Mi milagro (WinYu) (JaeYong)

Quinceava Parte.

WinWin abrió los ojos con pesadez.

¿Cuándo se había dormido?

- Estas bien.- Escucho la dulce voz de Yuta.

Asintió no tan seguro. Se reincorporó aparentando los puños a sus lados y sonrió a Yuta.

- Estoy bien.

Yuta negó.

- Esos chicos han venido de la nada, lo siento, no fui capaz de verlos a tiempo.

Entonces WinWin entendió.

-¿Me han golpeado?

- No gracias s Dios, aún no te recuperas de la paliza de ayer. Solo han venido, te han llamado... Yuta llevo la mirada hacia otro lugar.- empujaron y luego y caíste mal, perdiste la conciencia una media hora, desde entonces nadie a vuelto a entrar.

WinWin sonrió.

- No tiene importancia, ¿sabes? Mientras estaba inconsciente me he soñado contigo...- Apoyo su espalda en la pared a la vez que Yuta estaba a su lado de cuclillas como la primera vez.- Recordé lo que dijiste hoy más temprano... aquello sobre verte, de una manera distinta: en mi sueño estaban TaeYong y JaeHyun... allí eras su hijo y yo el rufián que quería robarles a su tesorito.- WinWin sonrió con mucha fuerza.- Estábamos enamorados uno del otro... y si, éramos muy felices juntos.

Yuta le devolvió la sonrisa con un deje de tristeza.

- Me pregunto si así hubiese sido nuestra vida si tu hubiese vivido.-  WinWin acerco su mano hacia la mejilla de Yuta, quiso  acariciarlo... tocarlo como había hecho en su sueño, quería tomar su mano como Yuta había hecho esa mañana, pero su mano nunca dio con su mejilla, y aquello lo entristeció.- me hubiese gustado haberte conocido de esa forma...

Yuta negó con rapidez.

- Ni lo pienses... Si las cosas no han resultado de esa forma,  es porque simplemente nunca debió de ser así... nunca desees cambiar la vida que tienes, menos por mi, es mejor que no exista, es mejor de esa forma, porque tú vives, respiras y puedes ser feliz...- El castaño sonrió.- Sé que es triste, y no me corresponde decirte esto, pero no desees algo como eso, no cambies mi destino jamás.

- Yuta tú...

La puerta sono con fuerza, la voz ronca y molesta de una mujer llegó a los oídos de WinWin fríamente.

- Sichen, dirígete a la recepción ahora mismo.

WinWin se levantó un tanto extrañado

-¿Qué sucede?.- Preguntó.

- Hab venido a verte

Su corazón latió con fuerza, dio la puerta para mirar a Yuta con emoción, pero el castaño ya no estaba allí.

_______________________________

Autora original Sunnyess.