Disclaimer: Dragon Ball Z no me pertenece. Este fanfiction es sin fines de lucro y exclusivamente para la diversión de la autor y posibles lectores
Capitulo 10: Sin máscaras
No tenía otra alternativa que decir la verdad, aunque eso significaría perderla, pero ya no podía con aquel peso en su conciencia y si quería seguir con su matrimonio debía dejar de tener secretos, tomo aire mientras observaba a su esposa, quién lo miraba con ojos desafiantes, parecía que estaba mejor de lo que se encontraba, sabía que estaba mal su ki también indicaba aquello, pero su voluntad y temperamento la mantenían en pie de guerra, admiraba la forma que lo hacía aunque su vida se fuera apagando.
- ¿Gohan que es lo que estás diciendo? - pregunta nuevamente Videl esperando que no fuera lo que ella creía.
- Te digo la verdad, sé que debi hacerlo antes pero no era sencillo - responde el pelinegro bajando la mirada mientras se hacía un nudo en su garganta.
- Que no era sencillo, solo tenías que contarme - replica exaltada la ojiazul molesta y dolida por no tener la suficiente confianza - ser sincero, no me gusta que me engañen -
- Iresa solo quiere verte sufrir o al menos eso me a parecido que quiere - manifiesta Gohan como una forma de defenderse de lo que no había hecho.
- Si eso piensas voy a ir hablar con ella personalmente - añade Videl dándose vuelta para cambiarse de ropa para salir.
- No puedes ir a confrontarla en ese estado, tu embarazo - menciona su esposo tratando de evitar que se agitara más de lo que ya estaba - tú enfermedad aún no te lo permiten -
- No soy tan débil como imaginas - asegura la hija de Mr Satán antes de cerrar la puerta para cambiarse mejor su atuendo.
- No creo que seas débil pero ni siquiera mi padre es capaz de vencer alguna enfermedad - comenta Gohan molesto golpeando con su puño la puerta usando la menor cantidad de fuerza.
La ojiazul estaba molesta su esposo sabía que no le gustaba las mentiras y que le ocultaran cosas, pero aquello era demasiado, necesitaba escuchar de la boca de Iresa todo lo que dijo Gohan, saber el porqué si era cierto estaba haciendo todo eso, tomo sus cosas y dejó de escuhar a su marido, quien aún intentaba explicar lo sucedido.
Y emprendió vuelo en su aeronave personal rumbo a la casa de su amiga, no entendía porque estaba pasando todo eso creía que tenía una vida normal con un matrimonio común, pero todo se estaba derrumbando como un castillo de naipes. Bajo de su aeronave a unas cuadras de distancia necesitaba tomar aire al igual que valor, tan concentrada en aquello estaba que no guardo su vehículo en una cápsula.
- ¿Videl que haces aquí? - cuestiona Iresa una vez que abrió la puerta y se dio cuenta que era su amiga - espero no haber olvidado alguna reunión -
- No - responde con seriedad pasando dentro de la casa sin haberlo pedido antes - solo vine a verte y despejar una duda que tengo contigo
- ¿Conmigo? ¿Porque no simplemente llamaste por teléfono? - pregunta la rubia sin entender el tono misterioso que estaba teniendo Videl con ella - en el estado en el que estás no deberías salir tan a menudo -
- Gohan me contó todo y quiero que me confirmes si lo que dijo mi esposo es verdad - dice la ojiazul con una mirada desafiante queriendo escuchar de sus propios labios
- No entiendo que verdad hablas - asegura Iresa de forma calmada fingiendo no entender lo que se le estaba acusando - porque no eres más clara -
- No tengo que ser clara, solo dime si es verdad o no y luego me iré - vocifera la hija de Mr Satán esperando una respuesta directa de una vez por todas - quiero que me digas la verdad -
- Si, es verdad - responde la rubia sentándose en un sofá del comedor dando un suspiro de resignación.
- ¿Porque? - cuestiona Videl intentando entender el porqué de todo lo que había hecho durante años que ella creyó era su confidente.
- Porque, porque lo has tenido todo siempre lo has tenido todo sin merecerlo - contesta Iresa teniendo una mezcla de sentimientos entre la ira y la tristeza mientras sigue explicando - porque debes tenerlo todo -
- ¿Solo por envidia?, ¿Porque no te alejaste de mí? - pregunta nuevamente la madre de Pan dando una cachetada a la que fue su amiga - envés de ser una víbora -
- No podía cuando una vez que entendí todo eso ya era muy tarde - añade la rubia tocando su mejilla la que estaba muy roja por el golpe - Yo fui quién vio primero a Gohan -
La pelinegra salió de la casa más por falta de aire que por molestia, ya que estaba dispuesta a seguir con aquella confrontación, pero por su enfermedad y su embarazo le estaban pasando la cuenta, intento seguir caminando pero todo le comenzó a dar vueltas y su visión se comenzó a nublar perdiendo comenzando a perder su conocimiento sin que pudiera hacer algo.
Gohan volaba junto a su esposa en sus brazos, para su fortuna la había seguido para evitar que algo le pasará y la había encontrado en el suelo a unas cuadras de la casa de Iresa, su ki había descendido dramáticamente, estaba preocupado no solo por la salud de su esposa sino por su relación amorosa, debía hacer algo para evitar perder ambas, decidió dejar con su padre a su pequeña hija mientras se le ocurría algún plan.
- Hola hijo ¿Que ocurre no deberías estar trabajando? - cuestiona Goku la presencia de hijo dejando las labores del campo un momento.
- Papá necesito que Pan se quede con ustedes un par de días - solicita Gohan apenado de tener que involucrar a su padre por sus problemas.
- Claro me servirá para entrenar junto con Uub - dice Goku emocionado por tener a su pequeña nieta con el -¿Pero porque?, seguramente tú madre preguntara -
- Videl no está bien de salud - responde el su hijo aunque era mejor que supiera toda la verdad -además no estamos muy bien -
- Oh lo entiendo - exclama el guerrero Saiyajin entendiendo finalmente cual era el predicamento de su hijo - mantendremos ocupada a Pan entonces hasta que se recupere -
- Gracias hablaré con el señor Picolo para que los ayude - manifiesta el Semisaiyajin pensando en su maestro para que no fuera una gran carga.
- Descuida Gohan lo eh escuchado todo además se lo que pasó - afirma el Namek que se encontraba flotando con los brazos cruzados sorprendiendo ambos guerreros.
- ¿Me a estado siguiendo, señor Picolo? - pregunta sorprendido Gohan notando que su maestro supiera todo lo que estaba pasando con su matrimonio.
- Lo siento es mi naturaleza escuhar las cosas cuando estoy con Pan - se disculpa Picolo por haber escuchado más de lo que debía de parte de su discípulo.
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Cuando el amor no es suficiente
RomansaEl paso de los años va desgastando el matrimonio de Gohan y Videl, el tiempo no pasa en vano , distanciando los poco a poco , ahora ambos deberán enfrentar algo mas complicado que solo un enemigo que intenta destruir el mundo , sino que a sus propia...