Louis el prototipo que todos halagan y admiran, el mismo que se siente solo y vacío, se ha vuelto frío e indiferente ante la negación de amor.
Nolan quién en su inocencia lo ve, quiere ayudarle a abrirse y mostrarle que hay más tipos de amor.
✨Ide...
¿Cómo es qué lo prefiere a él?, no lo conoce más de unos meses si no es que días, yo lo conozco desde que fue creado, ¡yo estuve en su individualización!. Ese maldito pecoso horrible se siente muy afortunado cuando ni siquiera sabe todo lo que Louis y yo vivimos...no todo.
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N. Yo
La fábrica recién había abierto no teniendo más que un prototipo y 10 muñecos por salir a la venta, el prototipo salió de su capsula abrió sus ojos esmeralda admirando la belleza y limpieza del lugar donde habitacria por el resto de su vida, robots a su lado dándole la bienvenida junto a una pequeña nota de su creadora.
Bienvenido al instituto de la perfección MP-00, mejor conocido como Alan. En este lugar emprenderás una importante tarea a realizar la cual consiste en perfeccionar a los muñecos que irán llegando hasta ti.
Serás su molde, su guía, su inspiración y admiración para mejorar y ser tan perfectos como tu, suerte.
Att: Linny
El peli morado miró la nota emocionado pues estaba a punto de ser algo como una deidad, del otro extremo escuchó un sonido de escaneo por lo que corrió a paso veloz ignorando sus zapatitos no estaban para correr. Llegó frente a un muñeco azul grisáceo que estaba siendo escaneado, se cerraron puertas y al abrir salieron brillitos suaves con humo blanco fresco.
Parado en esa plataforma estaba un rubio de ojos cianitas, cabellos dorados y fleco muy bien hecho, su ropa era elegante y como la de un estudiante, el prototipo morado quedó sumamente maravillado con aquel rubio acercándose así con una dulce sonrisa.
El muñeco dió unos pasos hacia el frente y observó todo a detalle con interes y suma curiosidad, Alan quedando a dos metros de él sonrió y empezó a hablar.
-¡Bienvenido!, mi nombre es Alan Jhonkyponky y soy el líder de este lugar.-Habló animado.- ¿Cuál es tu nombre?.
-No lo sé, la máquina se averió a medio nombre, algo con "L".-Respondió seco pero cordial.
-Oh que desafortunado, ven conmigo en lo que reparan esa cosa.-Alan sonrió señalando el interior del instituto.
El misterioso rubio alzó los hombros desinteresado y avanzó junto al oji verde mirando las pocas casas que estaban ahí y las miles por construir, sus ojos cianita se centraron en el portal cerrado encima de un especie de altar, sin hacer mucho caso a Alan se acercó y un robot fue rápidamente hacia él.
