—Siéntate, voy a ir por el botiquín.
No puedo creer que estoy en el departamento de un desconocido. Claro, me salvó y todo eso, pero de igual forma se me hace un poco raro. Dejé mi mochila a un lado y me senté a esperar. Él bajó las escaleras, en sus manos traía el botiquín de primeros auxilios.
—Esto dolerá —me advirtió.
Mojó un pedazo de algodón con alcohol y lo acercó a mi labio. Joder, dolía mucho. Solté un quejido, él lo notó y comenzó a pasarlo con más suavidad. Luego de unos minutos dejó a un lado el algodón, y colocó una crema.
Cerró todo y me miró.
—¿Mejor? —preguntó y asentí.— Ahora, ¿qué hacías a altas horas de la noche caminando por la calle? ¿Venías de ver a tu novio?
Me miraba tan serio y la forma en que lo dijo, parecía que era mi padre el que estaba frente a mí.
—No, además no tengo novio —él sonrió de lado. Ignoré eso, me ponía nerviosa.— Salí de la casa de mi mejor amiga, teníamos un proyecto que terminar para entregarlo mañana. Ella tiene auto, pero sus padres no dejan que lo utilice, es un castigo por sus calificaciones.
—Bien, porque si me decías que saliste de la casa de tu novio, te hubiera pedido la dirección de ese imbécil, para ir personalmente y romperle la cara por dejarte ir caminando —sentenció.
—Bien, creo que ya es hora de que me vaya a casa —estaba decidida a levantarme, pero él colocó sus dos manos en mis hombros e hizo que me sentará de nuevo. A lo cual lo miré confundida.
—Pasarás la noche aquí.
—Ya hiciste mucho por mí, lo mejor es que yo me vaya y te deje tranquilo. No quiero causarte más molestias —solo rio, como si lo que yo le estuviera diciendo tuviera alguna gracia.
—Dije que te quedas aquí y no estaba preguntándote. Tampoco está a discusión —se levantó.— Sígueme, te mostraré donde dormirás.
—Espera, todavía debo avisarles a mis padres donde estoy, si no llego se preocuparan.
—Pues hazlo —se encogió de hombros.
Me levanté y tomé mi mochila, busqué mi celular hasta que lo encontré, pero para mi mala suerte estaba roto. ¿Algo más que deba pasarme?
—Maldición —murmuré.
—Toma, llama del mío. —lo observé, me extendió su celular. Marqué el número de mamá y tuve la suerte de que respondiera rápido.
—¡Mamá!
—¿TN? ¿Hija dónde estás? Ya es muy tarde —sonaba preocupada.
—Mamá tranquila, ocurrió algo malo, pero estoy perfecta. Esta noche no llegaré a dormir a casa, me quedaré con un amigo.
—¿¡Cómo que te pasó algo!? —exclamó preocupada.— ¡Dime qué no te han hecho nada malo, por favor!
—Mamá tranquila, en serio estoy bien. Ve a descansar, mañana cuando llegue a casa te explicaré todo a ti y a papá —oí como suspiraba más tranquila.
—Por favor cuídate mucho mi amor.
—Te lo prometo mami, ahora ve a descansar y no olvides tomar tus medicamentos.
—Sí, cariño. Te amo. —sonreí y luego colgué.
—Gracias —le devolví su teléfono al pelinegro que me veía con mucha atención.
—Disculpa que te pregunte, pero ¿qué le pasa a tu madre? —mi cuerpo se tensó y miré hacia otro lado.— No estás obligada a contarme si no quieres.
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𝙿𝚘𝚜𝚎𝚜𝚒𝚟𝚘 | Jeon Jungkook y TN [Editando]
أدب الهواة|ᴛᴇʀᴍɪɴᴀᴅᴀ| Shin TN, es una chica de 20 años, es muy hermosa en todos los aspectos, no solo físicamente. Una noche, TN sale muy tarde de la casa de su mejor amiga, después de terminar un proyecto para la universidad, esa noche, ella casi fue violada...