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·˚✎ final ﹏
— ¿Qué dices de ir a tomar un poco de aire al parque? — Pregunto el pelinegro a la más baja.
— Tengo que volver... Jungwon estaba solo, lo más seguro es que ya haya quemado la casa para este punto. — Contesto apenada la chica.
— Solo iremos un momento. — El chico tomo la mano de la chica entre la suya.
Junghee se quedo congelada, sus latidos se aceleraron tan rápido que le preocupaba que se escucharán.
Jay sonrió al ver la reacción de la chica.
Debería confesarme pronto.
— De acuerdo... — La chica contesto después de unos segundos de silencio. — Pero primero pasemos por mi casa solo para asegurarnos que Won este bien.
El chico asintió rápido.
— Vamos rápido. — Dijo con una sonrisa antes de caminar con la chica, aún tomados de la mano.
Tierno.
ੈ♡๑
— ¿Qué te hace creer que quemaria la casa? — Pregunto el hermano de la más baja desde el sillón. — ¿Crees que me haría de comer? Para eso existe esto. — Dijo mientras levantaba la bolsa de snacks a su lado.
— Mamá te va a regañar cuando se entere que no comiste bien. — Advirtió la chica.
— Más tarde pediré de comer...
La chica soltó un suspiro derrotada a las palabras de su hermano.
— Ah por cierto. — Volvió a hablar Jungwon trayendo la atención de los dos chicos sentados a su lado. — Jay, ¿me puedes acompañar un momento a mi cuarto? Tengo un nuevo juego que mostrarte.
El pelinegro a lado de la chica asintió con la cabeza algo confundido.
— Regreso en un momento. — Aviso a la chica sentada a su lado.
Algo confundida asintió con su cabeza.
Pero... sus juegos están a un lado de la consola, justo donde estaba sentado antes...
Junghee sabía que algo tramaba su hermano menor pero por precaución, no intervendrá en ello.
Se sentó donde antes estaba su hermano y espero a que terminaran su charla mientras hablaba con sus compañeras de clase sobre la tarea que les habían dejado.
Minutos después escucho los pasos de los chicos en las escaleras, volteo a verlos y noto como Jay se veía apenado.
— ¿Qué le hiciste? — Pregunto con una gran sonrisa y entrecerrando los ojos.
