Capitulo 15

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Si había un Dios en el Cielo en esos momentos le rogaba que me ayudara, los labios de ese desgraciado recorrían mi cuello dejando mordidas fuertes que me hacia gritar, pero desgraciadamente el sonido no salía al tener mi boca fuertemente tapada po...

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Si había un Dios en el Cielo en esos momentos le rogaba que me ayudara, los labios de ese desgraciado recorrían mi cuello dejando mordidas fuertes que me hacia gritar, pero desgraciadamente el sonido no salía al tener mi boca fuertemente tapada por una de sus manos, las lagrimas recorrían mis mejillas y mi respiración se encontraba agitada debido al miedo.

"Por favor que alguien me ayude, quien sea"

La punta de la navaja seguía pinchando en mi costado y si hacia algún movimiento esta se incrustaría en mi carne, sus besos se trasladaron a mi mejilla y las ganas de vomitar llegaron a mí, su aliento apestaba a alcohol y eso no era bueno, sabía que sobrio podría tratar de persuadirlo para que me dejara ir pero en esas condiciones sería imposible.

--Sabes –susurro mientras rosaba sus labios con mi oreja- soñé esto muchas veces, obviamente no de esta forma pero en todas terminabas siendo mío –Aplico más presión en la navaja y sentí un leve dolor- en todos mis sueños te desnudaba lentamente, te tendía en alguna superficie plana y abría tus hermosas piernas para poder penetrarte hasta lo más profundo mientras tu gritabas por más –negué con mi cabeza mientras mis lagrimas salían más deprisa, estaba perdido- saldremos de aquí y tú evitaras cometer alguna estupidez, odiaría tener que lastimarte preciosura. Jamás pensé encontrarte aquí, agradezco mucho este traslado que me hicieron, la suerte estuvo de mi lado -¡Ayuda! Gritaba internamente- vamos que quiero cumplir mis sueños y si te portas bien puede que sea gentil -Mis piernas temblaban mientras caminábamos hacia la puerta- limpia tus lagrimas, quitare mi mano pero si gritas te abro la espalda.

Mis manos temblaban mientras limpiaba mis lagrimas y trataba de controlar mis sollozos, este rodeo mi cintura con su brazo sin apartar la navaja de mi costado, salimos del baño y nadie nos tomo en cuenta una vez empezamos a caminar entre las mesas.

--¿Seok Jin? –Mi corazón empezó a latir más rápido de lo que ya lo hacía cuando Namjoon apareció en mi campo de visión- ¿adónde vas? ¿Sigues enojado?

--¿Quién eres tú? –Pregunto el sujeto apretando más su agarre en mi cintura, tenías ganas de gritar-

--Eso te pregunto yo a ti –dijo Namjoon frunciendo su ceño antes de volverme a ver a los ojos- ¿te vas con él? ¿Pensabas dejarme plantado? –No Namjoon, ayúdame. Eso quería decirle- ¿tenias al menos la intención de decirme que te ibas?

--N...No –negué frenéticamente, la navaja se incrusto un poco más en mi carne, Namjoon arqueo una de sus cejas al ver mi mueca de dolor-

--Déjanos pasar, es más que obvio que la princesa no quiere hablar contigo –dijo el hombre a mi lado-

--Tú te callas, estoy hablando con Seok Jin –dijo Namjoon observando mis ojos, solo deseaba que notara el miedo en ellos- Jin ¿quieres que te ayude a llevar tu auto a casa o prefieres que lo deje? -¿Qué auto? Yo vine en su auto, una bombilla se prendía cuando capte el mensaje-

Ƈυҽɾԃαʂ Ԃҽʅ Ƈσɾαȥóɳ -𝕹αɱ𝕵ιɳ 3-✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora