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Actualidad

10 de Septiembre de 2021.

Se despertó como todos los días con el frio y la soledad abrazando su cuerpo. Estiro su mano a su lado esperando sentir algo, esperando sentirlo... pero no fue así.
Suspiro casi sollozando y se levantó de la cama. Se dirigió al baño para proceder con aquella aburrida y monótona rutina que había adoptado algún tiempo atrás.
Mojo su cara con agua fría una vez, y otra, y otra, como si estuviese intentando despertar de su realidad.

Cuando entendió que aquello no sucedería volvió rendido a su habitación.
Abrió su placard del lado desordenado y monocromático. Los colores blanco, negro y gris decoraban cada espacio de ese lado. Volvió a suspirar.
Se puso unos jogging negros, una remera cualquiera que se cruzó frente a sus ojos y un buzo blanco, pues por un momento pensó que necesitaba algo de claridad.
Bajo sumiéndose en el silencio de su cocina blanca y brillante. Los muebles casi nuevos lo miraban, el los ignoro.

Se preparó su típico café negro, agrio, sin una pizca de azúcar, y se sentó en una silla de la barra para poder tomarlo.
Su celular estaba sobre la mesa. Lo miro de reojo, muy dentro de él esperando un mensaje que lo ilumine, mensaje que no recibió.
Lo tomo a desgano viendo un par de mensajes y llamadas perdidas de trabajo. Nada importante pensó y lo dejo a un lado.
Termino su café y lavo la taza. La dejo sobre la mesada y volvió al baño. Se lavó los dientes y nuevamente su cara, para su desgracia seguía en el mismo plano.

Tomo las llaves del auto y salió de su casa.
En el interior de su Ford Mondeo también lo acompaño el silencio. Al menos en las primeras cuadras hasta que decidió poner algo de música.
Su playlist se puso de manera automática y se ahogó con su propia saliva. Hacia tanto no escuchaba su voz.
Unos bocinazos de un auto detrás de él lo alertaron y tiro su celular a un lado para volver a tomar el volante. Hizo señas de disculpa a través del espejo retrovisor y siguió su rumbo, nuevamente en silencio.

En coma.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora