Me, myself and I. - jenlisa

Nunca te pediría algo a ti.

Dejé la mayoría de mis libros en el casillero, afortunadamente no había tanta tarea, solo unos cuantos problemas de matemáticas y algunos resúmenes. Caminaba hacia la salida del edificio y no lograba ver a Lisa. -Más te vale que no te hayas ido Manoban...- pensé mientras la buscaba en el campus.

- Tu no te preocupes que tenemos todo el día. - una sarcástica voz me sacó de mis pensamientos.

- Te estaba buscando - le dije sonriente 

- Si, como sea. - rodó los ojos y comenzó a caminar - Sígueme - me indicó mientras se subía a su motocicleta. - ¡Dios mío! lo que tiene de amargada, lo tiene de sexy- pensé mientras la veía. Sacudí levemente mi cabeza, para salir de mis pensamientos.

- S...Si— contesté y caminé hacia mi auto, lance mi bolsa en el asiento trasero.

No fue muy largo el trayecto, solo tenía algo de dificultad al tratar de seguir la alta velocidad de Lisa. De pronto Lisa se subió a la acera, estacionando su motocicleta ahí, aunque no parecía una casa, seguramente sería su trabajo. Me estacioné y bajé no muy segura.

- Espérame. - me dijo antes de entrar a una enorme tienda de música. De todas formas entre detrás de ella.

- ¡Lalisa! - un rubio detrás del mostrador le saludo al mismo tiempo que golpeaban sus palmas - ¡Wow! ¿Y tú eres? -  le saco la vuelta a Lisa acercándose hacia mí.

- Nadie, no es nadie. - Lisa lo tomó de cuello de la camisa y lo regreso al mostrador.  -Concéntrate en tu trabajo - le ordenó.

- ¡Lisa qué bueno que viniste! - dijo una morena alta que bajaba las escaleras con ambas manos ocupadas por dos cajas - Llamo Dan... - su mirada se quedó fija en mí, analizándome de pies a cabeza. Su cabello largo y castaño, levemente desordenado, delgada, buen cuerpo a decir verdad, jeans desgastados, converse viejos y maltratados. No me extrañaría que fuera la... la novia de Lisa.

- ¿Que dijo Dan? - preguntó Lisa con cara de desespero.

- Que... que no podría pasar por Taylor ni por el pequeño... - dejó las cajas en el piso.

- Pero... ¿Por que? - el desespero aumentaba. 

- Su auto...- dijo haciendo una seña con sus manos como de explosión y junto con el rubio rieron.

- No puede ser. - dijo mirando el reloj en su mano - Me va a matar - dijo caminando rápidamente hacia la puerta - Espérame aquí. - me indicó.

- Sí, aquí espérala - sonrió el rubio cuyo nombre desconocía, mientras que era aniquilado con la mirada por la morena. 

- Lisa, pero... - hablé y regresó.

- No. - tomó su cabello entre sus manos - No puedo ir en la motocicleta por ella - regresó al mostrador - Dame tu auto -le dijo al chico quien asintió con la cabeza y se agacho.

- Aquí tienes. - le entregó una patineta

- Bambam - le dijo fulminantemente. Según lo que entendía la morena no era su novia, y la tal "Taylor" era muy importante, así que seguramente que ella si sería la... novia. - Lo siento Lisa, en esto vine - sonrió.

- ¿Tzuyu? - se dirigió a la chica alta

- Caminé - sonriente subió los hombros en manera de disculpas.

- ¿Pero qué? ¡Siempre está lleno el estacionamiento por sus autos! - dijo alterada y yo solo me limite a agitar las llaves de mi lujoso auto. Se dio la media vuelta para verme y le sonreí. Acortó nuestra distancia con aproximadamente cinco pasos.