𝐰𝐨𝐫𝐥𝐝 𝐯𝐬 𝐩𝐚𝐫𝐤'𝐬

12

Adaptarse a que Yeosang no hablara fué muy difícil porque ya se habían acostumbrado a que hablara poco y sentían que el esfuerzo que habían hecho todos para que aprendiera a hablar se había ido por el caño, pero no importaba, si él estaba cómodo así era mejor dejarlo.

— ¿Qué pasa Sanggie?—San lo miró cuando agarró su muñeca y empezó a jalarlo para tratar de llevarlo a su habitación— No hagas eso...no me puedo levantar, Sanggie no, dile a Yuyu que te ayude ¿Si? Yo no puedo.

Se había perdido uno de sus juguetes y no parecía muy contento, estaba estresado. Ya le había pedido ayuda a todos sus hermanos y todos habían dicho que no, él no podía encontrarlo y quería ayuda.

— No puedo Yeosang, ya te dije que no ¿Qué es lo que quieres? ¿Por qué me pegas? Yeosang ¿Qué mierda te pasa? ¿Por qué lloras?

San estaba confundido ¿Qué era tan importante para Yeosang que se ponía de esa forma? Nunca había comprendido a Yeosang y no creía poder hacerlo.

— Dile a Yunho o a Wooyoung, ellos dos te lamen los pies, anda.

Tuvo que ir con Yunho de nuevo, quería a su muñequito de paleta de vuelta.

— ¿Qué? ¿Qué quieres Sang? Estoy con alguien cielo, dile a Woo o a Jongho, no... no te pongas así, a ver, ¿qué quieres?—Dejó que lo llevara a su habitación— Están todos, ¿no? ¿Quieres que te ayude a buscarlo? Está bien, ¿dónde está ese malvado juguete que escapó del príncipe?—Con un juego iba a ser más fácil que Yeosang lo ayudara, no lo iba a hacer él solo.

Sonrió cuando vió la sonrisita de Yeosang al encontrarlo, su hermano era muy lindo.

— ¿Y el principe está feliz? ¿Si? Muy bien, ven y dame un abrazo.

No creía lo que le habían a Wooyoung dicho cuando lo acompañó a buscar sus cosas, si Seonghwa hubiera estado ahí la mujer ya estaría muerta, no era la primera vez que le decían algo así de sus hijos.

«Te dí un montón de oportunidades y mira dónde estás, por tu culpa la situación económica de tus padres se va a ir a la mierda, te pasa por irresponsable ¿No han pensado en internarte en un reformatorio? Eres demasiado incorrecto» eso había salido de la boca de esa horrible mujer que de paso había golpeado a su hijo, estaba harto, definitivamente iba a sacar a sus hijos de ahí, no quería que los problemas en casa aumentará.

— No llores bebé ¿quieres que veamos una película los dos juntitos abrazados? Sé que te gusta, hoy no voy al trabajo ¿okay?

— T-Te van a regañar.

— ¿Y qué tiene? No me va a matar no trabajar un día.

Ambos estaban en cama y habían echado a Seonghwa que iba directo a la cama porque no entraba en esta, se habían apoderado de toda la cama con almohadas y cobijas, y por supuesto, ellos dos.

Nunca había pasado una tarde así con ninguno de sus hijos, era divertido, quisiera hacerlo más seguido.

— ¿Y los reyes de la cama? Muevanse que yo también me quiero.

— Bebé...Woonie muévete para acá, Woonie, bonito—Lo movió para despertarlo— Muévete mi vida, así, ahí.

Seonghwa sonrió con ternura y se acostó agarrando la mano de Wooyoung ¿Qué era lo rojo en su mejilla? Bajó un poco la cobija y quitó su cabello confundido ¿Habían golpeado a Wooyoung?

— Hongjoong...Hongjoong ¿Qué es eso?

— ¿Ah? Mmh..nada amor.

— Hongjoong, ¿qué le pasó a Wooyoung?

— Su orientadora lo golpeó, Wooyoung se lo devolvió y ella le dió peor, pero está bien.

— Voy a sacar a mis hijos de ahí.

— Creí que ibas a decir que no.

— ¿Cómo me voy a negar a eso?

Seonghwa abrazó a Wooyoung y se quedó viendo a la pared hasta que se quedó dormido, el sueño que había tenido no había sido nada lindo.

Empezaba con sus hijos enterándose de lo que les había hecho de pequeños, Hongjoong parecía molesto y lo había demandado para quedarse el con la custodia de todos sus hijos y había ganado, lo habían echado de la casa y podía escuchar como trataban de abrir la puerta gritando por salir porque no querían estar allí, también podía escuchar gritos de horror, como si estuvieran matando a sus hijos porque los gritos no eran de ellos, eran de Hongjoong. Ahí adentro estaba su mamá y lo peor de todo era que no podía hacer nada para detenerla, tenía que ver a través de la ventana como su madre mataba a la que allí una vez había sido su familia, el único de sus hijos que había quedado vivo había sido San que había logrado escapar su pequeño alfa lloraba asustado en sus brazos pero no había durado mucho porque ella los había visto. Sin duda había sido una de sus peores pesadillas.

— ¿Por qué lloras Seong? ¿Estás bien? ¿Te sientes bien?

— ¿Papi?

Esa tranquilidad que había reconciliado al despertar no había durado mucho con el grito de Yunho llamándolos a ambos. Corrieron a la habitación de San que era de dónde provenían los gritos y lo que vieron los aterro.

— Mingi, llévate a Jongho por favor, Yunho por favor sueltalo, deja a San, tú también Seong, sal por favor...—Se acercó a la cama de su hijo y se agachó colocando su mano en el cabello de su hijo— San, amor, aquí está papá ¿Si? Todo está bien...aquí está papá...¿qué pasó?

— Estábamos jugando con la pelota y creo que la lancé muy fuerte...no creí que le fuera a golpear a Sannie en la cabeza—Yunho miró a su hermano, estaba más tranquilo o eso creía.

— Tengan más cuidado, por dios—Colocó a San de lado y suspiró cansado— Mi amor, Sannie...príncipe ¿me estás escuchando? Yunho, pregúntale a Seonghwa si por ahí tiene el remedio de Yeosang, él sabe cuál es así que no te daré un nombre, rápido por favor.

San había tenido una convulsión, seguramente había sido el golpe porque su hijo no tenía ningún problema de epilepsia. San en ese momento era un muñequito de cristal, cualquier cosa podía afectarlo, sus hijos debían ser más cuidadosos y más con su hermano.

— Sannie, príncipe...okay, yo me quedo contigo—Se sentó en la cama cuando su hijo perdió la conciencia— Dios ¿Por qué no pueden tener más cuidado? San es como una ramita, hacen así—Hizo el gesto de romper una rama— y miren lo que pasa, salgan de acá por favor.

Hongjoong parecía molesto, no los iba a regañar después ¿Cierto?

— No es tu culpa Yuyu, fué un accidente—Abrazó a su hermano— no llores lindo, no fué tu culpa, shh...ya ¿si? Ya pasó, no fué tu culpa.

— ¿P-Por qué yo siempre t-tengo que lastimar a S-Sannie? N-No quiero—Negó ocultando la mitad de su rostro en el hombro de Mingi.

— No tienes la culpa Yuyu, fué un accidente, no llores.

No podía parar de causarle problemas a su hermano, estaba harto.