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Capítulo 15: La belleza de una sonrisa

#POV____

Mi mente seguía divagando… recordando las palabras que Alice me había dicho ayer

´Harry está enamorado de ti´ Joder… no. Es que… no podía creerlo. Es decir, Harry es un chico tan bueno, tierno, amable, cariñoso y es tan guapo. Se me hace imposible que el este enamorado de mí. Este tiempo lo he visto como el mejor amigo que nunca tuve, y que hacia unas semanas había aparecido en mi vida… para decirme  que me quiere y que siempre estará conmigo… pero que estúpida. ¿Y si es por eso que me trata tan bien? ¿En verdad será que le gusto?

Mi mente me juega sucio y estoy muy confundida. Yo quiero a Harry muchísimo… pero mi corazón ya le pertenece a otra persona. Y siempre he pensado que nos enamoramos una sola vez en la vida. Y que el resto de nuestros días los perdemos buscando a alguien con quien volver a sentir lo mismo. Y  por Dios que no quiero sonar egoísta, pero Justin y yo estamos tan bien ahora… que realmente no quisiera saber si Harry siente algo más por mí.

Le doy una última mordida a mi manzana y me levanto perezosamente, mientras sacudo el pasto y el polvo de mi pequeño short. Camino torpemente hacia la entrada de la casa y entro tratando de ser lo más discreta posible. Adriana la señora que nos ayuda con las tareas de la casa regreso ayer por la noche. Ya que hace unos días tuvo que salir de viaje a New york por cuestiones de su familia. Al parecer una de sus hermanas tuvo un accidente, pero por lo que escuche ayer ya está mejor.

Echando una rápida mirada hacia la cocina, observe a Adriana picando algunas verduras. Sonreí a medias y subí rápido a mi habitación.

En cuanto entre un pequeño sonido llamo mi atención. Mi celular vibraba. Lo tome rápidamente mirando la pantalla “Justin”. Mi corazón se agito, siempre pasaba cuando Justin tenía que ver. Sonreí sin poder evitarlo y conteste.

—Hola, cariño.

—Hola mi amor… ¿Estas en casa?-Pregunto un tanto nerviosamente.

—Yep… aquí mismo estoy

— ¿Tienes algo que hacer ahora?

—Si Justin, mi vida es tan ocupada-bromee. Justin rio detrás de la línea, haciendo saltar mi corazón por esa preciosa risa.

—Entonces… ¿Crees que puedas abrirme la puerta?

—Ay por Dios… ¿Estás aquí?

—Solo baja a comprobar-rio y no pude evitar saltar como niña pequeña.  Colgué la llamada pronunciando un rápido, ya bajo.

Mis piernas parecían tener un tipo de resorte, porque cada paso era más grande que el anterior. Mi corazón latía fuerte, sentía que en cualquier momento se me saldría por la boca.  Abrí la puerta y ahí estaba el… se ve tan guapo.

Bueno… Es Justin Bieber ¿No?

Di un salto, envolviendo mis piernas alrededor de su cintura. Su sonrisa se expandió, mientras colocaba sus manos sosteniendo mis muslos. Junto su boca con la mía, y un precioso beso se estaba formando. Sentí una decena de mariposas tomar vuelo en mi vientre… por milésima vez… siempre sucedía con él.

—Si siempre vas a recibirme así, tal vez debería venir más a menudo de sorpresa. –sonrió

— ¿Por qué no me dijiste que venias? Pude haber comprado algo, unas palomitas o no se- me encogí de hombros.

—No… porque, ya tenemos un plan

—Umm ¿Lo tenemos?-susurre sobre su cuello. Lo sentí estremecerse ligeramente.