Hermoso Error- Jelsa

Primera Noche

Hola aquí les traigo otro cap, disfrutenloo

Domingo por la mañana.

Ese día sus amigos llegarían temprano para ayudarlos con las camas de la nueva casa.

Ya que el día anterior no pudieron terminar, ella decidió regresar a su antigua casa.

Elsa estaba llegando a la casa de Jack.

Jack y Elsa esperaron a sus amigos en la puerta del departamento pero nunca llegaron.

– Qué extraño. Ellos dijeron que llegarían temprano–dijo Jack con tono preocupado.

Elsa solo asintió.

Escucharon como la puerta de la casa Overland se abría y luego se cerraba.

Nicolás y sus hijas salían muy contentos con una cesta al parecer llena de comida, flotadores de animales, maletines y llevaban puestos conjuntos de playa.

– Viejo, ¿a dónde van? – pregunto Jack frunciendo el ceño.

– ¿No te lo dije Jack? ¡Vamos a nadar al lago!– exclamó alegre Nicolás.

– ¡¿Qué? –

– ¡Tendremos un picnic hermano! – exclamo Emma ilusionada.

– ¿Por qué no me dijeron nada? – pregunto Jack.

– Porque tienes un hogar que terminar Jack–respondió Nicolás con algo de seriedad.

– No es justo– dijo Jack con decepción.

– Sí te hace sentir mejor intentaré ahogar a papá–dijo Olivia.

– ¡Qué cruel eres con tu adorable padre! – dijo Nicolás con lágrimas en los ojos.

– Serás cualquier cosa pero adorable no– contestó Olivia con indiferencia.

– ¡Elsa! ¿Verdad que soy adorable? – dijo Nicolás acercándose a la peliplateada y tomando sus manos entre las de él.

– Bu-Bueno… claro que sí… Señor Overland–

– ¡Gua! ¡Gracias Elsa! – exclamó Nicolás feliz por el cumplido.

– ¡Vamos ya! Me das vergüenza– dijo Olivia tomando a su padre por el cuello de la camisa y arrastrándolo hasta el automóvil.

– ¡Elsa eres muy dulce! – gritó Nicolás mientras encendía el auto.

– ¡Sí, sí, sí! ¡Vamos! – lo regaño Olivia por la tardanza.

– ¡Nos vemos hermano! ¡Elsa! – grito Emma sacando la cabeza por unas de las ventanas mientras se despedía de los peliplateados.

– ¡Qué les vaya bien! – gritó Elsa alegre viendo como el auto se perdía en la distancia.

Volteo a ver el rostro de Jack y dijo:

– Lo siento Jack–

– ¿Eh? ¿Por qué? – dijo confundido Jack.

– Porque por mi culpa te vas a perder la diversión–contestó Elsa con algunas lágrimas amenazando salir de sus ojos.

– Ah… por eso. No te preocupes tanto, Elsa. Así pasaré tiempo contigo– dijo casi sin pensar Jack.

Al darse cuenta de sus palabras se sonrojo.

Elsa lo observaba sorprendida.

– Di-Digo… pasar tiempo con nuestros amigos–intento corregir Jack.