One More Night :: KookGi ₊·੭*

→˚₊· :six: ੭*

「6 meses después」

El día de hoy es bueno para celebrar. Después de seis meses de peleas ya patrocinadas, arduos entrenamientos y muchos cinturones ganados, hoy Jungkook tendrá su primer pelea transmitida por televisión.

Así es, tendrá este combate en cadena nacional y en horario estelar. ¿No es increíble? ¡Estoy muy feliz! Jungkook va contra uno de los mejores boxeadores de Corea, Song Kang, un chico de 24 años.

Si mi novio gana ésta, que estoy seguro de que así será, su carrera despegará totalmente y podría ser famoso en todo el globo dentro de muy poco tiempo. Ya lo quiero ver sosteniendo el cinturón del Campeonato Mundial, siendo aclamado por cada persona del planeta.

Por segunda vez en mi vida el boxeo me agrada. Si, hubo una primera vez hace ya mucho tiempo pero ya habrá un momento justo para contarles.

En fin, hoy va a ser un día muy ajetreado para ambos. Empezando por levantarnos temprano ya que como saben, lo hago quemar calorías por la noche y acaba muy cansado... Al igual que yo. Así que luego de quince alarmas logramos despertar.

— Creo que deberíamos dejar de dormir tan tarde. —sonreí inocente.

— No está en mis planes dormir temprano bebé. —reímos y nos dirigimos una mirada cómplice.

Le preparé un rico desayuno, ahora sin agregarle antojos ni nada por el estilo, ni yo mismo sé cómo es que sabía bueno lo que le di, porque tuve que probarlo antes, no estaba tan mal... Pero le gustó así que con eso basta.

Aunque a mí me dieron más náuseas que de costumbre al ver y probar su platillo "especial" y no supe explicar bien el porqué de mis malestares.

— Yoonie ¿todo bien? Has hecho más caras de las regulares. —me cuestionó al terminar de comer.

— S-si... Supongo que mi estómago no anda bien hoy. —dije con normalidad— ¿Tienes más hambre amor?

— No...—me repasaba con la mirada como queriendo escanear qué era lo que me sucedía, pero como ya dije, ni yo mismo entendía mis síntomas

— ¿De verdad todo está en orden?

— Te aseguro que sí. —sonreí sin mostrar los dientes, él no necesitaba preocupaciones extra, menos por algo que no tenía claro lo que era.

Seguimos la rutina que adoptamos desde hace meses, arreglarnos, guardar todas sus cosas en su maleta, ponerle seguro a la puerta y conducir a toda velocidad para llegar a tiempo. Los recintos cada vez estaban más lejos y bueno, hemos tenido que medir cada minuto con precisión para evitar retrasos.

Una vez que estuvimos allí, el señor Jung nos subió a una camioneta para trasladarnos a donde se realizaría el evento, lugar que quedaba aún más lejos. Así es, hoy visitamos dos sitios diferentes.

Durante el trayecto empecé a sentir de nuevo las náuseas, iban y venían. Yo pensé que eran causadas por el movimiento brusco del auto además de que por la mañana no había desayunado bien y mi estómago se revuelve cuando está vacío. Decidí que no le daría más vueltas al asunto pues me convencí de que era una sensación relativamente normal.

Una hora más tarde llegamos a nuestro destino, y al bajar nos encontramos con cámaras y prensa esperando por Jungkook y obviamente también por Song Kang. Fue algo difícil pasar todo el gentío pero al final se logró y entramos a salvo. Kang llegó pocos minutos después.

En esta ocasión al ser una pelea televisada se tenía que hacer la presentación de los boxeadores frente a cámara además de la clásica foto de ambos mirándose seriamente. Ay... Jungkook salió tan bien en esas fotografías... ¿Creen que si pido que me las envíen lo hagan?

— Es hora. —dijo su mánager cuando la sesión fotográfica y la pequeña entrevista terminaron.

— Mucha suerte bebé. —le sonreí y lo besé— Estaré en primera fila viéndote.

— Te dedicaré mi victoria. —me regresó el beso.

Dio inicio la pelea, y como era de esperarse Jungkook tomó la ventaja desde el primer round.

A su lado Kang, parecía un novato y no lo digo sólo porque sea mi novio, ese comentario lo escuché venir de la gente a mi alrededor. Yo por supuesto gritaba como loco "¡Jungkook, vamos mi amor!" sin importar cuantas miradas extrañadas y hartas se posarán sobre mí.

Iba empezando el quinto round cuando paré en seco mis festejos con gritos y brincos. Las náuseas habían vuelto y esta vez no fueron sólo pasajeras. Corrí fuera del lugar para buscar un baño, afortunadamente encontré uno a pocos metros y me quedé allí algo de tiempo... Y eso que hoy no había comido la gran cosa. Regresé a la contienda y ya había comenzado el sexto round, realmente me tardé.

Claro que ya me sentía mejor en ese momento, así que de nuevo por mera suposición pensé que tal vez algo que cené anoche me había hecho mal.

Mis malestares no aparecieron durante el resto de la pelea, la cual terminó con el resultado que yo ya esperaba. Mi bebé le ganó. Ahora él poseía el título del Mejor boxeador de Corea del Sur. Tal vez no parece un puesto muy alto pero créanme que lo es, considerando que tan sólo en este país hay cientos de boxeadores.

Cuando todo el evento acabó y nos fuimos para que Jungkook pudiera cambiarse e ir a casa, me preguntó el porqué de mi ausencia de un round completo. Y yo que creí que ni lo había notado.

— Eh... No fue nada, sólo tuve que ir al baño. —sonreí nervioso, no quería decirle que había estado volviendo el estómago durante todo ese rato.

— Ajá. —se cruzó de brazos— Mientes, dime que sucedió.

— Cariño en serio no te preocupes. —Suspiro esperando mi explicación— Tuve náuseas nada más, creo que la cena fue muy pesada para mí.

— ¿Seguro que eso fue todo? —asentí— Pero ¿te sientes bien ahora?

— Claro que sí, relájate. — sonreí y el correspondió el gesto. Se colocó su ropa deportiva y salimos rumbo al apartamento de Jungkook. El parecía estar ya calmado con mi argumento, pero yo no... Presentía que algo no estaba del todo bien dentro mío.