Capítulo 52: Extra 1

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Después de que Fan Yin se fuera, Su Yun se volvió loco al ver su propio ser desfigurado en el espejo. Ordenó a su gente que trajera toda el "Agua Sagrada" de la sala de Medicina.

Toda la cara de Su Yun estaba ensangrentada y parecía un loco mientras se lavaba las heridas, vertiendo botella tras botella de agua en su boca.

El aroma del agua espacial atrajo a los subordinados de Su Yun. Se arrodillaron en la puerta y babeaban de deseo mientras miraban la botella de medicina en la mano de Su Yun. "Señor Su, dé también un poco de 'Agua Sagrada' a sus subordinados, por favor."

Su Yun tenía originalmente el espacio en sus manos, así que naturalmente no sería tacaño en darles un poco. Además, lo que se les había dado era toda el agua espacial concentrada. Pero este día era diferente al pasado, no sabía si estas botellas restantes de agua espacial eran suficientes para que las heridas de su propio cuerpo se recuperaran. ¿Cómo podría Su Yun dárselas de nuevo?

Por lo tanto, Su Yun les dio una patada despiadada y protegió esas botellas de agua espacial con una cara siniestra: "¡Largo! ¡Todos ustedes váyanse de aquí! Estas son mías, todas son mías, ¡no se les ocurra robármelas!"

Al ver la actitud de Su Yun, estas personas se miraron con consternación e inmediatamente se dieron cuenta de que Su Yun debía de haberse quedado sin 'Agua Sagrada' a su disposición. Además, si todavía la tenía en sus manos, ¿cómo podría preocuparse por la tienda de medicinas que antes no le importaba?

Como Su Yun ya no tenía el 'Agua Sagrada' en sus manos, entonces esta gente naturalmente dejaría de temerle.

Un hombre robusto, que normalmente era el más favorecido por Su Yun, se precipitó hacia adelante y estaba a punto de agarrar el frasco de medicina en la mano de Su Yun. Su Yun todavía se negaba a soltarlo, así que ese hombre robusto golpeó despiadadamente a Su Yun dos veces en rápida sucesión. Las mejillas de Su Yun se hincharon inmediatamente y la herida que acababa de curar con gran dificultad, una vez más, rezumó sangre.

Su Yun les miró inquebrantablemente con los ojos rojos e inyectados en sangre. Tanto sus mejillas como su cuerpo estaban manchados de sangre, igual que un demonio salido del infierno.

Aquellas personas que vieron a Su Yun con ese aspecto, no tuvieron el más mínimo miedo. La única cosa en sus ojos, era la botella de medicina en las manos de Su Yun. Todos y cada uno de ellos estaban desgarrando, mordiendo y luchando entre sí para apoderarse de él sin ninguna consideración por sus vidas, como un grupo de perros salvajes locos.

La gente en un estado de hambre extrema, si de repente probara algo delicioso, recordaría instintivamente su sabor. A partir de entonces, sus mentes seguirán recordando ese sabor. Cuanto más lo recordaran, más profundo quedaría en su memoria. Hasta que, finalmente, ya no podían separarse de ese sabor.

Para este grupo de personas, el agua espacial era ese tipo de existencia.

A excepción del agua espacial, independientemente de lo que comieran, sólo se volverían más 'hambrientos' a medida que comieran. Cuantas más cosas se metían en el estómago, más insatisfechos se sentían, hasta que simplemente llegaban al punto de reventar.

Estos días, aparte del agua espacial de Su Yun, no podían tocar nada más. Tocar otras cosas sólo les haría sentir náuseas.

Su Yun también se abalanzó sobre ellos para luchar por ello. Mordió a todos los que atrapó: "¡Mío! Estas son mías------ ¡Nadie puede quitarme mis cosas!" Todavía tenía que confiar en el agua espacial restante para restaurar su apariencia. Como puede ser fácilmente arrebatado por este grupo de personas.

Inesperadamente, fue un desconocido quien probó la sangre en la cara de Su Yun y de repente gritó alarmado: "¡Su sangre, su sangre y el sabor de esta 'Agua Sagrada' saben igual!"

Al escuchar lo que se dijo, todos detuvieron sus acciones y unánimemente fijaron su mirada en Su Yun.

Un sentimiento muy malo surgió de repente en el corazón de Su Yun. Retrocedió y se hizo el fuerte: "Soy el hijo del Primer Ministro Su, ¿cómo te atreves a hacerme algo?"

Estas palabras pronunciadas eran en realidad para advertir a esta gente. Se miraron entre ellos y se burlaron.

Después, se rumoreó que la presencia de Su Yun desapareció en esta Ciudad Mo. El Primer Ministro Su envió grupos de personas a buscarlo varias veces, pero todos sus rastros habían desaparecido. Más tarde, este asunto se zanjó en silencio sin llegar a una conclusión.

Sin embargo, en una zona desolada de las afueras de la ciudad, se extendió el rumor de que una casa de patio abandonada estaba embrujada.

Algunas personas decían que habían visto a una persona con una apariencia aterradora. Su rostro estaba plagado de cicatrices oscuras y parecía un ciempiés. Estaba arrugado de pies a cabeza. Decía a las personas que veía que lo salvaran.

Por ello, nadie se atrevía a pasar por esta casa del patio. De vez en cuando, salía de esta casa un sonido de llanto. Era extremadamente doloroso.

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