Amar al hombre más guapo de la novela capital (segunda parte)

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"No lo sé. Nunca había estado allí antes tampoco ", respondió Wu Wei.

El hombre miró dentro y, habiendo visto a Mu Yun, dijo: "Buen día, amigo. ¿Lo sabes por casualidad?

"¿Parece que estoy teniendo un buen día?" Mu Yun espetó, su rostro malhumorado.

Las comisuras de los ojos de Wu Wei se crisparon.

El hombre, " ... "

¡Mu Yun era como un barril de pólvora hoy, y quienquiera que encendiera la mecha explotaría!

"Bueno, ¿podría decirme dónde está Luyuan Peak?" preguntó el hombre.

"No nos habrías visto en esta habitación si hubiera sabido dónde está", respondió Mu Yun con amargura.

El hombre quedó perplejo por su tono agresivo. Solo estaba aquí para pedir direcciones, ¿de acuerdo?

En este momento, una voz clara vino del exterior. "Conozco el camino, y resulta que estoy de camino a ese lugar. Yo te llevaré allí."

"¡Oh muchas gracias!" El hombre corrió al lado de un joven de gran estatura que estaba a poca distancia y lo siguió fuera de la casa.

Wu Wei miró al joven alto, giró y volvió a entrar en la habitación. Después de una mirada a Mu Yun, cuyos ojos estaban fijos en el informe que tenía en la mano, dijo: "Maestro, esta no es la primera vez que me golpean, pero nunca te había visto tan alterado antes. ¿Por qué estás tan enojado por eso en esta ocasión? Me estás haciendo sentir halagado ".

"¿Halagada? Deja la mierda y deja de ser narcisista. Mi enojo no tiene nada que ver con que te pateen el trasero ", dijo Mu Yun, mirándolo mal.

"Okey. Sabía que no tenía nada que ver conmigo ", dijo Wu Wei con voz herida.

"Bueno, quédate aquí y descansa bien. Iré a entregarle esto a Zheng He ", dijo Mu Yun, sacando las piernas de la cama.

"Tenga cuidado, Maestro", advirtió Wu Wei detrás de Mu Yun.

"Todo bien."

Después de salir de la casa, Mu Yun se dispuso a buscar a alguien para preguntarle cómo podía llegar al pico Luyuan.

Por suerte, se encontró con el hombre que les había preguntado a él y a Wu Wei el camino al Pico Luyuan hace poco. Habiendo llegado a saber que Mu Yun también se dirigía al Pico Luyuan, el hombre, que parecía haberse olvidado de la rudeza de Mu Yun hace unos momentos, se ofreció amablemente: "¿Por qué no vienes con nosotros? Todos vamos de la misma manera que tú ".

"¡¿Quién dijo que podía venir con nosotros ?!" espetó una condescendiente voz femenina. Mu Yun miró al orador y descubrió que Wei Yan, la hija del líder de la secta, también estaba presente, y el orador era Wen Lu, uno de los compinches de Wei Yan, que ahora estaba mirando a Mu Yun con una mirada de repugnancia.

Wei Yan, sin embargo, intervino de manera oportuna, "Lu, eso es suficiente. Somos compañeros aprendices. Ten cuidado con él ".

Wen Lu estaba a punto de decir algo cuando Wei Yan desvió la mirada hacia el joven alto que estaba a su lado y dijo: "Nan, ven y conoce a este nuevo compañero discípulo nuestro. Nuestro maestro lo admitió ayer ".

Luego, sus ojos se movieron hacia Mu Yun cuando dijo: "Él es Shen Nan, tu segundo hermano de secta".

Shen Nan era el mismo hombre que hace poco tiempo había afirmado conocer el camino al Pico Luyuan y se ofreció a llevar al hombre pidiendo direcciones hasta la puerta de su vivienda. Miró a Mu Yun, un gordo, y preguntó: "¿Has pasado la prueba de la recitación de las regulaciones de la secta?"