Revelaciones

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Hola aquí les dejo un nuevo Cap, disfrutenlo

Domingo por la mañana.

Elsa se encontraba en la cocina preparando algunos aperitivos. Últimamente tenía mucha hambre y el bebé no dejaba de patear.

- Es cierto... Jack aún no ha sentido como pateas- pensó la peliplateada mientras se tocaba el vientre, ya bastante grande.

Sonrió dulcemente, su bebé pateó y ella lo tomó en forma de respuesta.

- Ya, ya, pronto lo sabrá- dijo Elsa riendo.

Se oyó como tocaban la puerta principal. Elsa se apresuró a abrir.

- Buenos días Elsa- dijo Emma con una gran sonrisa y en las manos traía una cesta llena de cosas.

- Hola Emma. ¿Qué es todo esto?- le pregunto Elsa viendo la cesta. Dejo pasar a Emma hasta la cocina, donde dejaron las cosas

- Aaa... ¿no lo recuerdas Elsa? La cena es hoy, aquí es su casa- contesto apenada Emma.

- ¡Ah! Es cierto- exclamó Elsa, roja como un tomate.

Elsa y Emma comenzaron con las preparativos para la cena familiar.

Desde hace unos meses, Bella había obligado a toda la familia a estar junta los domingos. Jack faltó una vez y le fue muy mal.

- Elsa, ¿en dónde está mi hermano?-preguntó Emma mientras cocinaba.

- Aún descansa. Ayer fue un día duro para él- contestó Elsa recordando el incidente del día anterior.

Después de que el hombre salió corriendo, Elsa llevó a Jack hacia dentro para poder curarlo.

Con ciudado le quitó la navaja del brazo, por suerte la herida no era profunda.

- ¿Qué te ocurrió Jack? ¿Te volviste a pelear?-preguntó la vieja Aiko, entrando a la escena.

- Fue mi culpa. Por ser tan distraída, Jack terminó herido- dijo Elsa con lágrimas en los ojos.

- Elsa...-

- Jack eres un torpe- dijo la vieja Aiko mientras tomaba una botella con alcohol y se lo aplicaba a Jack con la ayuda de un algodón.

Jack hizo una mueca de dolor.

- ¿Por qué me dices torpe?- quizó saber Jack viendo a la vieja.

- Elsa, ¿verdad? ¿Podrías ir ver si tenemos algunas vendas?- dijo Aiko señalando hacia la cocina.

Elsa asintió desapareciendo detrás de una puerta.

- Eres un torpe por hacer que esa linda chica se preocupe- dijo Aiko jaladole las mejillas a Jack.

- Pero la tenía que proteger de alguna manera-contestó Jack con algunas lágrimas de dolor.

La vieja Aiko lo soltó furiosa.

- Es cierto pero... ella no quiere que salgas lastimado por su culpa. Se más considerado- dijo la vieja dandole un golpe en la cabeza.

- Lo siento señora, no habían vendas- dijo Elsa con la cabeza gacha y entregandole una tela de color rosa.

- ¿De dónde...?- la pregunta de Jack no se terminó de formular porque consiguió su respuesta.

La falda de Elsa estaba rasgada.

- Eres muy dulce Elsa- dijo la vieja Aiko atando la tela en el brazo de Jack.

Sin que ellos se dieran cuenta, Elsa había escuchado toda la conversación. Después de eso, Jack le pidió que no le dijera nada a su familia.

Hermoso Error- JelsaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora