Enemigos leales

Capitulo VII

Saliendo de la cafetería, los altavoces decían que habíamos llegado a nuestro destino. Me acerqué a toda prisa a una de las paredes para ver detalladamente como subíamos a la superficie. Alex me siguió detrás.

-Bienvenidos a la Academia Marker- los altavoces, al decir esas palabras, empezamos a salir de las profundidades. Veía el agua caer sobre las paredes de vidrio. Luego, todo se aclaró. Se veía los edificios de la academia. Cómo si fueran una especie de castillo. De color blanco y los detalles,como los techos, de color rojo intenso.

-Esto parece mi castillo- dice Alex de forma burlona.

Lo miré y me reí con él por el comentario.

-Está ubicada tras pasar varias cuevas submarinas. Es una tierra de muy limitado acceso. Lo que les asegura seguridad a futuros enemigos. Aquí crecen plantas y árboles. También hay una basta variedad de especies animales. No se preocupen, no hay animales ni/o insectos que sean venenosos.- Se escucharon algunos suspiros y frases de alivio- Es como un campus normal de internado. Solo que tiene sus novedades para ustedes , como las salas de entrenamiento, simuladores de batalla, sala de reparación de armas, ect. -los murmullos se escucharon nuevamente, solo que esta vez de asombro -se les entregará el mapa del campus para que sepan donde están estos lugares, después de asignarles su compañero en la conferencia de apertura -voces de duda y asombro se escucharon al decir eso. ¿Compañero? ¿Trabajar junto a alguien? Esas dudas,quien sea que hablase por los altavoces, no las iba a responder. -En unos momentos empezaremos a desembarcar. Esperen el anuncio de salida.

Al decir eso,acabaron los anuncios del momento.

Siento que Alex apoya su codo en mi hombro -Eso me tomó por sorpresa-le pregunté- lo del compañero - dice liberando un suspiro- no estoy acostumbrado a trabajar en equipo.

-Yo tampoco- le digo mirándolo a los ojos- será algo nuevo para ambos.

-Supongo -clava su mirada en mí- si pusiera elegir a mi compañera,serías tu. Sin pensarlo dos veces- me regala una pequeña sonrisa burlona.

-¿Enserio?-se que no debí preguntar, pero quería escuchar su confirmación. Apenas sentía el rubor en mis mejillas.

-Sí -dice en un tono algo despreocupado -se que eres fuerte, y que puedo confiar en ti. También porque no conozco a nadie mas ¿sabes?- dice la última oración con unas leves carcajadas. Le sigo un poco la corriente. Nos quedamos mirando al otro.

-No me molestaría ni un poco -digo ya sonrojada.

-Oye,no acabamos nuestra charla -dice con tono serio.

-Gracias por esperar. Pueden empezar a desembarcar el submarino de forma ordenada. Bienvenidos a su nuevo hogar por los próximos años -los anuncios de salida lo interrumpieron. Nos quedamos viéndonos durante los anuncios. Luego bajé la cabeza.

-¿Qué tal si -empiezo a decir -lo hablamos en la noche? En un patio, o en los pasillos.

-Me parece perfecto -acepta mi idea -vamos por nuestro equipaje y salgamos de aquí.

Levanto la mirada y asiento con la cabeza. Fuimos por donde lo dejamos. Luego seguimos a la multitud para salir.

Apenas faltaba para el medio día. La luz y del sol es la misma que en la ciudad. También su calor. Caminamos directo a la entrada principal. Era algo lejos. Pero no teníamos prisa.Aunque caminaba un poco rápido por la emoción. Miraba atentamente la estructura blanca y roja.

-Pareces que vas a montarte en una montaña rusa -comenta Alex y se ríe.

- ¡Muchas gracias! -le dije sonriendo.