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La incógnita de que era eso tan importante que Hongjoong había ido a buscar seguía rodando por sus cabezas hasta que el alfa volvió ¿por qué olía a duraznos? Todos se asomaron por el pasillo de la puerta. Todo lo que estaban haciendo se había ido a la mierda cuando vieron al Omega en la puerta.

Mingi había vuelto a casa.

— Vamos a mostrarte tu nueva habitación—San lo agarró de la mano y lo subió casi corriendo— Mi- oh, lo siento—sonrió avergonzado cerrando la puerta, Wooyoung y Seonghwa estaban dormidos— están durmiendo, luego te la muestro, pero ven a ver la mía y la de Yunho, tiene demasiado espacio y pude decorar mi parte como quise—habló emocionado dando saltitos.

— Es muy linda Sannie, me gusta mucho ¿y esos peluche de ahí?

— El conejito y el sapito me los regaló Soobin, y ahí en la repisa tengo mis libros para colorear y mis marcadores, mira—lo sentó en la cama— él es nieve—le mostró al conejito blanco— y él froggy.

— Son muy lindos Sannie.

Se sorprendió al ver el cambio drástico en la otra mitad de la habitación, San tenía colores cálidos de su lado y Yunho tenía a la mismísima Baticueva de su lado.

— Y ven a ver la de Sanggie, pintó cosas en su pared muy bonitas, pintó un perrito y una mariposa.

¿San se había comido a Wooyoung? Sonrió con ternura y fué detrás de él viendo todo, la casa nueva era linda.

Despertó por la voz de San ¿había llevado a Soobin a la casa que sonaba tan emocionado? o quizás su hermano se había vuelto loco y hablaba con hadas con brownies especiales y elefantes negros con ojos arcoiris. Se estiró y salió dejando a Seonghwa durmiendo solo. Iría por agua, sentía su garganta seca.

— Buenos días bella durmiente ¿qué tal el sueño de belleza? ¡papá! ¡Wooyoung me sacó el dedo medio!—exclamó Yunho con una sonrisa viendo la cara molesta de Wooyoung.

— Yunho, deja a tu hermano.

Ahora era su turno para burlarse de su hermano.

— ¿Al final Yeonjun y tú están juntos o no?

— No.

— Los amigos no se besan a escondidas en los baños Woonie—Yunho volteó a verlo con una pequeña sonrisa— te gusta.

— N-No.

— Te gusta, los amigos no se besan Woonie.

— Es para reforzar la amistad—se metió San recostandose en el muro.

Los presentes rieron y el menor frunció el ceño, a ellos no les importaba si Yeonjun le gustaba o no, era algo privado de él y solo él lo podía saber.

— ¿Quién está reforzando su amistad?

Subió la cabeza y sintió que lo que veía no era real ¿se estaba volviendo loco? Se bajó de la isla y se acercó a su hermano sin poder creerlo, iba a llorar.

— No llores Woogie poh—lo abrazó levandolo al sofá junto a Hongjoong para sentarse y estar más cómodos— yo también te extrañé mucho cielo.

— No te vuelvas a ir—pidió aferrándose al cuerpo de su hermano.

— No me volveré a ir Woonie.

Hongjoong sonrió con ternura y despeinó a Mingi recordando una pequeña conversación que había tenido con su hijo cuando este tenía más o menos cinco años.

— Que lindos se ven mis príncipes con sus uniformes—se sentó en el piso para sacarles una foto.

— Papá...—Mingi movió su piecito algo avergonzado.

— ¿Qué pasa Mimi?

El niño corrió a él y se sentó en sus piernas, le daba un poquito de pena lo que iba a decir, no quería que sus hermanos lo escucharan— Papá, yo no quiero ser un principe...—habló bajito jugando con sus dedos.

— ¿No? ¿y qué quieres ser cielo? Uh, perdón ¿qué quieres ser?—preguntó más bajito cuando vió la carita molesta de su hijo.

— Yo no quiero ser un principe, quiero ser una princesa...—cubrió su carita algo avergonzado.

— ¿Una princesa? Está bien cielo—acarició su pelito— entonces ¿sabes cuál es mi princesa favorita?

— ¿La bella durmiente?—quería adivinar cuál era.

— Nop.

— ¿Elsa?

— Elsa es una reina.

— Mmh...Mulán ¿cuál?

— Tú.

Salió de su burbuja cuando Jongho empezó a gritar su nombre y a sus hijos discutir a gritos ¿qué estaba pensando?

— ¡Es tú culpa!

— ¡Yo no sé lo mostré!

— ¡Fuiste tú!

Hongjoong corrió a separarlos antes de que se terminaran matando a golpes entre Yunho y San. Mingi y Wooyoung estaban con Yeosang que estaba tirado en el suelo, Jongho solo observaba asustado sin saber que hacer.

— Basta por favor.

— ¡Por su culpa Yeosang acaba de tener un puto ataque epiléptico!

— ¡Fué tú culpa San!

— ¡Yo no he tocado el maldito celular de Yeosang, tú eres el que lo estaba usando!

— ¡Tenía que buscar algo en internet, más no toqué más nada que el navegador!

— ¡Ya basta!—Hongjoong los separó casi empujandolos— Ya, San, respira por favor, tranquilo...muy bien, ¿dónde está Yeosang?

Se descuidó dos segundos para ver a Yeosang y sus hijos ya estaban peleando de nuevo, pero esta vez a golpes. Mierda.

𝐰𝐨𝐫𝐥𝐝 𝐯𝐬 𝐩𝐚𝐫𝐤'𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora