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Reconciliación


Después de que Jay se la pasara pensando toda la mañana sobre alguna solución factible en vez de practicar su baile, se fue a caminar un rato por la terraza para despejar su atormentada cabeza.

Él suponía que Jungwon estaba muy enojado como para siquiera querer verlo, pero no podía exigir más, la única forma de arreglar aquel embrollo era conversando, lo cual, lo veía bastante complicado, pero no había de otra.

Pensó e ideó todo lo que le iba a explicar a Yang, básicamente era todo lo que no pudo decirle el día de la discusión. Su plan tenía que funcionar.

Por otra parte, Jungwon, en un arranque de valentía, salió temprano de su escuela para ir a buscar a Jay por todas las instalaciones de la empresa HYBE y solucionar todo de una buena vez.

Ni siquiera pensó en lo que iba a decir, simplemente actuó por instinto y amor a su mayor. Lo extrañaba y necesitaba como nunca antes lo había hecho.

No ocupó mucho esfuerzo, ya que abordó la camioneta que los llevaba a la empresa, sin embargo, su corazón latía como si hubiera corrido una maratón de los juegos olímpicos.

Ni bien el auto se instaló a las afueras del gigante edificio, Jungwon bajó a toda prisa, con la esperanza de encontrar a su hyung en la sala de práctica o de canto. Trotó por los desolados pasillos con el único objetivo de ver a su mayor.

Cuando llegó al salón de baile, la puerta estaba abierta y las cosas de Jay estaban regadas por el piso, lo cual significaba que seguía allí, eso lo alivió un poco, así que decidió sentarse en el suelo y esperar a que regrese.

Luego de una hora de meditación, Park decidió regresar al lugar donde se encontraba inicialmente, el salón de baile, para recoger sus cosas e ir al colegio donde estudiaba con Yang para poder recogerlo y pedirle que conversen en alguna cafetería o...

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Luego de una hora de meditación, Park decidió regresar al lugar donde se encontraba inicialmente, el salón de baile, para recoger sus cosas e ir al colegio donde estudiaba con Yang para poder recogerlo y pedirle que conversen en alguna cafetería o restaurante, claro, solo si es que este no le fulminaba con la mirada y lo ignoraba completamente.

Bajó lentamente las escaleras, tomando valor con cada paso que daba, convenciéndose de que todo iría bien.

Cuando llegó al piso correspondiente, atravesó el largo pasillo para llegar a su destino.

Al momento de llegar, sus ojos dolieron por lo fuerte y rápido que los abrió debido a la sorpresa que le causó tal escenario.

Jungwon estaba sentado en el piso, con la cabeza recostada en la pared, junto a su mochila mientras sus tiernos y suaves brazos rodeaban con añoranza la casaca del mayor, al parecer, se había quedado dormido por haberlo esperado.

Se acercó lentamente, con la intención de no despertar al menor. Su idea era recoger su mochila e irse rápidamente y no incomodarlo, no quería enfadarlo aún más.

A pesar del cuidado que tuvo, fracasó totalmente, Yang había abierto sus ojos, enfocándolos con precisión en los suyos.

Por un largo rato de puro silencio, ambos se quedaron mirando el rostro contrario que tanto extrañaban. Recorrían cada facción como si fuera la primera vez que se veían.

Jungwon sacudió su cabeza para concentrarse, a pesar de lo fascinado que se encontraba con la belleza de su mayor, debía concentrarse lo más posible en lograr su objetivo; solucionar aquel problema que tanto martirio le había provocado en todos esos días.

-Yo ... Nosotros - respiró profundamente para luego continuar hablando, primero ordenando sus ideas - Hyung, debemos hablar-.

Jay lo miró sorprendido, pensando que lo que estaba viendo solo era una alucinación, que el verdadero Jungwon no se encontraba frente a él pidiéndole para que conversaran. Mínimo esperaba un golpe de su parte por haberlo hecho enfadar, pero no fue así.

-Claro, sí - se sentó en el suelo a un costado de Jungwon, dejando un espacio prudente entre ambos, seguía en un estado de sorpresa grande, sin embargo, estaba dispuesto a decirle a su menor todo lo que había planeado desde la mañana - Sé que tenemos algo pendiente que discutir, pero me gustaría empezar pidiéndote disculpas por lo sucedido-.

Jungwon rápidamente lo interrumpió negando con la cabeza dando a entender que era quien iba a tomar la palabra primero.

-Hyung, le debo una gran disculpa, aquel día no estaba del todo consciente de mis actos, ni de mis palabras - suspiró con pesadez, pasó su mano por sus ojos frotándolos con suavidad - Debí haber escuchado sus razones y motivos por los cuales dijo que se arrepentía de haberme besado aquella noche. Si es porque le gusta Heeseung hyung, estoy dispuesto a comprenderlo y apoyarlo totalmente-.

Jay estaba anonadado. Le sorprendió más el hecho de que Jungwon pensara que le gustaba su hyung a la disculpa en sí. Sin duda no esperaba aquella confesión tan repentina, incluso le causó algo de gracia.

-Yang Jungwon, no me gusta Heeseung hyung. Me gustas tú - incluso él quedó impactado por la confianza y seguridad de aquellas palabras - Si dije que me arrepentía, era porque desde hace unos días tenía planeado confesarme a ti, pero quería que todo saliera a la perfección como te lo mereces, por ello es que dije que me arrepentía de haberte besado aquella noche, porque quería hacer las cosas bien y no adelantarme para que no te sintieras presionado u obligado-.

Jungwon se sintió estúpido. No pasó por alto que el mayor haya declarado directamente que gustaba de él, inconscientemente sus mejillas se tiñeron de un color rosa fuerte. Incluso sentía algo de vergüenza por haberse comportado aquella forma y haber involucrado a Lee.

-Realmente lo lamento, soy un completo idiota, por mi culpa estamos así - se lamentó mientras sus delicados dedos se posaban sobre su hermosa cabellera y jalaba con algo de fuerza las hebras de sus cabellos.

Park velozmente agarró las muñecas de Yang obligándolo a soltar su cabello.

-No lo eres, esto no es tu culpa, en todo caso es de ambos o de ninguno. Ya pasó lo que tenía que pasar, podemos aprender de esto e intentar de nuevo, pero esta vez, como debe de ser - las manos del menor estaban siendo rodeadas por las del mayor, mientras este le daba pequeñas caricias con los pulgares - Yang Jungwon, me gustas mucho, siento que eres el amor de mi vida, por favor, dame una oportunidad de demostrarte todo el amor que te tengo - su voz salió firme, pero su cuerpo temblaba débilmente, delatando sus nervios.

Won sentía sus ojos aguarse, en cualquier momento largaría a llorar por lo hermoso que era su hyung.

Se lanzó sobre el cuerpo contrario, apresándolo entre sus brazos y subiendo a su regazo.

-Lo siento tanto, hyung, soy horrible, no te merezco, por favor, perdóneme. Usted me gusta demasiado, lo amo con todo mi ser - sus lágrimas corrían libremente por sus dulces mejillas.

Jay pasó sus pulgares por la terciopelada piel de su niño, limpiando todo rastro de lágrimas.

-Yang Jungwon, no vuelvas a decir eso jamás. Eres lo mejor que me ha pasado en todo este tiempo. Eres lo más hermoso en mi vida. Te amo como no te imaginas - dijo todo ello con un tono demasiado dulce y sensato, logrando que Won dejara de llorar-.

Ambos ojos se conectaron. Un brillo maravilloso nació en ellos, algo nuevo que estaban experimentando. Sus labios, de igual manera, no demoraron en conectarse también. Ansiosos por fundirse tan gratamente, expresando sus sentimientos a más no poder.

Era una beso suave, toques dulces con sabor a amor. La sensación fue mucho mejor que las veces pasadas. Sin embargo, Jungwon seguía queriendo más.




















Holi, ¿cómo están?

La verdad no sé si la historia va bien o si les gusta :( aún así, cualquier cosa estaré corrigiendo en un futuro.

Gracias por leer, cuídense mucho♡

SO BAD -《JAYWON▪WONJAY》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora