IDOL CAKES

2🧁

"PASTELES"

El despertador sonó en una melodía tranquila y pacífica, Jennie poco a poco abrió los ojos, aunque tenía sueño todavía, se levantó, su reloj de noche marcaba las 5:00 de la mañana, se estiró por completo y miró a su perrito Kuma que estaba con sus patitas hacia arriba, dormido tranquilamente y Jennie sonrío por lo tierno que se veía.
Se puso de pie aún con pillama y salió de la habitación para después salir por la puerta de su departamento y bajar las pequeñas escaleras que daban a la cocina de su tienda, suspiro y miró los bocadillos que aún faltaban por terminar, se colocó un delantal y comenzó a trabajar.
Después de una hora había terminado, suspiró y miró el reloj de su cocina, el tiempo era suficiente para darse un baño así que subió de inmediato. Por suerte la tienda siempre la abría Lee, su empleado que llegaría en un momento para ordenar la tienda.
Al llegar a su habitación Kuma corrió hacia ella y se agachó para tomarlo en brazos
—Hola mi bebé— acarició su pelaje — iré a tomar un baño y en seguida te daré tu alimento — colocó al pequeño en su cama y tomó su toalla de baño.

No tardo más de 10 minutos cuando Jennie salió envuelta en la toalla y fue hasta su armario para buscar que ponerse, optó por un vestido rojo a cuadros y unos zapatos negros, sencillo y bonito, pensó.

Salió de su habitación, buscó el alimento de Kuma, regó sus plantas y tomó café con algunas de las galletas que había hecho ayer, sonrío por la dulzura y miró a su alrededor, solo se escuchaba el sonido exterior, Kuma comiendo y su respiración.

Soledad.

De pronto se sintió sola, su corazón pulsó con dolor. Esta era una vida buena, pero realmente sabía que algo faltaba.

Su teléfono sonó sacándola de sus pensamientos, miró la pantalla y sonrió
—Hola mami— habló
—Hola mi pequeña— termino su café y colocó la taza sobre el lavabo —¿Como estás cariño?
—muy bien ma— ignoro la sensación que sintió antes — estaba por ir a la tienda, aunque seguramente Lee ya abrió, ¿cómo está papá?
—Ese chico Lee realmente es buen trabajador, está tan enamorado de ti que es bastante eficiente— Jennie rodó los ojos, sabiendo lo que su madre siempre insinúaba
—Madre...por favor....
—Pero bueno, tú padre esta muy bien Jennie, yo también....quisieras un nieto pero entendemos
—tengo que irme madre, hablamos después— su madre se despidió y colgó

Jennie bufo algo cansada de que su madre siempre insistía con eso, si no era que tuviera pareja era sobre tener hijos, aunque amaba a sus padres, eso era lo único que no toleraba, durante los años había estado bien sin intereses amorosos, solo había tenido algunas citas que no pasaban a nada por que nadie le gustaba lo suficiente, además de que la mayoría de sus citas solo buscaba acostarse con ella y ya, ella no era así, ella buscaba amor, pero sus esperanzas se habían desecho con el tiempo y es así que decidió poner total atención en su tienda y en prosperar en su vida, aunque sentía un vacío prefería ignorarlo.