Daddy's Pet |SUGA;Min.YG| BTS⚠EN HIATUS

¦Daddy's Pet¦11

Fue el trayecto más largo en mi vida, parecía un eternidad y casi se sentía como si el tiempo, los minutos se burlaran de mi por ser tan tonta, tan ridícula y débil pero afortunadamente pude lograr llegar sin sufrir un colapso nervioso qué me permitía ahora enfrentarme a otro reto. Entrar a su oficina y preguntar si su oferta aun estaba en pie, cabía la posibilidad de que me dijera que no, de burlarse de mi pero también había la posibilidad de lo contrario y ansío con mis fuerzas enteras así sea porque siento que no podré más con esto yo sola... Lo he intentado por mucho tiempo.

Mire la puerta cerrada de su oficina con vergüenza por haber vuelto como perro con cola entre la patas. Se lo que quería decirle pero no como hacerlo y duda muchísimo pero tampoco podía simplemente volver a casa con las manos vacías. Fue ahí qué su puerta se abrió.

Estaba perfectamente arreglado, su cabello azabache ligeramente largo bien peinado, su colonia imponente y sutil, su traje negro sin una sola arruga, sus manos blancas y sus dedos largos decorados por joyeria hostentosa y pude ver ahí qué el mordía sus uñas y los pequeños pedacitos de piel alrededor de estas ¿Es ansioso? ¿Había algo a lo que el le tenia miedo? Recuerdo que pensé "¿Eso es posible?" y en ese momento claro que me dije que no sin embargo hoy se que como cualquier ser humano el señor Min tiene algo que le aterra.

Sonrió —Se tarda mucho en entrar Naeun, casi es hora de mi cita— reprochó con un aire galante sosteniendo una taza de café, le dio un sorbo sin despegar los ojos de mi y volvió la seriedad —¿A que debo el honor?

Trague —¿Cita?...— claro que si, el señor Min era bien parecido y poderoso, como pensé que simplemente viviría la vida sin mujeres, mi trabajo me enseñó qué no es así, todos los hombres querían mujeres por montón solo que solo algunos pueden pagarlas y otros son tímidos y se ocultan en el "No le gustan las putas" ¡Sorpresa! A todos les gustan —Lo siento si es que soy imprudente

—Si lo eres pero me gusta— sentenció con firmeza y diversion —Mi cita es de trabajo, no necesitas poner esa cara— Se sonrió burlon

Tome aire tan fuerte como pude y finalmente deje salir las palabras —Por favor... Quiero aceptar su propuesta ¿Aun esta en pie?

Guardo silencio por un par de segundos como disfrutando mis palabras y el pánico en ellas como si verme humillarme fuera su alimento preferido, acuno sorpresivamente mi mentón para obligarme a mirar sus ojos oscuros y felinos qué por segundos me parecía ver arder como si genuinamente fuera el diablo.

—Qué maravillosa noticia— Murmuro con la voz rasposa característica suya y Asintio con amabilidad fingida —Estaba ansioso porque recapacitara su respuesta y esto me viene de maravilla

—Entonces... ¿Exactamente qué soy?

—Mi mascota— recorrió su mano de mi mejilla hasta mi cuello para bajar lentamente en mis clavículas y fue ese simple tacto lo que erizo mi piel por sus dedos tan suaves y frios —Obediente, fiel y sincera

Quise reír, yo ayer diciendo que soy su novia y resulta ni a conocida. Honestamente no me importaba demasiado siempre y cuando pudiera ayudarme, he hecho cosas peores por muy poco así que si, estaba satisfecha en lo que cabe.

—Usted dijo que podía pedirle lo que fuera— Asintio dejando clavados sus ojos en mis labios levantando ambas cejas como impaciente por escucharme —Podría pedirle ¿Sacar a mi hermano de prisión?

Levanto sus ojos en los míos casi como si esperara esto fuese una broma pero al notar mi seriedad el soltó una carcajada tan fuerte qué hasta se escucho un sutil eco en aquella enorme mansión.

—Te estoy ofreciendo el mundo entero ¿y tu me pides algo así?

—Mi hermano es mi mundo— Murmure cohibida pero nego

—Dios míos Naeun, al diablo con mi cita— entrelazo sus dedos con los míos para llevarme casi a rastras hasta su sala para tomar asiento —Hablemos de ideas estúpidas y de por que la tuya gana el premio

—Creí que podía hacer lo que sea— ataque

Se rió nuevamente —Puedo volver el agua vino si quisiera y eso incluye sacar a tu criminal hermano de prisión pero— tomo aire para beber nuevamente un sorbo de café —¿Estas segura de que valdrá la pena? Si lo saco de prisión el no habrá entendido su lección y volverá a darte dolores de cabeza porque su hermanita Naeun venderá su alma con tal de que el este bien pero debes entender algo, el no daría ni las gracias por ti

... Ya lo se pero ¿Es justo tener la oportunidad de sacarlo y no hacerlo? —Me siento culpable— confesé dispuesta a romper el nudo de mi garganta qué me quema cada que intento hablar —Yo tuve una vida bien con papá y mamá aunque haya sido solo un par de años pero cuando el nació ese paraiso su fue al Carajo y el amor familiar es algo que ya no conoció... Por eso siento que verlo feliz es mi responsabilidad

—Puedes seguir viéndolo feliz pero en prision— sentí un aire burlon en sus palabras

Claro que me senti atacada, así que retracte —Olvidelo, no se ni siquiera porque vine

Hice ademan de ponerme de pie pero sujeto con fiereza mi muñeca —Te ofrezco algo mejor ¿Me permites hablar?— Asentí —Deja qué tu hermano entienda la importancia de obedecerte y respetarte, si esta en peligro te ofrezco darle protección para que viva lo que tenga que vivir sano y salvo sin ningún solo rasguño

En ese instante los ojos se me iluminaron, podría adivinarlo. Sabia que sería lo mejor y de alguna forma esperaba que el tiempo ahí le fuera suficiente para entender que lo que tanto le he dicho fue únicamente por su bien, que para cuando salga, el y yo estemos reconciliados y felices viviendo como cualquier par de hermanos. Ese es mi único anhelo.

Y acepte porque eso era mejor que nada, yo no podría pagarle protección y encima su deuda pero su el señor Min lo haría por mi era como si la larca en mi espalda se dividiera en dos, como si el peso ya no lo cargara yo sola.

Pero no note algo importante en ese momento, estaba tan fascinada con su propuesta qué ignore por completo el hecho de que yo jamás le había contado por lo que mi hermano estaba pasando, jamás le dije que estuviera siendo amenazado como para ocupar protección o que era brutalmente golpeado. Son cosas que nunca le dije pero sin embargo el las sabia.

Y no me di cuenta a tiempo.