Ballroom: Mal de amores

【Capítulo 11 - Niñez】

—¡Demos pase a la primera pareja!

Nicolás y Micaela, ambos agarrados del brazo, caminan con confianza dando una imagen de grandeza que dejo a los presentes con diferentes reacciones

(Público asombrado)

««Ohhh»»

—Esto es...

—Si...

—Esta presencia.., ¿Cómo unos niños son capaces de transmitir esto?—Dice Rodolfo con una sonrisa en su cara

—Vamos a ver que nos van a mostrar esta pequeña pareja...sorpréndanme—Dice Ximena

.

.

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—Empecemos Micaela—Dice Nicolás 

—Lo mismo digo—Dice Micaela

Ambos se ponen en posición de pareja y comienzan a realizar la rutina que el profesor de baile les enseño en aquella ocasión que les llamó, a diferencia de esa vez ambos Nicolás y Micaela ya no era su primera vez bailarla juntos, es su segunda y algo que debería ser una locura que se pueda realizar a la perfección a diferencia de esa vez que no fue al 100%

Mientras Nicolás y Micaela recreaban la misma rutina...

—Oye—Dijo Rodolfo

—..., ¿Si?—Respondió el profesor de baile mientras miraba a Nicolás y Micaela

—¿Dónde conseguiste a semejantes monstruos?—Dijo el profesor aún sorprendido por lo que estaba viendo

—Que les digas así...no, tienes razón ellos han mejorado a un nivel monstruoso..., yo no conseguí a estos alumnos Rodolfo, simplemente yo enseño cuando piden mis lecciones para cualquier cosa y así eh estado enseñando en muchas instituciones educativas, pero en ninguna vi dos talentos como los son ellos...

—La quiero...—Maravillada al verlos—Imagina todo el potencial que tienen por delante esos dos niños, solo tienen 5 años, quiero verlos como serán cuando crezcan—Dijo Ximena

—Te entiendo Ximena, esto me recuerda aquellos tiempos donde tu y yo bailábamos y ganábamos todo—Comentó Rodolfo

—Esos años, son mi tesoro

(Termina la canción)

—...—Rodolfo no dice nada

—...—Ximena no dice nada

***

—Ah...ah...ah...—Respiraba entre cortado Nicolás al terminar de bailar

—Ah...ah...bien hecho—Dice Micaela

—Tú tan bien...Micaela—Respondió Nicolás

(Silencio)

—Bueno vamos a acomodarnos a nuestros asientos ya que bailamos...—Agregó Nicolás

—Claro...—Dijo Micaela

Mientras ambos se dirigían a su sitio se comenzó a escuchar algo a lo lejos

(Un aplauso se escucha a lo lejos)

««Plas, Plas»»

(Muchos aplausos comienzan a sonar al unísono)

««¡¡¡Plas, Plas, Plas, Plas, Plas, Plas, Plas, Plas, Plas, Plas!!!»»

—¡¡Muy bien Nicolás!!—Dijo la mamá de Nicolás