cap12: Un nuevo comienzo

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Tras habernos despedido de sus padres, unas que otras lagrimas por parte de ella y su madre y otras miradas furiosas y resignadas por parte de su padre, emprendimos el viaje de regreso al auto, Max de inmediato tomo sus maletas y ahora nos encontrábamos regresando a casa; Apropósito si se preguntan como los viejos no se enteraron de nada, hablo de su secuestro y todo lo relacionado con el, pasa que; los muchachos son profesionales en su trabajo, y utilizaron una droga bastante fuerte, que los hizo perder la noción del tiempo y espacio; es tan fuerte que los hace dormir por días.

_Estas bien?_ indague mirando a mi mujer, ella me miro por unos segundos para luego apartar la mirada, su semblante estaba triste.

_No lose!_ suspiro _Solo que me pone un poco triste, no vivir con mis padres, siempre estuve con ellos, siento nostalgia al dejarlos _culmino, suspire y me acerque hacia ella, para abrazarla, su rostro enseguida se mostró incomodo por lo que solo tome su mano y la acaricie suavemente.

_No te preocupes ni te pongas tristes preciosa, prometo que siempre estaré contigo, cuidare de ti y tendrás una mejor vida, y en cuanto a tus padres, puedes venir a visitarlos cuando quieras.

_Gracias! _ sonrió

_Por nada mi vida_  me senté derecho y me acomode _ Anicha mi amor debo ir a trabajar, nos vamos a ver en la noche si! _sus ojos buscaron los míos y me miro sorprendida.

_Vas a irte!_ Cuestiono

_Así es, debo ir a la empresa

_Que pasara conmigo?_ susurro bajito pero estaba lo suficientemente cerca como para poder escucharlo, sonreí por su ternura.

_Quieres que me quede hoy contigo?_ sus mejillas se tiñeron de rojo y escondió su rostro de mi, me acerque yl lo tome con mis manos _Dime preciosa, quieres que me quede, o prefieres que me vaya a trabajar. 

Ella estaba confundida y por su rostro, tenia sentimientos  encontrados, así que la presione un poco  _No te voy a obligar sino quieres, lo que puedo hacer es irme a trabajar y preciosa_ mire mi reloj y fingí preocupación _Esta muy tarde!!

_Si quiero que te quedes _exclamo y sonreí con picardia

_Era tan difícil decirlo...

Llegamos a casa minutos mas tarde y bajamos sus cosas, los empelados de inmediato se pusieron a trabajar y cuando vi Anicha con intenciones de ayudar, la tome del brazo y la hice caminar fuera de la casa, ella protesto pero le dije que para eso les pagaba.

_A mi restaurante favorito_ indico a Max una vez que estamos en el auto.

Llegamos al restaurante y entramos, agarre la mano de mi mujer, cuando vi como la recepcionista me sonreía que al ver nuestras manos unidas, dejo de sonreír.

_Buenas tardes señor y Anicha que haces con el......

_Te recomiendo que te acostumbres a verla, porque es mi mujer y mi futura esposa..._dije y comencé a caminar hacia mi mesa habitual.

_No debiste hacer eso!

_Oh vamos, cariño no hay que ocultar, es hora de que todos se enteren que eres mía, y siempre lo seras_ tome su mano  y deje un beso en ella, espere algún rechazo pero solo logre entrever una pequeña sonrisa que alegro mi día por completo.

Luego de eso, el mesero llego y tomo nuestra orden, Anicha se sintió extraña y lo pude notar por la incomodidad en su rostro.

_Y ahora que sucede?

_Es que me parece extraño estar sentada en esta mesa y que me atiendan cuando hace unos días, yo era la que hacia todo eso.

_Bueno preciosa desde ahora y para siempre tu vida sera diferente, y me voy asegurar de eso_ ella asintió, y nuestra comida llego luego nos dispusimos a comer y el silencio incomodo desapareció.

Una vez que terminamos de almorzar, salimos de la mano hacia el auto, y la lleve a conocer lo hermosa que es la ciudad de Miami, ella sonreía y parecía disfrutar de todo eso.

Cuando el sol cayo y cedió el lugar a la luna, la lleve a una feria y allí nos montamos en  muchísimos juegos y gane un pingüino de peluche gigante en tiro al blanco para ella, comimos perros calientes y dimos varias vueltas en la montaña rusa. 

Horas despumes salimos de allí, y la lleve a un mirador a observar la ciudad, me coloque detrás de ella, esperando su rechazo mas nunca llego, pase mis manos por su pequeña cintura y la deje descansar allí, los minutos fueron pasando y ella tiro la cabeza hacia atrás y se afirmo hacia mi, y yo solo pensaba en lo afortunado que era al tenerla conmigo y pasar estos momentos así con ella.

Es ella, el amor de mi vida, y estoy dispuesta a todo por hacerla feliz......

SacrificadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora