¡Tú puedes Manoban!

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Tanto las porristas como las jugadoras, portaban el uniforme. Era como hacer una promoción al partido.

Dieron las siete de la noche y ya estaba en mi auto conduciendo hacia el campo del colegio contrario. Ahora tocaba ir de visitantes.

Bajé del auto e inmediatamente la fuerte música me arrolló. Grandes cantidades de personas entraban al campo. Reconocía a algunas gracias a los colores celeste y blanco que vestían, otros rojo con azul que eran los colores del equipo contrario.

- Llegas tarde - me reclamó Joy

- Son las siete diez - le informe - tú me dijiste que estuviera aquí a las siete quince ¿no?

-Rápido ve y alístate - me ordenó.

- Ya lo estoy— sonreí

- Tu cabello sigue suelto - reiteró

-Si, lo sé - le sonreí nuevamente, eso la hacía enojar más.

- Claramente te dije que nada de cabello suelto, átalo.

-¿Y por qué tú y esas gemelas si lo pueden traer suelto?— Nayeon y Momo tampoco traían coleta.

- Porque yo soy la líder, así que átalo. - me entrego un par de listones blancos y celeste.

- Ya verás que algunas cosas van a cambiar aquí - le dije amenazantemente, tomando de mala gana los listones. No podía hacer nada, llevaba las de perder. Ella era la líder.

Corrí lo más rápido que pude al baño, hasta que logré encontrarlo. Entré y me encontré con Rosé, no puede evitar reír al verla tratar de hacer una coleta, su cabello era larguísimo. Volteo a verme, sonrió tímidamente y regreso su mirada al espejo.

- A ver...— le dije acercándome, solo me miraba con cara de "¿Y esta bipolar?"

Tendí mi mano para que me entregara la liga con los listones, hice la coleta en su cabello y de mi bolso saque un enorme paquete de pasadores. Con los cuales ayude a sujetar los cortos mechones de cabello que se escapaban, acomodé los listones.

- Listo. - le dije y me sonrío.

- Gracias - dijo aliviada - Me estaba volviendo loca. 

- No es nada - le dije seriamente, mas no llegando a lo frío, digamos con mi tono natural de hablar. Salió del baño y yo comencé con mi cabello previamente alisado, rápidamente lo até en una coleta alta, puse los listones y acomode mi coleta dejando caer ligeros cabellos.

Entre chiflidos y halagos vulgares llegué al campo.

- Tardaste demasiado. - exageró Joy - Acomódate en tu lugar - me indicó y acaté la orden - No. espera.- me detuvo - Tu. - apuntó a una de las chicas de la segunda fila - Vete al lugar de Jennie- esta abrió los ojos como platos, digamos que no le agradaba mucho la idea de estar al final - Nayeon toma el lugar de ella - al igual que la "Tu"  Momo y Nayeon formaron una 'o' con la boca.

- Pero Joy... - dijo con voz aguda, la líder puso los ojos en blanco. 

- Solo será por esta vez -dijo con fastidio -Ahora cámbiate - ordenó.

- Joy. - volvió a hablar 

- ¡Ya Nayeon! - le gritó de mala manera - Ahí te quedaras, mejora tus saltos si quieres volver a estar al frente - Wow, creo que me trata mejor a mí que soy su 'enemiga' que a sus amigas. No logro entender porque siguen detrás de ella. - Acomódate ahí - me dijo a mí que solo me dedicaba a ver la escena divertida. Caminé hacia el frente y me coloque en el antiguo lugar de Nayeon.

El partido comenzó, los gritos no se hicieron esperar al momento que los equipos comenzaban a entrar al campo.

- Eres una A NI MA DO RA - me dijo en silabas Joy - ¡Así que ÁNIMA! - me gritó ya que yo no me movía. Ni gritaba nada. Rodé los ojos y me interne en el papel de "animadora".

No habían pasado más de veinte minutos del partido, cuando comenzó a llover, al inicio eran pequeñas gotas, pero en cuestión de segundos era una lluvia torrencial. Bueno no tanto como torrencial, pero si era fuerte.

- No te quejes Momo— le gritó Joy - Solo es agua - tenía razón, solo era agua. No había motivo para quejarse como lo hacía Momo.

- Mi cabello se arruinará - dijo con desespero, solté una carcajada. Ahora si agradecía que Joy me hubiera obligado a atarme el cabello.

Ya me dolía la garganta, tenía frío y estaba cansada. Jamás había gritado y bailado tanto y mucho menos bajo la lluvia. Y aún no había hecho entrar en acción mi plan.

Cinco minutos restaban para finalizar el partido, ambos equipos estaban empatados, el campo ya estaba hecho un desastre, el verde césped se había transformado en un enorme charco de lodo. Los uniformes de las chicas ya no eran celeste y blanco, ahora eran café obscuro al igual que mis tenis que de tanto salto ya estaban para irse directo al basurero.

Quedaban menos de dos minutos, Manoban se apodero del balón, saltaba golpeando la pelota cada vez que se le ponía enfrente, Irene más adelante seguía posicionándose para atacar, acercándose a la red para esperar el pase de Lisa. Justo cuando Lisa levanto el brazo para lanzar el balón, justo ahí entraba mi plan.

- ¡Tú puedes Manoban! - grité lo más fuerte que pude, seguido de mi grito, se escucharon los gritos y aplausos de todos los espectadores.

- Ya vas aprendiendo -me hablo Joy, pero mi mirada estaba fija en alguien. Irene. Que al escuchar mi reconocible grito volteó inmediatamente hacia donde estábamos. Rodé mis ojos para posarlos sobre Lisa quien en vez de hacerle el pase a la ahora distraída de Irene, corrió hacia la red. Todo el público comenzó a gritar más y más, al ver a Lisa a solo metros de la zona, tres segundos para finalizar y Lisa se lanzó para golpear el balón por encima de la red justo un segundo antes de la finalización del juego.

Todas corrieron hacia Lisa eufóricas, chocando sus palmas, con fuertes gritos celebraban su victoria, esto aunado a los gritos y nuestros cantos, era increíble.

- ¿Qué rayos pasa contigo? - me gritó Irene, mi plan había funcionado.

-¿Conmigo? - pregunté fingiendo no entender.

- Por tu culpa perdí el pase - me reclamó, obviamente no era el mejor lugar para hacerlo. No si su novia actual estaba a escasos centímetros.

- ¿Por mi culpa? - pregunté enojada-

- ¿Por qué por su culpa? -intervino Joy

- Yo... Yo - tartamudeó como estúpida. - Por nada Joy - la tomo de la muñeca haciéndola caminar detrás de ella. Ambas me aniquilaron con la mirada y salieron de mi vista.

- Eres perversa chica - escuche la voz de Jisoo y no pude evitar reír.

- ¿Viste eso? - le dije victoriosa

- Todos lo vieron -dijo mientras se carcajeaba - Se pudría de celos -reiteró mi información.

- Ahora solo falta el tercer pájaro - sonreí pícaramente.

- Jendeukie, yo estoy segura de que ese se te escapara - cantó burlonamente.

- ¿Por qué?

- Mírala... - señaló con la cabeza a Lisa quien caminaba hacia la salida rápidamente y con cara de pocos amigos.

- ¡Demonios! - grité furiosa mientras corría por mi bolsa y solo escuchaba las carcajadas de Jisoo. - Te quiero-  le dije y bese su mejilla - ...Si fuera tú, iniciaría con los trabajos— le grité mientras corría a la salida.

-Perfecto Jennie Kim- pensé molesta –Jodiste tu perfecto plan- no lograba ver a Lisa, seguramente ya se había ido. Resignada camine hacia mi auto, caminaba entre los autos tratando de llegar al mío. – Al menos Joy e Irene no pasarán una linda noche- reí en mi interior. Seguía caminando entre la obscuridad del enorme estacionamiento. Hasta que logré visualizar mi auto. Pero antes de llegar me sujetaron de la muñeca tirándome fuertemente y tan rápidamente que no pude ni gritar.

Me, myself and I. - jenlisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora