Las sombras del pueblo

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Narra Trevor

Nos quedamos unos segundos intentando razonar lo que acababa de suceder. Mientras que Cloe se desangraba en medio de la sala.

-¿Alguno vio las sombras? ¿O las manos? -Preguntó Astrid atemorizada. 

No dijimos nada, ninguno entendió a qué se refería con eso, entonces siguió.

-Cuando Cloe hizo lo que hizo, se veían unas sombras de personas en la pared que parecían obligarla a hacer lo que estaba haciendo.

-Astrid… -Comenzó Nerea.

-¿Qué? -Contestó un poco irritada.

-Nadie vió sombras… -Terminó Trevor.

-No no, yo sí las vi. Puede sonar raro pero yo escuché una historia con algo parecido. -Dijo Jonatán.

-Jonatán, no es momento para tus historias de terror. 

-No Trevor, tal vez nos puede servir. ¿Qué decían de las sombras, Jonatán? -Preguntó Astrid con desesperación.

-Eran… Almas, podían controlar a las personas, tenían el poder de hacer cualquier cosa con ellas. Tiene sentido, tal vez, obligaron a Cloe a que se suicide. Y lo mismo con Jaeden.

-Si si, Cloe no tenía cara de querer hacerlo. 

No podía creer lo que estábamos empezando a pensar, ya nos estábamos volviendo locos. Tomé la escopeta y salí en dirección a donde había quedado el auto de Astrid.