𝙿𝚘𝚜𝚎𝚜𝚒𝚟𝚘 | Jeon Jungkook y TN [Editando]

C U A T R O

La clase de literatura era la cosa más aburrida del mundo en estos momentos. No estábamos haciendo nada, porque el profesor le estaba tomando recuperatorio a los que no habían sacado buenas calificaciones en los últimos exámenes.

Y la última noticia del día es que comparto clases con Jungkook. Justo ahora, estamos en el mismo salón, solo que él escogió sentarse en el último asiento, muy en el fondo de todo.

Insisto en que es antisocial, o detesta a los seres humanos.

—TN —Ahn me habló.— ¿Ya viste lo perfecto que es Jimin? —yo reí y negué al mismo tiempo, esos hombres nos tienen mal.— ¿Qué tenemos que hacer para que volteen a vernos?

—Tienen que ser supermodelos con cuerpos increíbles, tener un rostro de Barbie, ser unas descerebradas y fáciles, como la mayoría de las chicas con las cuales ellos se acuestan —respondió nuestro pálido amigo, Min Yoongi.— Si llegan a hacer esas cosas solo para gustarles, olviden que alguna vez fuimos amigos.

—Aunque suene muy loco, coincido con el vampiro —comentó Jin y Yoongi lo miro ofendido.— ¿Qué? Si es la verdad, eres como un vampiro.

—Claro que no, así soy desde que nací —se defendió.

—Hijo mío, déjame decirte que ser así no es para nada normal. ¿Acaso no sales al sol? —Ahn y yo nos morimos de la risa, este tipo de discusiones son muy normales en nuestro grupo.

—Quédense en silencio, yo vuelvo en unos minutos, llevaré los exámenes al director —avisó el profesor.

Entonces el rey de los idiotas, osea Jung Baekhyun, se paró enfrente de toda la clase. Aquí vamos, ¿cuál será la estupidez con la que saldrá hoy?

—¡Escuchen todos!. —solicitó y todos le pusieron atención. Más que al propio profesor se podría decir.— Este fin de semana, haré una fiesta en mi casa. Ya saben, de las fiestas alocadas que a ustedes les gustan —todo el mundo comenzó a festejar. Claro, menos yo, mis amigos y por supuesto, Jungkook.— ¡Todo el mundo está invitado!

—¡Ay no, Baek! —chilló Jennie. Su voz es demasiado irritable.— Eso significa que las taradas de Ahn y TN también irán.

—No vaya a ser que se nos pegue lo nerd, antipáticas y aburridas —comentó Jisoo, acompañada por las risas burlescas de todos, incluyendo a Tae.

Admito que verlo reírse, dolió y mucho.

—Pues prefiero ser todo eso, antes que una puta regalada —nuestros compañeros dejaron de reírse y me miraron sorprendidos.

—¡Repite lo que dijiste! —exigió Jisoo.

—Claro. Dije que prefiero ser una aburrida, nerd y antipática, antes que una mujer que está más utilizada que el trapo de piso del conserje —todos encendieron sus ojos y se quedaron boquiabiertos.— ¿Te lo tengo que repetir? ¿Te lo digo más lento o ya captaste el mensaje? Digo, porque recuerdo que en la primaria, hasta en la secundaria, los maestros decían que eres bastante lenta para captar los temas.

El profesor volvió al salón y Jisoo se quedó con las ganas de responderme, sé que con todo eso que le dije, firme el acta de guerra con ella, pero me da igual, no pienso soportar que nadie, por más popular que sea, se atreva a hacerme menos delante de todos. Jisoo y Jennie se metieron con la persona equivocada.

El timbre del receso sonó. El profesor tomó sus cosas y abandonó el salón, yo me paré junto con mis amigos para ir a la cafetería por algo de comer, pero el grupito de idiotas, amigos de Jennie y Jisoo, esperaron que algunos alumnos salieran, para cerrar la puerta.

—Ahora me vas a escuchar —demandó Jisoo, colocándose frente a mí. Alzando el mentón para mostrar superioridad.— ¿Te crees mucho verdad?

—Más que tú, sí —respondí simple y ella rio.

—¡Por favor! —bufó Jennie y comenzó a reírse.— Tan solo mírate TN, no eres nada al lado de Jisoo o de cualquier mujer en este mundo. Eres demasiado...insignificante.

Otra vez Taehyung se reía de sus estupideces.

Mierda, si que duele que el chico que te gusta, se ría de los insultos que te dicen.

—¡Basta! —gritó Jin.— Déjenla en paz.

—¡Ay ternurita, la niña no se puede defender sola! —bromeó Jennie, chocando los cinco con Jisoo.

—Tal vez porque a diferencia de ustedes, ella si tiene amigos de verdad que la van a defender de quien sea. ¿Y saben qué? —preguntó Ahn.— Ya me cansé de oír sus estúpidas voces chillonas. ¿Quieren pelear? Peleemos entonces —Ahn comenzó a subir las mangas de su blusa, en serio estaba dispuesta a pelear. Pero antes de que se pudiera tirar encima de ellas, Jin la detuvo tomándola de la cintura.— ¡Jin suéltame! ¡Déjame reventarles todos los órganos a estas rameras baratas! —le exigió forcejeando con él.

—No vale la pena Ahn. —intervino Yoongi.— Tú, TN y todos nosotros valemos mucho más que estos mediocres niñitos de papi y mami, que se creen lo mejor de este mundo solo por tener unas "caras bonitas" —espetó, haciendo comillas.— Pero en realidad cuando les quitas todo eso, ¿qué queda? Nada, absolutamente nada, porque simplemente son basura, tanto por dentro, como por fuera —finalizó dejando bastantes caras ofendidas.— Vamos a comer mejor.

Yoongi se dirigió a la puerta, decidido a salir, pero Jimin se colocó en esta y Tae lo tomó fuerte del brazo. Lo único que falta, que se maten a golpes.

—Te conviene no meterte con nosotros —le advirtió con una sonrisa arrogante.

—No sé a quién pretendes intimidar, si es a mí, pierdes tu querido tiempo —masculló mi amigo.

—¿Cómo que a este le hace falta un buen escarmiento, no creen? —preguntó Baekhyun. Tae miró a Jimin y este asintió con una sonrisa maliciosa, apartándose de la puerta para acercarse a Yoongi.

—Tres contra uno. Eso es bastante cobarde —una voz intervino. Todos miramos al fondo del salón.

—No te metas nuevito. No vaya ser la de malas que también te toque a ti —le advirtió Jimin y Jungkook arqueó una ceja. Luego se levantó de su asiento.

—Con dos refuerzos cualquiera se hace el machito —contraatacó y Tae le soltó el brazo a Yoongi, para enfrentar a Jungkook.

—¿Tanto miedo nos tienes? —sonrió con arrogancia y Jungkook soltó una risa nasal.

—¿Yo, miedo a unos niños que lo único que les importa es que su cabello luzca bonito y que su rostro de principitos no tenga ninguna imperfección? —siseó.— Sin contar que la tienen chiquita.

Wow, eso debió doler.

Ahn me dió un codazo. Tenía los labios apretados para no morirse de la risa.

—Date por muerto —sentenció Tae entre dientes.

—Cuando quieras y donde quieras —le guiñó.— Ahora con su permiso, tengo algo mucho más importante que hacer que estar aquí oyendo amenazas de niños que en su vida han peleado.

Jungkook caminó hasta la salida, pasando por el lado de Jimin, Baekhyun y Taehyung, saliendo del salón como todo un ganador. Admito que le doy la razón en todo lo que les dijo, incluso lo felicito.

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                         —ᴇᴛᴇʀɴɪᴛᴇʟʏ