- ¿Quién es él? - Pregunte ya que como anteriormente dije, jamás le había puesto atención y valla que era atractivo.
- Olvídalo... él no te hará caso ni en un millón de años... - contestó sonriente
- Tay nadie rechaza...
- Él si... como puedes ver...
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No lo hagas Mew. Sentenció una voz en mi interior. Demasiado tarde ya lo había hecho. Gulf se sobresaltó al momento que abrí la puerta.
— ¡Basta Mew! ¡Me tengo que ir! — Dijo pero simplemente lo ignore, me adentre al auto y le quite las llaves. Bufo molesto. Rápido me hice a un lado y sacudí las llaves.
— Dámelas ya — Ordenó aún dentro del auto.
— Ven por ellas — Volví a agitarlas. Me fulmino con la mirada.
— Dámelas — Repitió.
— Ven por ellas — Arrastre las palabras provocándolo. Golpeó con furia el volante y bajó del auto, acomodó su cabello. Se veía tan inofensivo aunque claramente no lo era. Dio dos lentos pasos y tendió su mano, sin quitar su aniquilante mirada. Una vez más agite las llaves, él quería reír.
— De verdad no te entiendo — Camino hacia mí y me arrebato las llaves. Se dio la media vuelta para regresar a su auto, pero no pudo siquiera dar un paso ya que lo sujete de la cintura.
— ¿De verdad te gusto? — Susurre en su oído.
— ¡Para que me lo preguntas Mew! — Volteó y me reclamo — Si de todos modos, si te digo que si me dirás por enésima vez que yo no te intereso — Hablaba aceleradamente y al parecer no pensaba callarse. La única forma coherente que se me ocurrió para callarlo fue tomarlo por la cintura, apegarlo a mi cuerpo y sellar sus labios con los míos, no me importaba si me correspondía o no. Cerró los ojos acción que repetí. Sus manos treparon por mi pecho hasta convertirse en un abrazo detrás de mi nuca. Sus suaves labios se movían rítmicamente con los míos. Pase una de mis manos por su nuca, atrayéndolo aún más a mis labios dándole una mayor profundidad a nuestro beso.
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— Me... — Dije entre besos — Mew me tengo que ir — hablaba en susurros teniendo la esperanza de que no me escuchara y siguiéramos en ese momento qué tal vez en segundos podía convertirse nuevamente en pelea.
— Llama a Tay y dile que no irás — se separó de mis labios y me entregó el celular que rápidamente había sacado del bolsillo de su pantalón. Lo miré inseguro y lo noto ya que rio — No te haré nada — Levantó su mano extendida como si prometiera.
— Me matará — Le dije riendo — Será mejor que me vaya — Aún estaba algo atontado y desconcertado por su reacción.
— Entonces lo llamó yo — Dijo levantado la ceja.
— Nos vemos mañana — Me acerque y di un lento beso en su mejilla.
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Fue divertido volver a pasar tiempo con Tay ya lo extrañaba, hablamos sobre él y New y sobre lo que había pasado con Mew hoy.
— ¿Entonces te gusta? Eh — Soltó una carcajada dejándose caer en el enorme sillón puff azul marino.
— No — Conteste divertido tirándome en La cama de Tay — Tuve que decirlo, no pienso perder — Sonreí agrandado.
— ¿Y de verdad quieres regresar con Kao? — Preguntó con cara de molestia.
— Si — Sonreí — Pero no regresaré yo con él — Mordí mi labio inferior — Él regresará conmigo — Negó con la cabeza.
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