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Narra T/n
El resto del día no la pasé tan bien. Los chicos me apoyaban y estaban junto a mí.
Ellos sabían la cercanía que tenía con los Gryffindors, por lo que en vez de regañarme, me comprendían.
Y eso era todo lo que necesitaba.
Ya era de noche. Tal y como la otra vez, veía como Pansy dormía y fruncía el ceño algunas veces. Lo que hacía que me muera de ternura.
No podía dormir, y ya me estaba aburriendo, así que bajé a la sala común.
Cuando llegué, me senté en un sillón y me quedé mirando el fuego.
Amo hacer eso. Es muy relajante. Y es mucho más satisfactorio si es que estás estresado o triste. Te ayuda mucho, al menos a mí sí.
Estaba tranquilamente pensando en la nada, cuando un ruido me distrae.
Para que entiendan, les voy a explicar como es la cosa. Cuando bajas las escaleras que llevan a la habitación, te encontras con la chimenea. En frente de ella, está el sillón, el cual también está de espaldas.
Yo estaba acostada, así que no se me veía. Pero estaba muerta de miedo.
Vamos. Eran aproximadamente las 2 a. m. ¿Quién podría venir a la sala común?
Los pasos de la persona se escuchaban más y más cerca, aunque de a poco se oían más y más... ¿alejados?
Miré hacia la salida y estaba mi hermano, yendo hacia el cuadro de puntitas de pie para no hacer ruido. Lastima que no funcionó conmigo.
*Pinche rubia chismosa, me cagué toda*
- Mhm - carraspeé mi garganta para que supiera de mi existencia.
El chico dio un pequeño salto, tomó aire y se dio vuelta lentamente.
Cuando vió que era yo, soltó toda esa bocanada de aire. Pero luego, frunció el ceño, demostrando un claro enojo.
- Me asustaste - *Justicia*
- ¿Qué haces vieja chismosa? - le pregunté, ignorando completamente su comentario
- Primero, no me digas así - demandó - Segundo, no me regañes porque esto te va a interesar
Le lancé a mi hermano una mirada curiosa y dije formalmente:
- Prosiga Señor Malfoy
- Bien, escuché... - hizo una pausa - Al tonto de Potter, la zanahoria pobre y su amiga la sang-
Antes de que siguiera, volví a carraspear mi garganta
- Granger - se corrigió - Decir que iban a ver a Hagrid para avisarles no se qué
En ese momento dudé. Quería ir, pero a la vez no. Era raro. No me culpen, a todos nos pasó.
- Vamos - insistió - Te podrás vengar de ellos, por todo lo que te hicieron
Al escuchar eso pensé nuevamente. Tenía razón, ellos merecen un castigo. Así que... ¿Por qué no?
Asentí convencida y fuimos rápidamente a la casa de Hagrid.
Al llegar, fuimos silenciosamente a la parte de atrás de la cabaña. Allí había una ventana, pero no intentamos ver, sino escuchar.
Empezamos a escuchar jadeos cada vez más fuertes. Como si algo le doliera a la persona que estaba ahí.
Queríamos asomarnos pero teníamos miedo de que nos vieran.
Tampoco ayudó lo que escuchamos después de ello:
- Hagrid, ¿Qué es esa cosa? - era Harry
La curiosidad nos ganó y terminamos acercándonos a la ventana para ver.
- Es es un... es un... - intentó responderle Hagrid
- Yo ya sé lo que es - lo interrumpió Ron *Wow genial, pero todavía sigo intentando recordar cuándo fue que te pregunté* - Pero Hagrid... ¿De donde lo sacaste?
- Lo gané - informó el grande - Un extraño me lo obsequió en el bar - *Pero-* - Sospecho que se alegró al liberarse de él
Todos los que estaban adentro se acercaron a la mesa al ver que un huevo se estaba rompiendo. Y se alejaron rápidamente, tapándose el rostro, cuando empezaron a dispararse cosas de ahí.
De este salió un animal. Más específicamente un dragón. Con Draco quedamos boca a abierta al ver a esa criatura, pero la voz de Granger nos interrumpió:
- Es un... Dragón? - preguntó incrédula *No, es un unicornio*
- No es solo un Dragón, es un Ridgeback Noruego - corrigió el pelirrojo - Mi hermano Charlie trabaja con ellos en Rumanía - *Me re importa, no sabes*
- No es hermoso? - dijo Hagrid - Mírenlo conoce a su mamá - habló cuando el animal iba hacia él *Eh wtf amigo* - Hola Norberto - saludó al animal - *WTF X2*
- Norberto? - repitió Harry confundido
- Si, necesita un nombre, ¿no? - dijo y Weasley rió - Hola Norberto! ¡Hey! Tititititi - dijo esto último golpeándole la cabeza levemente en forma de juego, pero el dragón estornudó con este acto y escupió un poco de fuego, quemando la barba del grande.
Este último empezó a jadear y a dar palmaditas en su barba para apagarla. Causando risa en mí y en Draco. Ambos nos tapamos la boca del otro para no hacer ruido y reímos por lo bajo. Mientras que por el otro lado, el trío de amigos se asustó.
- Ufff, tengo que entrenarlo un poco - opinó todavía golpeandose
En un momento, el hombre miró para arriba, y nos vió. *Carajo*
- ¿Quiénes son ellos? - preguntó mirándonos
Los chicos se dieron vuelta hacia nosotros, nos asustamos y Draco me dijo:
- ¡Vamos! - salió corriendo y yo lo seguí
- Malfoys - escuché decir a Harry antes de desaparecer del lugar
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PERDÓN, PERDÓN, PERDÓN POR NO SUBIR
TENGO MILLONADAS DE EXÁMENES Y NO ALCANZO A ESTUDIAR
