Idhún

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Shail POV:

Alzé mi mirada y quedé asombrado ante lo que mis ojos observaban, un precioso bosque con innumerables árboles de tronco robusto y tan altos que creías que, si los subías tocarías las nubes, blancas y esponjosas, acompañadas de un precioso cielo tan puro como el agua cristalina, estábamos en Idhún, se sabía que esa belleza solo era propia de este lugar idílico, pero lo idílico es imposible y es que tras la belleza se encuentra siempre un depredador.
Ashran, un hombre adueñado por la codicia atrapado por la belleza de Idhún, lo que había llegado a la destrucción de la mitad de este. Por desgracia para mí Idhún no era ni la mitad de bonito que antes de su llegada. Ya no había unicornios pastando por los alrededores, ni dragones surcando el cielo, lo más parecido a eso eran los sherks, secuaces de Ashran.

Shail, ¿Vienes?-. Salí de mi ensimismamiento cuando oí a Victoria hablarme, al parecer los chicos ya habían empezado a tomar rumbo.

Si, voy-. Le contesté mientras aceleraba el paso para acercarme a ellos.

Vale, ¿Y hoy que se supone que haremos?-. Pregunto Jack que se encontraba detrás de mí.

Hoy acamparemos y vigilaremos el perímetro para saber cómo andan las cosas por aquí-. Respondió Alsan, a unos pasos por frente mio.

Seguimos recorriendo bosque durante un largo tiempo, no sabría decir pues estar viviendo en Alma durante mucho tiempo hace que no estés acostumbrado al día ni al progreso de las horas de este. Pero paramos cuando llegamos a una zona más o menos llana y poco rocosa, pero con árboles pues era importante que cuando los sherks pasasen no nos divisen.
Al decidir que este sería el lugar donde nos refugiariamos empezamos a montar pequeñas tiendas con tela que nos trajimos atadas entre tronco de árbol y tronco de árbol, las paredes, también de tela, colgarian pues serian atadas a partir del techo.

Fui junto a Victoria a recoger algunas plantas para cenar.

Aquellas bayas son comestibles Victoria-. Dije mientras señalaba un pequeño arbusto con pequeñas esferas de color morado. Mientras, yo arrancaba unas pequeñas flores blancas con toques dorados.

Creo que ya estaría todo-. Me dijo mientras me enseñabala cesta con frutos que habíamos recogido.
Nos dirigimos al campamento, ya casi de noche donde estaba tenuamente alumbrado para ser lo más discreto posible.

Nos juntamos en un corro y fuimos rotando la cesta, donde cada uno comía de lo que le apetecía.

Ufff, estoy lleno-. Dijo desperezandose un adormilado Jack.

Creo que será mejor chicos que vayamos a descansar ya-. Dijo Alsan a mi lado,lo siguiente que vi fue a los chicos irse cada uno a su tienda.

Aprovechando me acerqué un poco más a Alsan y coloque mi cabeza en su hombro, nos quedamos un rato así, permitiéndonos ver el poco cielo que asomaba entre los árboles, en el se divisaba una de las tres lunas de Idhún. Pero no puede evitar que un escalofrío me recorriera,empezaba a hacer fresco y lleve mis manos a mis brazos.

Hace frío, ¿Verdad? Será mejor que entremos ya-. Asentí y le seguí a la tienda. Dentro había sábanas y un colchón hecho con plantas. Me dirigió a este y me empujo de los hombros con sus manos, haciendo que caiga en este.

Es cómodo-. Le comenté palpando el colchón que hizo con las plantas, pero el solo me respondió con un pequeño asentimiento mientras se quitaba su camisa.

Le imite quitándome mi túnica y cambiándola por una más holgada. Se recostó a mi lado y me miró. Le vi los ojos, esos ojos que guardaban a una bestia,lleve mi mano a su cabeza y acaricié su cabello blanco haciendo rulos con mis dedos.

¿Ya no te cuesta controlar al lobo?-. Le pregunté calmado y sin dejar de mirarle a los ojos, sabía que era un tema delicado, pues Alsan recordaba las torturas a manos del ex-secuaz hechicero de Ashran y de que huyó por un año entero a la tierra por no hacerle daño a Victoria ni Jack.

No mucho, me costó meses pero creamos un vínculo-. Me contestó mientras tiraba de mi para juntarnos más.

Sabes, a Victoria le dolió mucho que te fueras, me lo contó, eso de tu huida y de que Jack la dejo sola durante un año, fue duro para ella, se encontraba sola-. Apoye mi cabeza en su pecho y cerré los ojos, escuchando por unos segundos su corazón.

A mí me dolió tu supuesta muerte-. Nos reimos bajo unos instantes.- Esos momentos fueron muy duros para mi, pensar que te habías muerto, los recuerdos de mi tortura y el dolor que sentía por no poder controlar mi cuerpo, no sabía que hacer.

Nos quedamos callamos después de eso, nunca me había contado como se sentía con respecto a eso.

A veces me habla-. Levante mi mirada y le observé.

¿Te habla?-. Le pregunté mientras me recolocaba para poder mirarle bien.

Si, ya sabes, no me habla como tal porque es un lobo-. Me dijo con una media sonrisa.- pero puedo sentir que es lo que me quiere decir,es como si nuestros pensamientos estuviesen conectados.

¿Y que te dice?-. Coloque mi mano debajo de mi cabeza para encontrar una postura más cómoda.

¿Ahora mismo?-. Me pregunto con una cara de duda, contesté con un un pequeño asentimiento.- Que te bese

No pude evitar ponerme colorado ante sus declaraciones.

¿Tienes pensado hacerlo?-. Pregunté mientras incorporaba la mitad de mi cuerpo y mi cara quedaba encima de la suya.

Tal vez ¿Debería,?-. Se hizo el tonto, lo que causó una pequeña risa de mi parte, al volver a mirarlo sus ojos estaban puestos sobre los míos. Nuestras respiraciones chocaban y nos acercábamos lentamente, hasta que puse mis labios sobre los suyos.

Aquel beso lento agarró velocidad y sentí sus manos recorrer mi espalda por encima de mi túnica, levanté mi cuerpo sin separar mi boca hasta subirme a su pecho con cada pierna a un lado y su mano bajo a mi pierna donde la acarició, al rato nos separamos tragando bocanadas de aire, Alsan me miraba desde abajo sin dejar de repartir caricias a mi pierna, su mano subió y se coló debajo de mi túnica, posándose en mi cintura. Yo apoye mis brazos en su pecho y baje mi cabeza para juntar nuestros labios otra vez.
Esta vez al terminar apoye mi cabeza en su torso y él nos arropo.

Creo que ya va siendo hora de dormir-. Me dijo mientras acariciaba mi espalda por debajo de mi túnica.

Buenas noches Alsan-. Dije mientras cerraba mis ojos.

Buenas noches Shail-. Sentí como depositaba un beso en mi coronilla para que después de un rato, sentir como su pecho subía y bajaba a un ritmo más lento, ya se había dormido, por lo que también decidí hacerlo.

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⏰ Última actualización: Sep 12, 2021 ⏰

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