Inesperado (FengQing)

04

Inhaló frente a la puerta y percibió escasamente el olor a lirios de Xie Lian y el terroso de Hua Cheng, el último aroma fue más difícil de detectar pero cuando la fresca menta entró a su sistema lo sorprendió.

Mierda, estos tres olían bastabte bien.

–¿Feng Xin?– la puerta amortiguó la voz pero aun pudo detectar el timbre de Xie Lian.

Sonrojándose ligeramente abrió la puerta sin esperar más. Primero encontró el rostro sonriente de Xie Lian frente a él, al lado izquierdo del omega estaba Hua Cheng quien lo saludó con una inclinación casi imperceptible de cabeza y por último lo saludó un rostro atractivo de lo que claramente era un alfa. Tenían la misma altura y aunque era guapo parecía tener metido un palo por el...

–¿Estabas leyendo?– Xie Lian lo sacó de sus desviados pensamientos y recordó que no soltó el libro.

–Yo... ejem, sí– quitándose del medio, hizo un ademán para que entraran –Por favor, pasen–

Cuando los tres hombres entraron y cerró la puerta volvió a sentirse incómodo. Planeaba presentarse al menos pero el alfa, Mu Qing, estaba observando todo e ignoraba a los de a su alrededor; paseó desde la entrada hasta la cocina, miró el escritorio unos segundos y después la diminuta sala. Sin dar aviso alguno entró al dormitorio y al salir, por su rostro, no le gustó lo que vio dentro.

–Entonces... es todo– escuchó comentar al hombre.

Bien, Mu Qing había visto peores lugares pero también mejores, el departamento era pequeño y solo contenía lo justo. Estaba limpio (quizás solo para dar la impresión), las paredes estaban deterioradas y se podían ver rastros de lo que posiblemente era un intento de arreglarlo. Debía admitir que era terrible.

–Estas bromeando– dijo mirando a Xie Lian –¿Planeas que viva aquí?–

Para el alfa peliplateado consideraba que el departamento apenas y llegaba a lo decente, los dos no podrían moverse con libertad ni tener la privacidad que a Mu Qing le gustaba.

Hua Cheng escuchó exhalar bruscamente a Feng Xin, tal vez no tenía un olor característico que dejara al descubierto sus emociones pero por su postura rígida entendió que si no hacía algo todo el plan se iría a la mierda.

Él no podía permitir eso.

Antes de siquiera abrir la boca, Mu Qing continuó: –Este lugar se va a caer en cualquier momento, definitivamente no–

"Joder" pensó Hua Cheng.

–Bueno señorito, no todos podemos cagar dinero y pagarnos un penhause cinco estrellas–

Wow, solo habían cruzado pocas palabras y sin embargo comenzaron a atacarse como enemigos de toda la vida. Xie Lian volvió a intentar de mediador solo para ser expulsado de la "conversación", Hua Cheng suspiró ante los dos tontos que tenía presente. La pareja de alfa y omega se miraron sin saber qué hacer, ¿debían abandonar el plan? ¿Buscar a otra persona? ¿Molestar a Feng Xin hasta que dejara de ser un terco de primera?

Estaban por llegar a un acuerdo cuando un grito/insulto los distrajo, ¿cuánto de la pelea se perdieron? Xie Lian y Hua Cheng miraron a ambos hombres frente a ellos una vez más, Feng Xin tenía el rostro rojizo de lo que visiblemente era ira, no escucharon qué dijo Mu Qing pero debió ser algo lo suficientemente desagradable para que el beta olvidara lo costoso que eran sus preciados libros y lo lanzara directamente al rostro del alfa.

El movimiento fue repentino e impidió que Mu Qing reaccionara a moverse, y así, el grueso libro se estrelló en todo su rostro. Hua Cheng apenas y reprimió su carcajada, Feng Xin era uno de las pocas personas que hacía caso omiso a la jerarquía¹ y eso le agradaba de él. Xie Lian por otro lado se acercó preocupado a Mu Qing que murmuraba por lo bajo, probablemente maldiciendo a todos los ancestros de Feng Xin.