tercera persona
"Todo esto es una pesadilla, ¿verdad?" Preguntó Sooyoung. "Todo volverá a la normalidad cuando me despierte".
Seguir adelante luego de una ruptura es algo excepcionalmente difícil para todos, en particular para Sooyoung. Jiwoo era uno de sus únicos pilares de apoyo y sin ella, simplemente sentía derrumbarse en cualquier momento.
Con el paso del tiempo Sooyoung dejó de llorar por aquella situación. Solo porque físicamente no podía producir más lágrimas. El líquido de su cuerpo se había secado, dejando solo a una Sooyoung entumecida."Estoy muy cansada", dijo Sooyoung mientras se recostaba en el regazo de Jiwoo. "Y-yo realmente quisiera verte a mi lado cuando despierte. ¿e-es posible?"
Sin respuesta. La habitación quedó en silencio una vez más.Jiwoo se quedó y esperó hasta saber con certeza que Sooyoung estaba completamente dormida. Se quitó la sudadera con capucha de color bordó que alguna vez compartió con ella y la dobló simulando una almohada. Lentamente, colocó la cabeza de Sooyoung sobre la almohada improvisada y la levantó de su regazo.
Juntó sus cosas, se levantó silenciosamente y comenzó a caminar fuera de la habitación. En el segundo en que sus manos tocaron el pomo de la puerta, se detuvo.
"Si te vas ahora mismo, no quiero volver a ver tu rostro ni escuchar tu voz otra vez", dijo Sooyoung.
"Si que eres insistente", murmuró Jiwoo mientras abría la puerta. "Nos vemos en clase o algo así."
-
"¿No crees que es demasiado?" Preguntó Hyunjin, agachándose para observar la llama."No", dijo Sooyoung. "No tiene sentido que siga conservando esto".
Hyunjin observó con horror cómo Sooyoung arrojaba cada carta y cada pequeño artículo que alguna vez recibió de Jiwoo al fuego. Lo que la asustó aún más fue ver lo tranquila que Sooyoung se veía a pesar de saber que estaba viviendo una situación demasiado dolorosa para ella."Esto es una locura, imagina cómo se sentiría ella al verte hacer esto", dijo Jungeun desde la cocina.
"No me importa", dijo Sooyoung, arrojando la caja de cartas al fuego.
Una vez que se quemaron todos los papeles, Sooyoung se puso de pie y miró el fuego crepitante. Todo lo que ellas dos habían tenido alguna vez, todo el tiempo que pasaron juntas, ya no existía, era momento de olvidarlo y seguir adelante.
Mirando su mano, Sooyoung se quitó el anillo. Era un anillo de promesa que compartían, un anillo que Jiwoo había comprado con sus ahorros cuando consiguió su primer trabajo parcial. Sooyoung sonrió al recordar la alegría en el rostro de Jiwoo cuando llegó con el anillo. Pero ya no importaba, todo había terminado.
"No lo hagas, ese anillo es estúpidamente caro", dijo Hyunjin."No creo que todavía tenga el suyo", dijo Sooyoung. "¿Lo tiene?"
"¿Mmm?" Dijo Heejin, al ver que Sooyoung la estaba mirando. "Nunca la he visto usar uno, pero, como te dije antes, no le presté atención".
Sooyoung suspiró profundamente y miró el anillo brillante, luego volvió a mirar el fuego. Incluso después de todo este tiempo, todavía estaba sufriendo."Ya está, con las cartas ya fue suficiente", dijo Hyunjin, golpeando la pierna de Sooyoung.
Sin escuchar, arrojó el anillo al fuego. Finalmente se fue, finalmente se fueron, todos sus recuerdos juntas.
"Hyunjin, voy a volver a casa", dijo Sooyoung, abrazando sus rodillas. "Tengo suficientes créditos para graduarme con anticipación".
"No seas así", dijo Hyunjin. "Busan está muy lejos, ¿cómo vas a hacer para prepararnos la cena todas las noches desde allá?"
