Capitulo 1

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El camino a la nueva casa era largo, miles de kilómetros de San Francisco a Stoneybrook, un pequeño lugar donde viviríamos ahora, mamá y papá dicen que fue una oferta del trabajo, la canción del estéreo salía con poco volumen, lo que me hacía escu...

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El camino a la nueva casa era largo, miles de kilómetros de San Francisco a Stoneybrook, un pequeño lugar donde viviríamos ahora, mamá y papá dicen que fue una oferta del trabajo, la canción del estéreo salía con poco volumen, lo que me hacía escuchar mis propios pensamientos. Mis hermanos y yo no éramos tontos, esto no era una oferta de trabajo, en realidad huían, escapaban de la horrible realidad, una que por más que quisiera, no puedo asimilar.

El está muerto, mamá y papá no quieren afrontarlo, lo sé, pero yo no soy nadie para juzgarlos, tampoco puedo. Dejando de lado eso, la noche era más oscura de lo habitual, la luna, escondida entre las nubes oscurecía un poco más la carretera, las estrellas eran imposibles de ver, papá manejaba mientras yo iba de copiloto y en los asientos de atrás iban mis hermanos menores.

Tyler, mi hermano menor por 2 años, es muy impaciente y lleva diciendo ¿Ya llegamos? Más de Mil veces, Anne, mi hermana menor por 6 años se mantenía callada, algo que realmente apreciaba ahora mismo.

El ambiente no era incómodo, las canciones que escuchábamos no eran malas, todas siempre variaban, desde el género hasta el idioma. Normalmente es común en nosotros escuchar todo tipo de música, papá ama lo clásico, a mamá le gusta lo latino, Antonio, mi hermano mayor por cuatro años, prefiere el rock, Anne gusta de la música en inglés...y yo, comparto el mismo gusto que él, mi hermano mellizo, Daniel.

Tal vez ir distraída con la vista de la ventana no me dejó poner atención a la canción que pasaba por las bocinas de la camioneta de papá, lo que no me hizo reaccionar hasta que mi hermano habló.

—Quiten eso —Se estiró hasta quedar a mi nivel, tratando de alcanzar el estéreo y cambiar la canción, algo era claro, no dejaría que el tocara lo que de ley le pertenece al copiloto, con poca fuerza le dí un manotazo. ¡¿Quién se atrevía a querer quitar Olivia Rodrigo en mi presencia?!

—Deja ahí, ¿Cómo te atreves? —Lo miré con molestia, había interrumpido mi sagrado momento de paz y no solo eso, creyó que podría cambiar mi canción favorita.—¿Acaso eres el copiloto? Estamos hablando de Olivia, Tyler, ten más respeto.

Una pequeña risa llamó nuestra atención, papá nos veía con una expresión de diversión, intercalando  su vista de nosotros al camino, sonrió de lado y habló.—Hijo, sabes cómo se pone tu hermana cuando quitas a su novia Olivia —Lo miré ofendida, Tyler rió por aquel comentario.

—No me gustan las canciones que escucha Lilly —Dijo, sacándome la lengua, un gesto muy grosero.

—Y a mi tampoco me gusta lo que escuchas —Respondí imitando su gesto, que pronto se volvió una pelea que paró hasta que ambos nos pellizcamos.

—Esta bien, pero por lo menos pon una cancion de twenty one pilots y lo dejaré pasar —Fingí pensarlo.

—No —Le respondí con una sonrisa de lado, noté como su expresión cambió de una divertida a una molesta.

Cuentos De Hadas|| Mary Anne SpierDonde viven las historias. Descúbrelo ahora