Cómo ser Pareja de un Dobe/Teme

Paso 2

[...]

Naruto

¿Quién dice que sólo Sasuke me puede pedir las citas? Claro que no.

Hoy yo lo había citado aquí en mi casa, ya que decidí que sería buena idea preparar comida juntos, incluyendo postres y demás para nuestra pequeña cita.

La cual se basaría en ver series y películas toda la tarde/noche, al menos hasta que aguantaramos.

Por cierto, mis padres si estarían en casa, al menos en la noche, ya que por la tarde trabajaban.

Y bueno, ahora me encontraba preparando todas las cosas que necesitábamos para hacer comida, cuando el timbre de la casa sonó, yo al instante sabía de quien se trataba, pues no esperaba a nadie más en mi casa ese día.

Así que con todo el entusiasmo del mundo fui a recibir a mi querido casi novio a la puerta.

- Llegué Naru -

- Me alegra verte Sasu, gracias por venir - Sonreí para después invitarlo a pasar a casa.

- No me perdería nuestra cita por nada - Me dijo mientras ambos pasamos a la sala de estar.

Realmente era un momento muy especial para lo que a mí correspondía, pues ambos nos mirábamos de una manera tan dulce que no podría decirle simplemente con palabras, era un sentimiento muy lindo, al ver sus ojos sabía que era el lugar donde quería estar.

Pero él momento se interrumpió por el mismo Teme, quien comenzó a olfatear el aire girando su cabeza de lado a lado, llegando a olerme incluso a mi, bueno, diría más que nada a mis cabellos.

- ¿No hueles a quemado? -

Disculpa, ¿Sasuke Uchiha me decía que olía a quemado? ¡¿Yo?!

- Ja, puedes pensar lo que quieras, pero hoy me he bañado ya dos veces - Dije mientras me cruzaba de brazos mirando hacia otro lado.

- No, Naru tú no, por cierto, hueles riquísimo - Me habló haciendo que me sonrojase al momento, aunque casi al instante me dejó un beso en mi mejilla.

- Pero de verdad huele a quemado... Creo que viene de la cocina -

¿Cocina? ¿Quemado? ¿Horno? ¡Comida!

- ¡Los brownies que preparé! - Y como alma que lleva el diablo salí corriendo rápidamente a mi dichoso intento de postres.

Saqué con rapidez mis tan esperados brownies, claro con la precaucion adecuada, pero simplemente estaban demasiado quedamos, no sé podían comer para nada.

- No... Mis brownies - Tomando uno con mi mano lo puse frente a mi mientras me giraba recibiendo la mirada dudosa de Sasuke.

- Yo... Había hecho brownies para ti - Sentí mis ojos picar de cierta manera y mi corazón romperse en pedacitos - Quería sorprenderte con estos... Apostaba que sabían bien Sasu, ¡Pero se quemaron! - Las pequeñas y nulas lágrimas comenzaron a caer de mi rostro mientras eran acompañadas de un puchero.

- Ey, tranquilo Naru, sé que hubieran salido deliciosos, relájate ¿Si? - Me dijo mientras colocaba sus manos en mis mejillas haciendo que lo mirara - Podemos hacer más los dos juntos ¿Te parece? -

- ¿Juntos? -

- Si -

- ¿Tú y yo? -

- Claro -

- ¡Si! ¡Vamos Teme, no tenemos toda la tarde! -

Estaba emocionado, ¿Y cómo no? Sasuke me ayudaría a cocinar, pasaríamos tiempo juntos ¡Y después comeríamos!.

[...]

Sasuke

- ¿Ahora qué hacemos Sasuke? -

Estábamos los dos sentados en el sillón de la sala mirando la televisión, aunque realmente estaba apagada.

- Tengo una idea - Me levanté de su lado para quedar frente a él sintiendo su mirada seguirme el paso.

- ¿Tienes bastantes cobijas y almohadas? -

- Sasuke, has dormido aquí, sabrás que tenemos para una nevada entera - Sonrió mientras se quitaba de su lugar quedando a un lado mío.

- Entonces vamos por ellas, haremos un fuerte aquí en la sala, ya que si es en otro lado, creo que Minato-San me querrá golpear - Le dije nervioso con lo último solamente

- Papá no es así, pero ¡Vamos Suki! -

¿Suki? De otra persona me hubiera molestado, pero haberlo escuchado de él era algo tierno y muy cálido para mis oídos.

[...]

Nuestra tarde se basó en divertidos juegos y películas después de la comida, la cual nos había quedado exquisita por cierto.

Ahora nos encontrábamos viendo uno de los tantos animes que me habías recomendado ver.

- Megumi es lindo - Dijiste con una sonrisa algo torpe pero linda, aunque me molestaba el hecho de que fuera por él y no por mí.

- Es muy serio -

- No te puedes quejar de él Sasu - Tocó mi mejilla con su dedo haciendo semi círculos en ésta.

Simplemente negué con la cabeza mientras sonreía inconscientemente al escuchar tu bella carcajada.

- Creo que podríamos dormir un poco ¿No crees? -

- ¡Si! Déjame apagar la computadora y la luz - Se levantó de su lugar rápidamente llevando el electrónico hacia otro lado, pocos segundos después la luz se había ido de la sala, haciendo que encendiera la linterna de mi celular para facilitar su vista.

Pero fue demasiado rápido que no me dí cuenta del momento en que se había colocado arriba de mí abrazándome como si de un oso se tratase.

- ¿Te sientes feliz Sasu? -

Me quedé un poco perplejo por la repentina pregunta, pero sin dudarlo mucho tiempo correspondí a tu gesto haciendo que te recuestes de lado mientras acariciaba tus cabellos.

- Claro que me siento feliz Naruto, soy el más feliz -

Puede que sea mi imaginación, pero a pesar de la nuevamente oscuridad pude vislumbrar su bella y tierna sonrisa.

Se apegó más a mí sonriendo sobre mi ropa, cosa que también hice.

Y así nos fuimos a dormir.