Sacrificada

Capitulo 15:La casa nueva

Estaba enojado... En realidad no, mi estado superaba a lo colérico, ese hijo de la re-mil putas , se atrevió a atacarme en mi propia casa y con mi mujer en ella, estaba tan distraído en mis pensamientos que no había notado que Anicha estaba llorando.

Respire profundo y me calme, debía hacerlo porque Anicha estaba a mi lado

Acaricie su rostro y atraje su cuerpo hacia mis brazos --Estoy bien, vida mía, no tienes de que preocuparte, estaré bien mi reina

--Estas perdiendo mucha sangre, debemos ir a un hospital!!-- Exclamo

--Sebastián los autos están listos, debemos salir de aquí --Dijo Taylor, asentí y con ayuda de sus hombres nos dispusimos a salir de la casa.

Cuando estábamos en el auto, Anicha no soltaba mi mano, se le miraba tan preocupada por mi estado y eso a pesar de toda esta tragedia, me alivio un poco, me hace pensar que en realidad ella está empezando a quererme, y quizás con el tiempo hasta llegue a amarme.

Llegamos a la casa de Taylor 20 minutos después, esta se encontraba fuera de la ciudad, en lo alto de una colina, rodeada de un centenar de hombres armados, miren a este, es tan paranoico

Alce una ceja y lo mire, estaba a mi izquierda --Es necesario tanta seguridad.

--Ya sabes como es este negocio, no sabes cuando y en qué momento pueden atacarte, es mejor prevenir que lamentar --se encogió de hombres y el auto se detuvo.

Una vez más requerí ayuda para salir al auto y entrar a la casa, me sentía como un puto inútil, me gusta hacer todo por mi cuenta y sucede esto.

Entramos a la sala de la mansión y de inmediato fueron en busca del doctor, esta porquería de herida, dolía en demasía.

--Estas bien cariño? --Indague a mi mujer, ya que se había quedado muy callada de repente, tome su rostro y deje un beso en sus labios, ella cerro los ojos y esto volvieron a llenarse de lágrimas --mi cielo!!

--Estoy preocupada por ti, debimos ir a un hospital

Cuando estaba a punto de responderle el doctor entro a la habitación, ambos exhalamos de alivio

--Buenas tardes; sería de gran ayuda para el paciente que sea trasladado a la habitación, así  cuando haya terminado de extraer la bala y suturar la herida, esta no se lastime por el mínimo movimiento.

Taylor hizo una seña y sus hombres se acercaron, y me subieron escaleras arriba a una de las habitaciones, me acomodaron en le cama y el doctor corto por completo mi pantalón.

--Desea quedarse señorita -- Ambos miramos a mi mujer la cual estaba muy pensativa y distraída luego de unos minutos asintió y el doctor comenzó a hacer su trabajo.

No aparte la vista de mi Anicha en ningún momento, a pesar de todo el dolor que estaba sintiendo su estado de inquietud me preocupaba, conocía cada parte de su cuerpo y cuando estaba concentrada o pensativa movía la nariz y torcía la comisura de sus labios un poquito, al igual que, apartaba cada segundo el pelo de su frente a pesar de tener una coleta que le quedaba hermosa y que dejaba escapar algunos mechones de su oscura melena azabache, es una Diosa en todo el sentido de la palabra, pero su estado era lo que mayormente llamaba mi atención.

Deje escapar un quejido de dolor para llamar su atención y funciono, pues de inmediato levanto la vista de la ventana para mirarme y posteriormente acercarse hacia donde me encontraba.

--Estas bien mi amor, te duele mucho..-- se sentó a mi lado y acaricio mi frente, cerré los ojos de placer esto era lo que necesitaba, o más bien a ella era quien necesitaba.

--Ahora sí, estoy bien, tú eres todo lo que necesito

Ella sonrió levemente y beso mi frente.

--Te quiero Sebastián-

Sonreí con felicidad -Lose mi amor, lose

-Termine -- escuchamos decir al doctor y ambos dirigimos la vista hacia él, se levantó y recogió todas sus cosas --La realidad no fue tan profunda y gracias al torniquete que tenías, no perdiste mucha sangre, pero debes cuidarte, no forzar la pierna mucho y evitar que se lastime la herida, les dejare algunas prescripciones para que te los tomes con continuidad durante dos semanas mínimo y bueno te deseo pronta recuperación y cualquier cosa Sebastián me dejas saber

-Muchas gracias doctor así será; al bajar busque a Taylor, él le pagara por sus servicios

-De acuerdo, hasta luego

Silencio... uno de esos en los cuales sabias que vendrían preguntas difíciles y debías responderlas porque sino, sería mucho peor el resultado.

--Tenemos que hablar --susurro Anicha mientras me dedicaba una extraña mirada.

Deje un beso en su cuello y pensé, estoy en graves problemas..... joder+