LA EMPERATRIZ DIVORCIADA - UNA NUEVA HISTORIA

PERDONAME

Habían pasado unos minutos desde que Rashta fuera llevada a su habitación, las damas de la emperatriz decidieron retirar dejando solos a los emperadores.

S: Navier, te sucede algo - dijo mientras la veía dando un sorbo de a su te -

Navier escucho la voz de sovieshu como un pequeño susurro, el corazón le comenzó a latir rápido, quería saber, que le había ocurrido, por qué había cambiado de la noche a la mañana.

N: Puedo preguntar, porque no harás a rashta tu amante ? - dijo con una mirada de sorpresa -

S: Mi querida Navi, que te parece si pasamos los siguientes minutos hablándonos no como emperadores, sino como iguales, como antes cuando éramos amigos, lo recuerdas - dijo suavemente, mientras se sentaba en la cama -

Navier se sorprendió al escuchar las palabras de sovieshu, en ese instante la calidez se hizo presente por unos instantes en el lugar, Navier atesoraba con mucho cariño esos días, sin darse cuenta sus ojos empezaron a soltar unas pequeñas lágrimas.

S: debes pensar que me volví loco - dijo suspirando -

N: no, te equivocas, es solo que tú comportamiento no es el mismo de ayer - dijo un poco preocupada -

S: lose, tranquila - dijo con una sonrisa -

Navier miro a sovieshu con curiosidad, si bien no sabía lo que le sucedía, no le importaba mucho.

S: Navier - llamo sovieshu -

Navier salio de sus pensamientos, al oír la voz de su esposo.

N: discúlpame, que me decías - dijo mirándolo a los ojos -

S: eres linda cuando estás distraída - dijo dando un pequeño toque con su dedo en la nariz de su amada -

Un pequeño sonrojo apareció en la cara de navier, quien hizo un puchero como de niña pequeña.

S: lo siento, no quería que te incomodaras - dijo con preocupación estilo anime -

N: idiota - dijo aún con el puchero en su cara -

S: puedes decirlo de nuevo, por favor - dijo con tristeza -

N: porque, me pides eso - dijo confundida -

S: porque es la verdad, y duele menos cuando viene de alguien a quien se ama con el corazón - dijo con tono de melancolía -

Navier al oír esto siento tristeza en cada una de esas palabras.

S: Navier, perdóname - dijo al borde del llanto -

N: porque me pides perdón - dijo - será por traer a Rashta - pensó -

S: por todo, por actuar como un idiota en estos últimos años, por haber sido mal esposo, por haber traído a otra mujer al palacio y prometerle ser mi amante, y por todo lo que haya hecho o haré en el futuro - dijo con lágrimas en los ojos -

Las lágrimas del emperador no pasaron desapercibidas delante de la emperatriz,
quien al darse cuenta, también soltó algunas lágrimas, e inconscientemente abrazo a su marido, quien la sujeto de la cintura.

N: tranquilo, yo te perdono - susurro - y también perdóname tu a mi - dijo -

S: porque me pides perdón, aquí el único culpable soy yo, no tu - dijo limpiando las lágrimas de su esposa -