AMISTAD

266 35 19
                                    

| CAPÍTULO V |

No podía negarlo, ¡la libreta de Severus era fascinante!

Él hacía anotaciones que iban más allá de lo dictado por la profesora y además, enriquecía sus apuntes con comentarios personales que invitaban a la reflexión. No podía creer que todo esto se lo reservaba únicamente para él.

Aunque pensándolo bien...

El profesor Snape no enseñaba pociones con libro de texto. Únicamente compartía las instrucciones en la pizarra y daba la cátedra. Ahora entendía por qué; tenía una mente extraordinaria.

Supuse que estaba enloqueciendo. Entre más leía, más quería platicar con él.

—Por Merlin, ¿puedes apartar la nariz de ese cuaderno? —Exclamó Bellatrix.

—No la molestes Bella, para ella debe ser complicado tomar clases aquí. —Contestó Narcisa mientras se cepillaba el cabello.

No sabía que contestar. Realmente no necesitaba estudiar tanto.

El fin de semana transcurrió con lentitud. No deseaba devolver el cuaderno pero deseaba volver a ver a su dueño y sabía que el único pretexto que tenía para ello es devolver el objeto prestado.

Este lunes, al finalizar la cena, intercepté a Severus con decisión.

—Hola. —Le saludé.

Él no respondió.

Ya no lucía tan amable como había sido el viernes.

—Quisiera devolverte tu cuaderno. —Mencioné extendiendo el objeto. —Gracias.

—Por nada.

Aunque moría por comentar con él mis percepciones, sabía que en el fondo, lo correcto sería no profundizar el contacto.

Traté de omitir sin éxito que me sentía afectada por su comportamiento, no obstante, a pesar de mis esfuerzos por ocultarlo... me descubrí tratando de encontrar espacios donde pudiese abordarlo a solas y comenzar una conversación.

Sabía que no debía, pero trataba de justificarlo. Si me acercaba a él, se acercaría a Lily... ¿correcto?

Eso es precisamente lo que busco.

Lo que terminó sucediendo me dejó perpleja. Si antes creía caerle mal a Lily Evans, ahora podía estar segura de ello.

Y no es que hubiese iniciado una amistad con Severus, estaba lejos de ello.

Si yo le saludaba por el pasillo, él me ignoraba. Severus únicamente habla conmigo lo debidamente necesario en clase, en el Gran Comedor y en la sala común.

Comencé a creer que Lily descubrió lo del cuaderno y a eso se debía todo; hasta que caí en cuenta de que otra vez estaba activa en clases, de nuevo participaba y comenzaba a sonreír un poco más.

Merlin, no por favor.

Estaba empezando a acostumbrarme a vivir en esta década y poco a poco volvía a ser yo misma... tan sobresaliente y participativa; eso parece desagradarle a la pelirroja. Que, en palabras del mismo Severus, es muy competitiva.

Jamás me he sentido satisfecha fastidiando a otros por lo que, aunque me gusta sobresalir académicamente, trataré de llevar la fiesta en paz. Pero, una cosa es mantenerse al margen con mi aprovechamiento escolar y otra muy diferente es alejarse de Severus cuando, aunque sé muy bien que no debo, la realidad es que no quiero hacerlo...

No podía evitar desear mantener su conversación cada que podía hasta que poco a poco se volvió cotidiano entablar cierto compañerismo entre nosotros.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 12, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Temporal.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora