Hacia las estrellas✔️

✰UNA ESTRELLA✰

Es difícil contar una historia si no tienes mucho que decir, cuando tu vida es muy común y aburrida, cuando solo vivías la vida de manera  indiferente y sin sentido.

Sin embargo, llegan personas... Y cosas que cambian tu vida a darle ese toque especial.

  
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El cielo es como un mar infinito, lleno de olas que van y vienen, fuertes tormentas que se apasionan en un día lleno de dolor, el cielo nublado cuál corazón se oscurece por la soledad, gotas de lluvias que acompañan lágrimas de sufrimiento, una ventana el cuel refleja el rostro triste de la soledad.

Cual suspiro lleno de recuerdos que llenan el corazón de un nublado cielo, donde la lluvia son lágrimas de dolor, donde los ruidosos truenos son voces de auxilio, donde un relámpago es una luz de esperanza, donde un reflejo en tú única compañía, es la lluvia que acompaña, cual soledad.

Acabé el poema con mi firma.

—Señorita, carter.— Él profesor llamó mi atención, alcé la mirada y logré ver como todos mi compañeros estaban expectantes a mi respuesta.

—Sí. Disculpe ¿Puede repetirme la pregunta?— Con una mirada de súplica contesté, él profesor me miró con duda, seguramente pensando en perdonarme o castigarme.

Lo que nos pasa por estar de profundas.

—Como son unos de los últimos días para las vacaciones no tendrá consecuencias, pero por favor preste más atención.— Aclaró con seriedad, asentí y guíe mi vista directo al pizarrón en donde ya el profesor tenia un problema resuelto, abrí los ojos como platos al notar la complejidad de este problema.— y así se hace. En la próxima hora elegiré a un estudiante y elegirá a alguien al azar.

Todos asintieron, en pocos segundos el timbre del descanso había sonado suspiré y me fui del salón junto a mis compañeros.

Oh, me encantaría decirles que soy una chica normal y sociable, pero lastimosamente no lo soy, soy absolutamente todo lo contrario a la chica hermosa, de buen cuerpo, popular, que todos quieren estar con ella, nou bienvenidos a mi realidad.

Paseaba con la mirada baja y escuchando música por los pasillos del colegio, no me gustaba ir a la cafetería ya que las intensas miradas que recibía por estar comiendo sola me resultaba humillante.

Y sí, no puedo negarlo a veces me gustaría la compañía de alguien, pero no me quejo, aprecio mi soledad.

Me senté bajo uno de los grandes árboles que habitaban dentro del instituto, varias personas solo vienen a leer y sí, me gusta leer pero esta vez solo quiero disfrutar de la maravillosa vista que tengo en dirección al cielo.

Sin embargo ese momento de absoluta paz fue interrumpido por un olor repugnante, un olor conocido, giré mi cabeza en diferentes direcciones para detectar el lugar donde provenía el olor y logré hallarlo, entre los árboles y en el lugar más escondido de estos estaba él, ese chico arrogante que solo pensaba en él y su mundo, Ryan Robles.

Se que soy asocial pero él sobrepasa los límites, no le dirige la palabra a nadie desde hace años, no puedo siquiera recordar la vez que lo vi sonreír, siempre tiene una mirada fría, arrogante y molesta, aunque de todas formas refleja lo que es y no me confundan no quisiera juzgar un libro por su portada, pero si Ryan Robles fuera un libro seguro me confundiría completamente al leerlo.