|Día 30|

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Un mes. Habían sobrevivido treinta días en aquella cabaña, era un milagro, los fundadores de Hogwarts estarían orgullosos de ellos

— ¿Donde está Luna? — preguntó el mayor mientras tomaba otra cucharada de la sopa

— En su habitación — contestaron los otros dos

— Que raro que no baje a comer — dejo el tazón a un lado — Vayan a llamarla — ordenó

El Slytherin y el Gryffindor se levantaron de mala gana dirigiéndose a la habitación de la chica tocando la puerta

— ¡Luna! ¡A comer! — gritó Harry

Lo siguiente que escucharon fue algo impactando sobre el otro lado de la puerta

— ¡¿Estas bien?! — gritó de nuevo y un gruñido fue la respuesta

— Se volvió una bestia — suspiró Malfoy — Bueno. Lo intentamos ahora vámonos

— Espera — lo detuvo — ¿Y si le pasó algo?

— Lovegood ¿te encuentras bien? — puso su oreja en la puerta — ¡Si! — imitó una voz femenina — Lo ves — trato de escapar

— ¡No te atrevas! — le advirtió

— Pero si no me he movido

— Si como no — dijo irónico

— ¿Y como piensas entrar? — se arrepintió al ver la cara malévola del contrario

[•••]

— ¡No pises mi rostro! ¡Es muy hermoso para ser destrozado! — exclamó el Slytheryn

— Entonces deja de tambalearte — Harry le contesto de regreso

— Pues no eres muy liviano que digamos

Su idea era entrar por el balcón para llegar a la habitación de la chica. Harry estaba tratando de subir usando a Draco como soporte para alargar la altura, pero al parecer no daba buenos resultados

— ¡Ya casi! — tomó un borde, pero se resbaló

— ¡Cuidado! — lo tomó en forma nupcial antes de que cayera al suelo y se quebrará algún hueso

— ¿Por que tardan tanto? — Cedric apareció — ¿Por que siempre llegó en estos momentos? — se regaño — ¿Que hacen? Bueno. Digo, esta bien, pero podría ser en lugar más discreto, no se lo tomen personal, solo para que ustedes y nosotros nos sintamos más cómodos — sonrió tímidamente

— ¿De que hablas? — el Slytheryn dejó caer al contrario al suelo — Lovegood no quiere salir así que intentamos llegar a ella

— ¡Oh! — el Hufflepuff abrió la boca con sorpresa — Eso tiene sentido — rio — ¿Por que no usan la escalera que está en el ático? — dijo con normalidad

— ¿Tenemos un ático? — Harry se vio en confusión — ¿Por que nadie me lo dijo?

— No te quejes — bufo el Slytheryn — Yo tampoco sabía y no me ves alegando es más vamos a buscar la escalera

[•••]

— ¿Quien sube primero?

— Sacrifícate tu — Draco lo empujó — No pienso ir allá tal vez hay polvo y no me puedo ensuciar

— Bien — se agarro para subir — Lo haré yo, pero tú la tomarás

— Lo que digas

El Gryffindor solo hacía ruido allá arriba mientras el otro solo esperaba pacientemente o eso es lo que trataba

365 Días JuntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora