Enemigos leales

Capítulo IV

La persona que calló en mi ,se levantó rápidamente y se quedó viéndome a la cara. Pude confirmar que sí era él.

-Cuanto tiempo sin verte,Alex- comenté viendo sus ojos de color rojo brillante.

-Delia-pudo pronunciar-creciste. No lo creo.

-Han pasado 6 años,es obvio que iba a crecer-le dije en forma burlona. Me regresó lo que dije con una sonrisa sarcástica.

-¿Puedo sentarme contigo?-me preguntó-así no estás tan sola.

-Más bien,no estaríamos solos.

-Me entendiste.
Bajo un poco la cabeza y doy unas pequeñas carcajadas.

-Claro,siéntate.
Antes de,subió su equipaje y lo puso junto al mío. Su arma también. No me dejó verla bien.
Moví mi arco y flecha abajo del asiento de enfrente. Alex se acomodó en el asiento con las manos atrás de la cabeza.
No pude evitar verlo mejor. Había cambiado igual que yo. Su cabello blanco se lo dejó crecer. Ahora es más rebelde. Vestía una playera roja con chaqueta y pantalones negros. Pude llegar notar que usaba guantes al igual que yo,pero los suyos eran rojos y los míos negros. Su piel color canela hace que se resalte más sus ojos. Que es es lo que más se caracteriza de él.

Vi por la ventana y noté que ya había amanecido. Los rayos del sol se notaron a simple vista. Dando la perspectiva de un buen día. Aún andábamos recorriendo las calles. Pero más alejados de la ciudad. Pude notar que había más gente,pero se notaba que faltaban más personas.

-¿Y bien? -dice Alex,con los ojos cerrados-¿Vas a parar de mirarme?-me mira con un solo ojo abierto y con una leve sonrisa.

-No te estaba viendo-reclamé-miré la ventana y luego ví el autobús a ver que tan lleno estaba.
Cambia la posición,cruza los brazos y me mira fijamente ya con los dos ojos.
-¿Porqué me miras tanto?

-Hehe,por nada-dice en tono de burla-es que recuerdo-se acerca mucho su cara a la mía ,olvidando mi espacio vital- que te daba miedo cuando me quedaba viéndote así por mis ojos.

No pude evitar ponerme un poco nerviosa.Las pocas personas que conocía ,respetaban mi espacio. Tiene la misma confianza que me tenía hace 6 años.

-Es cierto-dije en forma sería,ocultando mis leves nervios-pero me di cuenta que hay cosas más terroríficas a las cuales se pueden tener miedo.

-Sabias palabras-me regresa mi espacio vital-no sabía que ibas a cambiar tanto. Me agrada.

-Y yo no sabía que te ibas a volver acosador-me burlé por haber estado tan cerca de mí.

-Bueno,te pusiste hermosa. Tenía que admirarte.

Sentí mucho calor en mis mejillas cuando dijo eso. ¿Cómo se atrevía? es mi amigo. Pero muy atrevido. Aunque no había recibido un alago así de un amigo cercano hace mucho tiempo.

-Pues-hablé despacio para no titubear mis palabras-gracias. Tu mejoraste la apariencia igual. No estás tan mal.

Mi corto alago le agradó-Gracias-dijo sonriendo.
Le devolví el mismo gesto.

Nos quedamos hablando del pasado durante el camino. Le conté lo que pasó después de ese día que rescató a Teddy ,hasta la fecha actual. Al igual, él me contó de su vida después de aquel día que nos conocimos. Volaba muchos detalles,pero pudo contarme algo muy interesante. El había entrenado con un arma. Una espada con cadenas. La cual podía dividirse en dos partes gracias a las cadenas. Después de unos años,descubrió que tenía poderes de elemento fuego. Pero no le gusta usarlos porque les causa mucho dolor en la cabeza.

El autobús se fue llenando más y más mientras hablábamos. El tiempo se fue volando. Hace tanto que no compartía así con alguien. Me sentía feliz.
Al llenarse el autobús,nos notificaron que ya íbamos de camino a la Academia.
Después del aviso,Alex se apoyó en mi hombro. "Ponte así de mí", susurró ,"se que estás cansada".
Tenía razón. A si que le hice caso. Había olvidado lo cómodo que era mi amigo.

*Nota de la autora*
Perdón por no publicar durante mucho tiempo >-<.
El colegio me tiene atariada.
Tendré más tiempo para escribir ya que inicia la semana de exámenes.
Avisaré cuando salga un nuevo capítulo!
Saludos!