Cuentos y Relatos Variados

5 metros más

Hace unos meses recuerdo haberle preguntado a Javi, mi mejor amigo, cuál era su siguiente objetivo. En ese instante me miró, como si se tratara de algo sumamente importante, y me respondió, con un tono orgulloso típico de él, que iba a escalar la montaña más grande del pueblo e iba a superar el récord de su abuelo. Por supuesto, en ese momento, me preocupé y le reclamé que era una completa locura, ya que su abuelo, "El domador de las alturas"; creo que lo más resaltante de aquel hombre era su manera tan peculiar de escalar, había muerto intentando subir aquella cumbre helada. Javier, como de costumbre, me ignoro.

Tiempo después, me encontraba junto a él al lado de lo que sería el inicio de su arduo objetivo. Al igual que al principio, me sentí inquieto. Creo que él se dio cuenta, se acercó a mí, dejo de lado su piolet y me dijo, con un tono un poco molesto, que dejara de lado mi preocupación y que mejor empezara a animarlo. Recuerdo muy bien sus palabras, me dijo, antes de empezar, "Mi objetivo solo es superar, por poco, el récord de mi abuelo. Solo quiero conquistar cinco metros más que él". Aún recuerdo la imagen de él, junto a su gran mochila, empezando a subir el montículo helado.

Pasaron cinco días, mi preocupación empezó a convertirse en miedo, pero, de alguna forma, llegó a mis oídos la noticia de Javi. Rápidamente llamé a su hermano y él, sin dudarlo, me lo confirmo. Del asombro deje caer mi celular, me acerqué a la ventana al lado de la chimenea y me quede viendo la montaña.

Ahora, en este día soleado, donde se escucha el sonido de la melancolía y de alguno que otros pajarillos. Te pregunto, ahora que estas al lado de tu abuelo, si tu nueva meta es estar cinco metros bajo tierra.