Marcus Cooper
Toronto/ Canadá_ Siempre he odiado el sentimentalismo.
_El apego emocional a una persona me provocaba náuseas, fastidio, pero más que nada, miedo y no porque me pareciera horrible, sino porque era tan jodidamente encantador que una vez que lo tenías la posibilidad de que se convirtiera en un dependencia era alta. Serías dependiente de esa cosa dulce y linda llamada amor y sin tener la certeza de que siempre que lo necesitarás estaría ahí cuando todo se viniera abajo. ¿Qué quedaba? Arriesgarte a sentirte la mayor porquería en el mundo cuando esa persona se haya marchado. Reprocharse durante toda tu existencia no aver podido detenerla, preguntándote que hiciste mal y con toda sinceridad mi respuesta siempre fue la misma:
Enamorarme.
Derek: ¡Qué lo dejes, maldita sea!
Marcus: ¡Venga! Ve a buscar a alguna chica por ahí y deja de joder
_ Pasó una mano por su cabello rubio, estaba frustrado. La estaba pasando mal al verme a mí mal, lo sabía, podía notarlo y también lo sentía, pero no hay nada más que hacer
Derek: No habías tomado desde hace mucho tiempo, Marcus ¿qué te sucede?
Marcus: Esto es lo que haces cuando te sientes una gran bola de fracaso
Derek: Ya. ¿Y crees que comportándote como un puto alcohólico te sentirás mejor?
Marcus: Después de las veinte botellas, posiblemente si
Derek: Después de las veinte botellas posiblemente estás muerto
Marcus: Todavía mejor.
_ Le sonreí a mi amigo de oreja a oreja sin un poco de preocupación, él me miró, tratando de encontrar algo en mi mirada que me delatará. Ignore su intención y tomé de la botella que estaba en mi mano. No aún no estaba ebrio, pff apenas llevaba tres.
Rubio loco.
_ No pude terminar de beber cuando me arrebató la botella de las manos con rapidez. Le di una mirada asesina, advirtiendo que me la diera devuelta, pero claro que eso eso no le causó ningún efecto, pues no sé removió ni un milímetro
Marcus: Devuélveme eso, rubia castrosa
Derek: ¿Qué sucede contigo? Estás así desde hace varios días
Marcus: No tengo nada.
Derek: Claro que tienes algo. Talvez a veces soy un idiota, lo sé, pero sabes que me... me... ¿i-importas?
Marcus: Wohoho, no te pongas sentimental, ni de chiste pienso besarte
Otra vez...
Derek: Estoy dándote mi apoyo, carajo, recíbelo porque es difícil escoger palabras para que no me escuché como un imbécil, Ah y no te hagas como si no te encantó
;-;
Marcus: Ya, ya. ¿Me das mi cerveza?
Derek: ¡No cambies, el puto tema! Estoy hablando en serio, Marcus, no me gusta verte así
_ Apreté los labios. No quería responder cosas de las que después me arrepintiera, además, solo trata de ayudar.