Las almas gemelas, aquella persona destinada ati, el hilo rojo en el meñique, tu media naranja o una marca.
Una marca que te puede decir quien es tu alma gemela, un tipo de flor o algo que caracterize ala otra persona.
Antes, para algunos shinobis era demasiada suerte y para otros era doloroso, despues de la guerra mucha personas murieron y parte de ellas almas gemelas.
Es una nueva epoca, nueva generación todo es tranquilo asta ahora, todos tienen una marca despues de los 10 años.
Una pequeña niña azabache se retuerce de dolor en el comedor de su casa, mientras su madre solo la sostiene en brazos.
Para la sorpresa de las dos no hay una marca específica.
-Sarada, cariño.
El llanto de la niña se escucha por toda su casa la mujer solo puedo e seguir abrazando a la niña después de ver a su hija sufrir dos horas de dolor en el piso.
-MAMA...
La niña asustada y llorando solo podia llamar asu mama.
La mancha en su pecho no era buena señal.
-Yo no tengo un alma gemela... Mama...
La niña se desmayo poco despues de esas palabras.
La mancha significaba solo dos cosas: Su alma gemela aun no habia nacido o esta habia muerto.
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Los años habian pasado para Sarada Uchiha, chica inteligente y miembro del equipo siete ella ya no era una niña de 10 años sino ahora una ninja de la hoja.
Habían llegado a konoha por fin su misión habia terminado.
Pero ella aun no podía dejar de pensar en la marca, pues esta durante todo este tiempo desde que habian salido de konoha no habia dejado de sentirse extraña, toco su pecho mientras se dirijia al espejo.
-Duele.
Su madre pronto llegaria, se dirijio ala cocina para asi tener lista la cena.
Despues de un par de horas la pelirosa entraba ala casa cansada.
-Sarada ya llegue. - dijo la mujer, la cual al entrar vio a su hija solo con una blusa estraple,esta se acerco rapido a la chica que se encontraba sentada.
-¿Paso algo? ¿estas herida?.
La joven negó, para asi solo suspirar y desprender el parche en su pecho. -La marca, ha cambiado. - la mujer observo la marca detenidamente, era verdad esta se habia hecho mas pequeña, antes estaba del tamaño de su mano en el pecho de la azabache pero ahora solo se encontraba una pequeña mancha del tamaño de una moneda.
-nunca habia pasado esto, por que ahora que estaba mas tranquila. - la pelirosa sostuvo asu hija de los hombros y la miro fijamente.
-Solo hay dos opciones a esta, uno tu alma gemela acaba de nacer o dos hay una posibilidad de que esta persona destinada este bien y solo fuera un retraso aparte por ahora no ha tomado una forma específica - dijo, la mujer sonriendo - Aunque quisiera que fuera la segunda, ya que serias una pedofila.
La mas chica empezó a reir, tal vez habia una posibilidad de su alma Gemela, aunque fuera un bebe no significaba que tendria que tener ese tipo de relacion, podria ocultar su marca como lo ha hecho desde hace tiempo y entrenarlo o entrenarla, tal vez se estaba adelantando a todo esto.
La chica suspiro y agredecio a su madre, esta se levanto y empezo a servir la cena.
Despues de terminar, simplemente se encerró en su cuarto, aun estaba preocupada la marca que antes cubria mayor parte de su pecho ahora solo era del tamaño de una moneda, esta sostuvo su rostro preocupada.
-Que esta pasando. Shanaroo.
Su corazon no dejaba de latir, habia una posibilidad de tener un alma gemela, era su deseo y podia haber una pequeña esperanza.
