"Insomnio"
Me pase los días conversando con ella, por un lado saori disfrutaba compartir el tiempo conmigo y por otro lado era bastante insoportable su actitud, no llevaba mucho tiempo en que la conocí pero había cambiado totalmente, había terminado con su chica y en casa sus papás se habían divorciado así que solamente ella vivía con su papá porque su mamá no quería hacerse cargo de ella, no podía soportar ni un día más aquella actitud que tenía, no supe en qué momento me dejé llevar por los los malos tratos, pero realmente me gustaba que Saori me tratara como una basura, en esos momentos había conocido la debilidad de lo que era estar obsesionado con alguien, la seguía a todos lados, la espiaba todos los días, mis heridas eran causadas para ella, Saori podía acabar conmigo o mejor aún, podría lastimar mi asqueroso cuerpo cada que ella quisiera si eso le causaba felicidad.
Hubo una ocasión en que durmió un fin de semana en mi casa, su padre la había echado así que buscó hospedaje en mi hogar, llegó aquel día con un humor que desearía vender a cualquiera para pagarme un jodido psicólogo, alegaba mucho que mi aspecto se veía tan jodido y que realmente odiaba todo lo que la rodeaba (incluyéndome a mí), a pesar de su actitud del asco me gustaba cocinarle mientras me contaba sus ideas escolares que tenía, prendía un tabaco y ponía música clásica para acompañar el momento mientras veníamos la lluvia caer, después de un rato se volvía a molestar conmigo por cualquier error. En verdad se había convertido en una persona tan desagradable, quería cortarle la garganta para que no me jodiera más, pero por otro lado quería que fuera linda aunque sea por un rato y me pudiera demostrar que realmente era buena, no tenía nada de culpa sobre lo que había pasado con su familia o su novia, pero ella lo había tomado muy personal contra mí odiando mi existencia, no podía hacer nada, mas que encerrarme en el baño a cortar mis muñecas maldiciendome una y otra vez por amarla tanto, después de un rato ella notó lo que hacía pero intentó ignorarme porque creía que estaba lo suficientemente loco para ella, usé unas cuantas vendas para mis manos, salí del baño con muchos nervios al pensar que ella podría iniciar una pelea de nuevo, pero sólo se quedó en silencio para poder ver un poco la televisión.
Sacó de su mochila una botella de vodka, tomó dos copas de mi cocina, puso música de su agrado para servir una cierta cantidad de alcohol en las copas.
–Por nuestra increíble vida, ¡salud!–
Tomé aquella copa para beber de ella, la música con el ambiente pegaba bien, bebí bastante nervioso por temor a que quisiera joder una vez más, pero por suerte no fue así. Después de unas copas estábamos bastante ebrios para ser demasiado honestos, debería admitir que aquella noche se portó bastante honesta conmigo.
–Supongo que jamás sentiría algo por ti a menos que me lo pidas formalmente– Pero ahora eso no importa, bésame los pies y pídeme perdón por no ser suficiente–
Mis expectativas murieron esa noche porque me dejé vencer nuevamente por Saori, una vez más me humillaba tanto, pero debía admitir que la poca atención que me daba era suficiente para volverme loco, ¿A quién no le volvería loco aquellos besos tiernos de una chica como Saori?, la catalogaba como la mejor chica del mundo, sus besos cada vez me tenían al suelo, me bailaba en Kimono mientras un gato de oro movía la pata presenciando aquél acto de egoísmo, no quería más drogas, quería a saori para conocer al menos aquella felicidad que anhelaba, la tomaba por el cuello mientras me abofetea, besaba sus piernas mientras suplicaba más y más, pisaba mi rostro con intención de hacerme menos, tocaba su pecho suavemente para masajear su delicada piel, besaba su pecho mientras acariciaba mi cabello y su cuerpo comenzaba a ponerse tan caliente, sus labios eran terriblemente especiales mientras besaba su cuello podía escuchar entre gemidos como decía mi nombre, piel con piel y su mente con mi sangre, fueron una combinación que no olvidaría nunca, había olvidado porque me había obsesionado con ella, pero aquella vez me hizo recordarlo, esa noche nos unimos, pero está vez fue diferente, me había gustado tanto que ella no dijo sus frases tontas como otras veces, solamente se quedó dormida.Mientras yo iba a la cocina por un vaso de agua, podía mirar caras deformes en mi techo, en la pared y el piso, el agua sabía tan amarga mientras voces me decían que era momento de matarla, de pronto comenzaba a escuchar su voz mofándose de mí, una y otra vez, no quería cometer una locura, me tiré en el suelo bastante asustado por aquellas visiones que me atormentaban, veía a esa chica flotando en el aire aconsejando que fuera a matarla mientras mamá tocaba mis pómulos fríos, no quería despertarla con mis escenas de paranoico; lloré un rato en el baño sólo para reflexionar que tal vez Saori abusaba de mi estado mental, no la mataría esa noche, pero tomé un papel y escribí una nota para guardarla en su mochila para cuando se fuera de mi casa, aquella nota que escribí entre tanta locura decía... "He sentido un inmenso deseo de asesinarte, besar tu rostro tan frío mientras duermes, besarte cariñosamente para después apuñalarte, que muchas veces siento que la vida no me alcanzará para hacerlo, pero antes de cometer una estupidez, debo confesar que siempre voy amarte".
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Memorias en japonés 日本語の思い出
Romance_Memorias en japonés es una historia situada en el hermoso México donde un joven nos cuenta sus experiencias al ser nuevo en la ciudad, nos muestra su camino conociendo a gente que podría cambiar su destino, su vida tomará un gran giro cuando conoce...