LEO (Nuevas Especies)

FELICIDAD AL COMPLETO

Los cachorros hacian reír a Faith.

Uno de ellos era albino y tenía la convinación de un lobo. Tenía el cabello largo y Emily pensó en los elfos del señor de los anillos, por lo cual lo nombró Legolas. El otro tenía el cabello rojo, por lo cual lo llamaron Fire.

Sonrió al ver a Faith colgada de su espalda riendo divertida.

Leo la abrazó_ estás feliz.

_ Mucho. Gracias por hacer esto.

Leo acarició su vientre_ nuestro cachorro.

_ Nuestro. Como Faith, Legolas y Fire.

_ Te amo.

_ Ohh Leo, yo tambien te amo.

LEO/NSO

Emily entró al comedor llevando a Faith, seguida de Fire y Legolas.

Trisha la citó ahí.

Cuando entró miles de serpentinas y papeles de colores comenzaron a caer.

_ Que...?

Leo la tomó de la mano y Legolas cargó a Faith.

_ Emily_ Leo se hincó_ quieres ser mi esposa?

Emily se llevó las manos a la boca y comenzó a llorar asintiendo.

Todos les aplaudieron, gruñidos y gritos resonaron.

_ Ya eres mi compañera, pero quería hacerlo a tu modo.

_ Te amo Leo.

LEO/NSO

Leo y Emily se casaron en la Reserva al aire libre.

Veían a su hija crecer feliz y su bebé estaba por nacer.

Muchas cosas habían cambiado para bien.

Rescataron a mas Nuevas Especies y estaban por ampliar sus terrenos.

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LO SIGUIENTE ES LA INTRODUCCIÓN AL SIGUIENTE RELATO DE LAS NUEVAS ESPECIES.

JERIKO.

Daphne llegó a las tierras que su abuelo le había heredado, aquellas donde creció hasta que su padre se la llevara sin ninguna explicación.

Sabía que su abuelo comenzó a tener pláticas sobre la venta del amplio terreno, y sin embargo, él falleció antes de concretar algo.

Detuvo su camioneta al llegar a la casa.

Esta emitió un ruido espantoso al detenerse. Miró hacia un lado y suspiró.

Se bajó y buscó la llave en un sobre que contenía los papeles de la propiedad.

Abrió la puerta_ genial, no hay luz.

Debía ir a encender los fusibles.

Caminó fuera de la casa hasta el poste de luz que estaba pegado al gran muro que colindaba con los terrenos de la reserva.

_ Por dios, que gran muro_ sacó su celular y encendió la linterna.

Subió la palanca y la luz se encendió.

_ Menos mal.

Regresó al auto, tomó la pañalera y a sus hijas.

Entró a la casa protegiendolas del frío.

_ Mami.

_ Ya llegamos mis amores.

Subió las escaleras y abrió la que fuera su habitación cuando era niña.

Todo estaba igual que como recordaba.

Acostó a sus hijas.

Ambas dormían placidamente ignorantes de lo que pasaba a su alrededor.

Daphne las arropó y luego salió de la habitación. Bajó a la cocina y luego comenzó a llorar.

Su ex esposo le había quitado la casa donde vivían y perdió su trabajo por cuidar a sus hijas enfermas.

Se sintió desolada hasta que recibió la visita del abogado.

Fue su tabla de salvación. Una gran herencia también la acompañaba.

Solo que ahí no conocía a nadie, estaba sola con sus hijas en un nuevo lugar.

Trataría de encontrar un nuevo trabajo. El dinero que su abuela le dejó no les iba a durar toda la vida.

El idiota de su ex marido la engañaba con una mujer delgada.

Ella no era delgada, mas bien rellenita. Con curvas.

Abrió la puerta trasera y salió buscando el aire fresco. Dentro se sentía asfixiada.