Boys Cry || BajiFuyu

Capítulo 1

El olor que percibió chifuyu al entrar al aula era del plástico recién comprado que utilizaban algunos para forrar sus cuadernos. Algo aburrido y monótono si le preguntaban cómo lo encontraba, pero aun así le gustaba ya que para él representaba un nuevo cambio en su vida.

Claro, tratando de quitarse el nerviosismo pensando cosas bonitas e irradiando buenas vibras para evitar una vergüenza el primer día de clases en un instituto nuevo.

Pasó casi abrazando la pared izquierda del aula sentandose hasta el último lugar vacío que encontró, sacando su cuaderno y estuche como todo buen estudiante modelo que era. Empezó a dibujar garabatos en la última página de su libreta para matar el tiempo mientras esperaba a que llegara el nuevo maestro o maestra, escuchando de fondo las voces de sus compañeros, hablando de qué tipo de películas les gustan ver o si escuchaban música de alguna banda específica. Típicas conversaciones de típicas personas que apenas se van conociendo.

Miró su reloj en la mano izquierda para darse cuenta que apenas habían pasado dos minutos desde que se sentó y una ola de aburrimiento y pereza lo golpeó tan fuerte que decidió acostarse a dormir un rato.

Cerró los ojos para empezar a imaginar que estaba en una especie de drama, en el cuál él salvaba a la hermosa chica de ser atropellada por un carro. Evitó una sonrisa de fanboy para seguir con su ensoñación.

―Lindo estuche.―Chifuyu abrió los ojos lentamente para encontrarse con un chico de cabellos lilas/plateados. No sabía del todo de qué color eran ya que por los rayos del sol que le iluminaban la coronilla se veían más brillantes.

Chifuyu bajó su mirada a su estuche negro sin ninguna decoración y con un ciper color rojo.

―No creo que sea un estuche tan lindo.―respondió viendo los grandes ojos claros de su compañero de clases.

―Es porque tu no ves lo que yo estoy viendo en estos momentos.

Chifuyu frunció ligeramente el ceño viendo de forma sospechosa la pequeña sonrisa que le compartía el muchacho. Tomó su estuche y lo volteó, soltando una risa al percatarse de todos los ojos de diferentes diseños que él había dibujado con una pluma de tinta blanca. Casi se había olvidado que en ese estuche en realidad guardaba todas sus plumas que utilizaba para dibujar.

―Amigo, si no me dices que lo tenía rayado ni en cuenta de que yo hice esto.―comentó Chifuyu viendo más de cerca los dibujos en la tela, recordando vagamente los momentos en los cuales los realizó.

―Es lindo recordar las cosas que uno hace de vez en cuando.

Chifuyu solo pudo asentir al comentario, y es que era verdad. Ver esos garabatos en la tela todos mal hechos y compararlos con los que había hecho en su libreta hace unos instantes le mostraba lo mucho que había progresado en el dibujo después de tantos años de frustración.

―Me llamo Mitsuya. Mitsuya Takashi.―dijo su compañero extendiendo una mano en forma de saludo. Chifuyu alzó la vista para ver la cálida expresión de Mitsuya y gustoso correspondió el saludo con un apretón de manos.

―Chifuyu Matsuno.

De la nada, un montón de risas se empezaron a escuchar en la entrada del aula. Chifuyu miró por inercia, pero le pareció un poco extraño después de escuchar susurrar a Mitsuya la frase de "Maldito escandaloso".

―¿Quién es?―preguntó Chifuyu.

―En un momento vas a ver.―respondió Mitsuya acomodándose en su asiento.

Dos segundos después, un compañero entró al salón como si entrara a la sala de su casa. Traía el cabello rubio amarrado en una media coleta junto con la chamarra del instituto cubriendole solo los hombros. No se había fajado y Chifuyu estaba seguro que en el reglamento no los dejaban llevar sandalias.