T/N Johnson
_ Después de haberle contado todo ya no pude seguir, me quedé dormida y Dante me llevo a mi habitación. Cuando desperté la luz entraba por la ventana, ya había amanecido, sentí su respiración, estaba acostada en su pecho, se había quedado conmigo. Llore frente a él, le mostré la parte más débil y frágil de mi, mientras él me abrazaba haciéndome sentir que por primera vez no estaba sola
_ Me levanté con cuidado de no despertarlo, cuando al fin lo logré me acerque a él y le di un beso en la frente
T/N: Te quiero, Albidone
_ Acaricié su mejilla y lo mire como idiota por varios segundos, se veía muy lindo dormido, a mis ojos él lucía como la cosita más inocente y vulnerable del mundo, sentía la necesidad de cuidar de él, hace unos días quería terminar todo esto porque no quería lastimarlo cuando me fuera, no quería que él sintiera lo mismo que yo sentí cuando Zac se fue, pero, no puedo y quiero creer que tampoco debo, podremos contra esto y mucho más
Si, algo es seguro
_Dante no es débil, ¿y yo? Bueno, yo me siento fuerte a su lado
(#)
_ Eran las diez de la mañana, estaba terminando de hacer el desayuno cuando escuché unos pasos, voltee hacia la puerta y ahí estaba Dante, solo tenía un short de fútbol, no llevaba playera y tampoco tenía zapatos, solo calcetines, me dió una sonrisa adormilada, luche contra mis instintos para no lanzarme a besarlo
Serán unas largas horas
Dante: Hola, bonita ¿Cómo amaneciste?
_ Me preguntó al mismo tiempo en el que se sentaba en la barra
T/N: Eh, ¿bien y tú?
Dante: Bien, aunque esperaba verte al abrir los ojos, madrugaste ¿Harás algo hoy?
T/N: No lo sé, en especial solo tengo un plan, pero será más tarde, nos iremos mañana por la mañana, así que tenemos el día libre, tú elijes que hacer
Dante: Podemos salir
T/N: ¿Hamburguesas?
Dante: Ati no te gustan y...
T/N: Puedo comer papas, así que...¿Aceptaría mi invitación señor Albidone?
_Le ofrecí mi mano, él sonrió y la tomó
Dante: Acepto, señorita Johnson
(#)
_ Después de desayunar y cambiarnos, salimos de casa, íbamos caminando, él no dejaba de buscar algún tema de conversación, ya hablamos, de películas, series, comida y colores, mi paciencia empieza a acabarse, ahora está hablando de sus mascotas fallidas
Dante: Sabes, los hámsters se reproducen muy rápido y de muchos (sonrió de manera coqueta) ¿Quieres ser mi hamster?
T/N: Oh, que gran honor, no puedo creer que tendré que rechazarlo, los bebés no son lo mío
Dante: ¿No quieres tener hijos?
T/N: No
Dante: ¿Por qué? ¿No te gustan?
_ ¡Hace muchas preguntas! Suspiré antes de responder
T/N: Si me gustan, solo digamos que... pongamos un ejemplo, si cargó a un bebé que no es mío en cuanto llore se lo doy a su madre y problema arreglado, pero si es mío ¿A quien se lo daré? Aparte es mucha responsabilidad para mi
