--explicó Lou.

-Te quiero.

-Creeme, lo tengo todo preparado.

-Dímelo de vuelta.

-Te quiero universos Harry Edward Styles. Y cuando estemos listos te lo diré billones de veces cada día. No te preocupes por ello.




Atleta - L&HDonde viven las historias. Descúbrelo ahora